El Andorra da por cerrada finalmente su plantilla... Si no surge un central

Estuvo mirando, agazapado, esperando una oportunidad de mercado que de momento no puede ser, así que el Andorra Club de Fútbol da por cerrada de momento su plantilla de jugadores con un total de 22 fichas a expensas de que pudiese aparecer la oportunidad de firmar un central, esa pieza por la que el club apuró hasta incluso más allá del cierre del mercado estival. No se ha dado, con lo que el entrenador Carlos Gil afrontará estos primeros meses de competición con una defensa algo corta de efectivos aunque, por lo visto en los primeros partidos de la liga, con oficio y prestancia de sobras para caminar por la categoría; el equipo minero es, de momento, un valladar en su regreso a Tercera.

En esas posiciones zagueras destaca la dupla central formada por Guía y Blasco, que prometen la fiabilidad que mantuvo el equipo durante su caminar incuestionable en Regional Preferente. Se mantienen también Tete, Adrián y Villa, y la llegada de Basarte para el centro más la irrupción de Corral desde el juvenil completa de momento una defensa que podrá recibir la ayuda, además, de no pocos de los puntales del equipo en el centro del campo. Jai, Magu, Juárez o el también juvenil Torrollo tienen un comportamiento colectivo muy enfocado en la contención y la vigilancia, lo que será de gran ayuda para el Andorra.

A partir de aquí, todo lo demás, es gusto por el fútbol de buen toque. Monta, Ginés, Tobajas y Villalba prometen salsa en la zona de tres cuartos, y el fichaje de Alberto Gracia completa un elenco de armadores y elaboradores que también sirve para que el rival no se relaje y no tenga demasiadas tentaciones atacantes. Arriba, la plantilla minera se completa con el gol que ofrezcan Pesca, Kemo, Moha y Horno; aspira el equipo andorrano a un paso más en cuestión de mordiente, el escalón que comunicará al Andorra con cotas más altas.

De momento, satisfacción y buenas expectativas para el Andorra Club de Fútbol, que cuenta por centenares sus seguidores con una masa de socios y abonados que ya supera las 500 altas. Había ganas de volver a ver fútbol de referencia aragonesa en el Juan Antonio Endeiza, y la afición minera está respondiendo tal y como marcaban las previsiones. Lo siguiente, una visita traicionera a La Almunia, otro recién ascendido con buen inicio de competición. Después, el último fin de semana de septiembre, vuelta a casa para recibir al poderoso Almudévar.