Síguenos
El pivote que vio crecer a Nico El pivote que vio crecer a Nico
Anton Fruniz, nuevo centrocampista del Teruel, jugó varias temporadas con Nico Williams en las categorías inferiores del Athletic de Bilbao

El pivote que vio crecer a Nico

El nuevo jugador del Teruel, Fruniz, coincidió cuatro años en Lezama con el menor de los Williams
banner click 244 banner 244

La cantera de Lezama, la del Athletic de Bilbao, se precia de ser, con fundamento y tradición, una de las más prolíficas y productivas dentro de las estructuras formativas del fútbol español e incluso a nivel internacional. Cuenta el propio club que esta noche, en la final de la Eurocopa de Alemania entre las selecciones de España e Inglaterra, la cantera con mayor representación de futbolistas en este decisivo partido será la del Athletic:ˆlos porteros Unai Simón y Álex Remiro, los defensas Dani Vivian y Aymeric Laporte... “todos ellos formados en la factoría del Athletic, estarán presentes el domingo en Berlín”, dicen los vizcainos.

Yˆentre ellos, además, sobresale uno de los nombres propios de esta competición continetal, “un evidente espaldarazo al trabajo realizado en Lezama durante los últimos lustros”. Nico Williams, recuerda el Athletic Club, se incorporó al Alevín B rojiblanco en verano de 2013, escalando por todas las categorías rojiblancas hasta llegar a la élite en 2021, donde acumula 122 encuentros. Y en ese periodo, en esa formación del extremo hasta convertirse en la revelación del torneo, coincidió durante cuatro años con el último fichaje del CD Teruel, el pivote Anton Fruniz.

Ingresó a los diez años

Como señala el Teruel en el anuncio oficial de su fichaje, Fruniz, nacido el 7 de febrero de 2002 en Bilbao, es un joven centrocampista de 22 años procedente de la SD Gernika. “Físico y despliegue para la medular rojilla y con experiencia en Segunda Federación tras su última temporada” bajo el árbol de esa ciudad vizcaína. Y, como corolario, una extensa formación en las categorías inferiores del Athletic de Bilbao, en las que recaló con apenas diez años de edad, en 2012, para entrar en el equipo alevín de Lezama.

Un año después del ingreso de Fruniz llegaría a la fábrica bilbaina un niño procedente de Pamplona, de ascendencia ghanesa, y con unas condiciones especiales para el fútbol en aceleración, desborde y disparo. Y desde ese 2013 hasta 2017 transcurrieron cuatro temporadas completas, desde alevín hasta cadete, en las que Anton Fruniz y Nico Williams coincidieron en esas categorías inferiores del Athletic de Bilbao, en las que Fruniz pudo contemplar desde el centro del campo las diabluras de ese extremo que ahora configura junto con Lamine Yamal la dupla de exteriores de moda en la Eurocopa que termina esta misma noche.

El fútbol, la evolución de las carreras, los talentos y también la suerte, ha deparado que Anton Fruniz vaya a ver desde Teruel, en Segunda Federación, las evoluciones de su antiguo compañero, el internacional español Nico Williams, que está a un paso de convertirse en campeón de Europa de selecciones. Ya ha sido vencedor de Copa con el Athletic, titular indiscutible en las competiciones europeas que disputa su equipo, posible fichaje para el Fútbol Club Barcelona... A casi 500 kilómetros de distancia, el destino le reserva a su compañero Fruniz otro reto diferente, quizá menos brillante, mediáticamente menos relevante, pero para Teruel, seguramente, fundamental.

Sobre la dupla que formará Fruniz con Parra, el centro del campo titular del Gernika del curso pasado en Segunda RFEF, pivotarán buena parte de las opciones de éxito del proyecto del conjunto mudéjar para esta próxima temporada. Williams, con Yamal, Olmo, Rodri... están haciendo olvidar a los campeones del mundo: Xavi, Villa, Iniesta o Casillas. A Fruniz le tocará hacer olvidar el centro del campo que formaban Tena, Castillo y Romero. Para el Teruel, algo igual de importante.

 

El redactor recomienda