La producción cerealista turolense aumenta un 17,74 % en 2024 y su valor un 4,68 por ciento

UAGA-Coag explicó este viernes que el campo aragonés continuó en 2024 la tendencia del año anterior, marcada por las adversidades climática y, fundamentalmente, por la sequía en la provincia de Teruel. A esto hay que sumar los altos costes de producción y de financiación y la bajada generalizada de los precios del cereal, lo que ha hecho inviables muchas explotaciones. De esta forma, el aumento de la producción, cifrado en un 17,74 % fue mayor que el crecimiento de su valor, estimado en un 4,68 %.

La organización agraria ofreció una rueda de prensa en Zaragoza para hacer balance de lo que denominó “una campaña de contrastes que se cobra un alto número de profesionales”.

En los cultivos herbáceos, la campaña fue muy desigual y, mientras que la margen izquierda tuvo una campaña “sensacional” en cuanto a producciones, la margen derecha, principalmente en su parte más oriental, repitió un año “desastroso”.

En la zona de sequía establecida por el Gobierno de Aragón, en los municipios que se han considerado como perceptores de la ayuda directa, “el importe no palía los daños que, por segundo año consecutivo, han sufrido las explotaciones”, según UAGA. La organización precisó que “no cubre los costes de producción y, mucho menos, permite su viabilidad”.

La cuantía en las zonas con afección máxima ha sido de 30 euros por hectárea, “que cubre un rendimiento productivo de unos 120 kilogramos por hectárea, una cantidad insignificante cuando la cosecha de cereal puede situarse entre los 1.500 y los 3.000”. “Por lo tanto, esas ayudas directas del Ejecutivo autónomo, con un presupuesto de sólo 8,2 millones de euros, no compensan ni de lejos la acuciante falta de ingresos que han sufrido los agricultores y agricultoras y el agravamiento de las condiciones del sector primario en estas zonas”, argumentó.

En las zonas de sequía, las escasas precipitaciones durante la sementera (octubre y noviembre) provocaron nacencias desiguales e incluso nulas. Las lluvias llegaron en febrero, cuando ya no se podía recuperar el escaso o nulo desarrollo que había tenido durante el invierno. Esto provocó que no se completara el ciclo.

La espiral inflacionista hizo que los costes de producción experimentaran una subida “sin precedentes, mientras que el aumento de los tipos de interés elevó los costes de financiación. A estas adversidades se une la bajada generalizada de precios por tercera campaña consecutiva.

Según los datos de UAGA, la superficie dedicada en 2024 al cultivo de herbáceos en la provincia de Teruel se incrementó hasta las 177.713 hectáreas. La producción se situó en 224.453 toneladas, lo que supone un aumento del 17,74 % respecto a la campaña anterior. El valor estimado fue de 52.180.797 euros, un 4,68 %. De esta forma, el aumento de la cosecha no tuvo su reflejo en el importe percibido por los agricultores turolenses.

La producción de almendra superó las 19.000 hectáreas y el valor del fruto, los 6,6 millones de euros. Los productores de melocotón, al que se destinan 1.416, ingresaron 10,4 millones. UAGA estima que, en el caso del olivar, se recolectará un 85 % menos que el año anterior, lo que supone un 22 % de la cosecha media.

Ganadería

El sector porcino sigue siendo uno de los motores principales de la economía aragonesa según UAGA dado que supone alrededor del 39 % de la Producción Final Agraria (PFA) y algo más del 60 % de la Producción Final Ganadera (PFG).

El número de explotaciones de porcino existentes en Aragón es de 4.618, de las que 3.670 son de cebo, el 79,5 %, y 391 de producción de lechones. Con respecto al censo, las cabezas totales ascienden a 9.736.477, de las que 3.788.760 son de cebo, 2.859.152 lechones y 2.416.850 cerdos de transición.

Por provincias, las cabezas de porcino de cebo se ubican principalmente en Huesca con el 50 % del censo total, mientras que Zaragoza absorbe el 32 % y Teruel el 18 % restante.

Aragón encabeza el censo de cebo con el 29,5 %, seguido por Cataluña (21 %) y Castilla y León (15 %). Como principales productoras de carne de cerdo aparece Cataluña (41 %) por delante de Aragón (21 %) y en tercera posición se sitúa Castilla y León (11,7 %).

Con respecto a los precios fijados, la evolución fue similar a las de 2023, con un incremento en los meses de primavera y verano, para situar la media en torno a 1,76 euros el kilo, lo que supone un descenso del 6,4 %.