El Ayuntamiento de Teruel cede a Cáritas una vivienda para destinarla a personas en situación de exclusión

El pleno del Ayuntamiento de Teruel ha aprobado este lunes por unanimidad la cesión a Cáritas Diocesana de Teruel y Albarracín de una vivienda de titularidad municipal situada en la capital para destinarse al alojamiento temporal de personas en situación de exclusión, con dificultades de integración familiar o social, en régimen terapéutico de autogestión, bajo la tutela y apoyo técnico de un servicio especializado y sin coste alguno. El plazo de duración de esta cesión de uso es de 25 años, ha informado el consistorio en una nota de prensa.

Según ha defendido la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, la vivienda es un derecho fundamental por si mismo y entorno a ella se articulan una parte importante de otros derechos inalienables como la alimentación, el bienestar social o la salud. “Sin una vivienda digna, no hay una vida digna”, ha declarado Buj quien ha vuelto a subrayar que el equipo de Gobierno está especialmente sensibilizado con los temas sociales y con las personas en situación de exclusión residencial o con dificultades de integración familiar o social.

Tanto es así, ha añadido la alcaldesa, que el Ayuntamiento tiene cedidas 13 viviendas para estos fines. Seis de ellas están cedidas a entidades sociales, concretamente dos a Cáritas Diocesana de Teruel y Albarracín; una a Cepaim; otra a Atadi y dos más a Asapme. 

Las siete viviendas restantes están cedidas a administraciones. Cinco están en manos de la DGA  en una bolsa de alquiler social: otra conjunta a DGA y DPT para víctimas de violencia y la última la coordina el IASS en un programa de emancipación personal.

El propósito del Ayuntamiento de Teruel con estas cesiones es poner en manos de entidades sociales especializadas o administraciones con competencias en materia social para que ofrezcan una infraestructura adecuada y dotada de espacios y equipamientos propios a personas y familias sin recursos o que pasan por una dificultad concreta, que bien puede ser un desahucio, conflicto familiar o violencia de genero.