Igualdad en la Superliga: menos aristocracia y más clase media

En la presentación ante los medios de comunicación del inicio de la pretemporada del Pamesa Teruel Voleibol, a comienzos de esta semana, el presidente Carlos Ranera hacía un análisis rápido pero contundente acerca de las expectativas del equipo para la próxima temporada. En resumen, estar ahí cuando toque pelear por los títulos. Bajo una idea que debe quedar clara: “Se puede ganar a cualquiera, y también se puede perder con cualquiera”.

Una forma muy ilustrativa de reconocer que el club naranja ha dejado de pertenecer a la aristocracia del vóley nacional. No es el único;ˆGuaguas se ha convertido en el dominador de la competición en España. “Económicamente son poderosos”, y bajo su músculo se ha producido una readaptación, una reconfiguración del espacio y los objetivos del resto de los equipos de la Superliga, entre ellos Pamesa. “Hay plantillas que pueden ganar a cualquiera, entre ellas estamos nosotros”. De Guaguas hacia abajo, máxima igualdad.

Sólo un ascenso

Guaguas ha roto el tablero, y sus golpes de chequera obligan a Almería, Soria y Teruel a medir al milímetro hasta qué punto merece la pena armar determinado nivel presupuestario para, al final, no terminar de verlo plasmado en títulos. Ello configura plantillas, como la de Pamesa, dirigidas no tanto a ser campeonas, sino a ser semifinalistas y ver qué pasa. Lo cual ha permitido a otros clubes escalar también ese peldaño de lucha para los play-off: Melilla, Cisneros de Tenerife y Leleman Valencia son ejemplos de nuevos aspirantes que se incluirán en el pelotón de meritorios.

Y, para este año, un elemento añadido que todavía incidirá más en la igualdad y la imprevisibilidad que van a acompañar a la Superliga de este año. Vóley Palma descendió en el terreno de juego, pero le compró a Boiro la plaza de ascenso que obtuvo el cuadro gallego, con lo que sólo habrá un relevo en la categoría; cae Petrer, y asciende otro que además también es clásico, el Sant Pere i Sant Pau de Tarragona. Por lo tanto, estará reñida la categoría en este curso que comenzará en octubre. Y por ello Pamesa ha comenzado su trabajo de pretemporada pertrechado en su cuartel general, concentrado en el laboratorio de Fabián Muraco un mes casi completo hasta que empiece a jugar amistosos.

Sin percances

La primera semana de trabajo en Los Planos concluye sin percances, lesiones ni más contratiempos, a la espera de que el lunes se incorporen los argentinos Pablo Urchevich y Mariano Vildósola pendientes de sus trámites administrativos, y con dos internacionales preparando con España los torneos de clasificación para la Eurocopa, Rubén López y Emilio Ferrández. Desde el lunes, segundo capítulo de la preparación naranja: “Empezaremos a hablar de voleibol”, predice Muraco.