La columna del Torico podría estar restaurada el lunes o el martes de la próxima semana

La columna de la fuente del Torico podría estar restaurada entre el lunes y el martes de la próxima semana, según indicaron ayer los profesionales del Centro de Restauración de la Fundación Santa María de Albarracín que trabajan en ello desde la tarde del pasado martes tan pronto como se tuvieron las autorizaciones. Ayer intervinieron tanto en el fuste de la plaza para sanear la piedra y colocar unas varillas, como en la parte de la columna que cayó el pasado día 19 y que se encuentra en Mármoles Llorens.

Los trabajos pueden prolongarse durante tres o cuatro días, sin contar el fin de semana, por lo que si no surgen contratiempos estarían terminados el lunes o el martes. Así lo manifestó la restauradora de la Fundación Santa María, Rosana Herrero, que junto con otro profesional  hicieron los primeros preparativos para la reintegración de la columna tanto en la fuente como en Mármoles Llorens, donde está depositada la pieza del fuste que se desprendió.

El capitel apenas ha sufrido daños y se han realizado también   en él trabajos de saneamiento, mientras que Mármoles Llorens está terminando de fabricar otra peana, que es donde irá enclavado el Torico, puesto que la pieza que había era moderna y no se puede restaurar al haber quedado completamente destrozada.

Javier Llorens, de Mármoles Llorens, indicó que en la construcción de la nueva peana se pusieron a trabajar el mismo lunes después del accidente que provocó el derrumbe de la columna, que ocurrió durante la retirada de las sogas que se colocaron para adornar la plaza con motivo de la celebración del Congreso Nacional del Toro de Cuerda.

Rosana Herrero, que es la coordinadora del Centro de Restauración de la Fundación Santa María, explicó que ayer marcaron los puntos para coser y anclar las dos partes de la columna al capitel “para que quede fijo y la estructura sea resistente”, y que una vez hecho se procederá a la reconstrucción volumétrica de las partes del fuste donde ha habido pérdida de materia.

A primera hora de la mañana  dejaron preparada la parte de la columna que está en la plaza. Limpiaron la base y colocaron varillas de fibra de vidrio con mortero para asegurar la estructura en la parte central, con la intención de que fuese fraguando, un proceso que tarda unas 24 horas.

A la vez, en Mármoles Llorens, Herrero indicó que se iban a hacer los otros tres agujeros de los puntos de anclaje para el cosido de las piezas en la plaza. Se trata de varillas de fibra de vidrio corrugadas, que al no ser lisas tienen mayor agarre en la piedra con el mortero.

La restauradora manifestó que no sabía cuándo se podrá  trasladar a la plaza del Torico la parte del fuste que cayó para proceder al cosido con el resto de la columna, aunque se espera que pueda ser hoy o mañana en función de la disponibilidad de Mármoles Llorens y siempre que haya fraguado. Precisó que en tres o cuatro días laborales estaría hecho todo, por lo que el lunes o el martes podría estar reintegrada la columna “si no hay ningún problema, que a veces los hay”.

La intervención de urgencia que se haga ahora será en la columna y se dejarán para después los daños que sufrió el bolardo. Herrero indicó que los fragmentos que se desportillaron son tan pequeños que no se van a poder coser al fuste, por lo que se reconstruirán volumétricamente. Para ello se utilizará un mortero específico de restauración a base de cal.

Esa intervención se hará en la misma plaza una vez cosidas las partes de la columna. En Mármoles Llorens han limpiado también las zonas que tenían lechada de cemento y limpiado el agujero central con el óxido que quedaba del vástago de hierro que había, y que estaba deshecho totalmente, además de sacar los mapas para hacer el traslado de puntos de unión.

El fuste que cayó no ha sufrido graves daños, puesto que algunos golpes estaban ya, tal como han comprobado contrastando con fotografías. Tras su reconstrucción volumétrica con el mortero que se aplicará en esas zonas desportilladas, se reintegrará cromáticamente con la técnica del estarcido. Herrero indicó que así no se notará de lejos que es una reintegración, aunque sí se apreciará muy de cerca. La técnica consiste en aplicar puntos de colores yuxtapuestos que consiguen simular el color que se pretende sin aplicarse una tinta plana. La intervención principal se hará en la moldura del fuste que hay debajo del capitel, así como en las esquinas de este que se han dañado, y en la base de la columna.