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El CD Teruel termina la primera vuelta perdiendo en Calahorra (2-0) El CD Teruel termina la primera vuelta perdiendo en Calahorra (2-0)
Imagen del partido de este domingo en Calahorra

El CD Teruel termina la primera vuelta perdiendo en Calahorra (2-0)

El equipo rojillo afronta tres semanas de parón con mucho por reflexionar de cara a la segunda mitad de la liga
Lo que quiso Aparicio. El CD Teruel cosechó esta tarde de domingo su sexta derrota de la temporada, la quinta fuera de casa, otro resultado negativo fuera de Pinilla volteado por el fúbol y la claridad de ideas de un ex, un futbolista de los que protagonizaron la anterior etapa del equipo hacia Primera RFEF y que en La Planilla demostró que guarda aún suficiente en sus botas para desequilibrar un partido. Se la preparó, desde luego, al once de Unai Mendia, que no fue capaz de detectar al mediapunta zaragozano y que sólo se arrimó a la puerta rival en cuanto Aparicio dejó de estar sobre el césped. 

Tan pronto como en el minuto 4, el 7 del Calahorra, el ex del Teruel, ya había cazado la espalda de Iván López para recibir un balón que bajó al piso y colocó en las mallas de Taliby de toque sutil y certero. En apenas diez segundos, un compendio de cualidades que deberá ir a buscar el cuadro mudéjar en este mercado invernal; visión en tres cuartos, rapidez de ideas con la pelota y ejecución rápida y dirigida a la portería. Adolece de esos valores el equipo rojillo, al que es fácil verle en progresión hacia la ventana del área rival; allí se asoma, ve el panorama... Y se despeña, aquejado de un vértigo que le amenaza. La derrota de esta tarde le coloca en el balcón del descenso a Tercera. 

No se le vio apresurado, con todo, a pesar de la desventaja. Bien al contrario, Aparicio siguió rondando por esas posiciones indeterminadas que comunican el centro del campo y la delantera. Le ayudó mucho la vuelta al equipo de Parra. Guarda bien el balón, y sabe conectar, pero desplazó de su rol a Marí, y hasta que se fueron entendiendo el zaragozano castigó al Teruel. Suyo fue un casi dos a cero que se le fue un poco arriba, desde fuera del área, porque el viento le jugó una mala pasada. A la media hora del choque, sólo había un equipo, el local. 

En los últimos diez minutos del primer acto sí que dio un paso adelante el Teruel. A base de centros de Iván desde la izquierda fueron cayendo algunos saques de esquina y balones parados uno de los cuales se le quedó muerto a Parra en la corona del área, a media altura. Su volea salió tímida, en vaselina; no está aún fino el vasco. Pero llamó a la caballería turolense, que terminó el primer tiempo en área riojana. Eso sí, sin acierto alguno. Y con espaldas resguardadas por donde aparecían espacios para la contra del Calahorra. Theo perdió una bola en zona peligrosa que dejó a Aparicio de nuevo diáfano para armar su zurda, se le fue un poco por fuera del palo izquierdo de Taliby.

Tras el descanso, y con uno a cero a la reanudación, otros diez minutos tardó el Teruel en entender que seguía perdiendo el partido. Fueron, en realidad, los que tardó el entrenador local en retirar a Aparicio del terreno de juego, mejor que ninguno de los otros veintiuno en el campo, pero con el fondo físico ya rebajado. Agradeció el regalo el equipo de Unai, y empezó a asediar el área local. Peru la tuvo de cabeza a centro de Le Normand a balón parado. A la hora de partido, entre Moha, Val y Theo ya tenían conquistada la banda derecha de ataque. El hispanomarroquí marró un remate de cabeza a la salida de un córner, y ya camino del 70 puso en bandeja un pase de la muerte que el francés envió inexplicablemente al río Ebro. 

Pero lo que llegó, finalmente, fue el dos a cero del Calahorra. Un penalti extraño, en la defensa de un saque de esquina en contra, le sirvió al árbitro para castigar de nuevo en exceso al Teruel, al que quizá convendría hacer un par de llamadas a la Federación, ni que sea para recordar que existe. Martínez estableció el segundo de los riojanos, losa que ya fue insalvable. No perdió la cara al partido el once visitante, volvió a tener varias claras en las botas de Marí y Caro, y en la cabeza de Jorge Domínguez, pero el resultado no se movería. Segunda derrota consecutiva para el equipo rojillo, undécimo en la tabla, en el meollo de la zona media... Que mira más hacia abajo que hacia el play-off. 

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