Gabriel Sopeña, Ester Vallejo y The Moorland se reparten los premios de la música

Los tres grandes favoritos de la noche, Gabriel Sopeña, Ester Vallejo y The Moorland, se repartieron este sábado los principales galardones en la 26ª edición de los Premios de la Música Aragonesa que se celebraron en el Teatro Marín de Teruel. Se hicieron con Mejor Solista, Mejor LP y Mejor Grupo respectivamente, en una noche en la que la banda EFFE y el productor y DJ Fernando Moreno  fueron las dos referencias turolenses galardonadas. Por su parte Artistas del Gremio se llevaron el Premio Especial a la Trayectoria y Amparo Sánchez (Amparanoia) el Premio Global de la Música Aragonesa.

Precisamente Amparo Sánchez y Artistas del Gremio fueron quienes protagonizaron el arranque de la intensa gala, que se celebraba por segunda vez en la provincia de Teruel y por primera en la capital. La andaluza, una de las pioneras del mestizaje musical en España, sorprendió al público recordando Hipnosis Colectiva, el disco que editó en 2021 junto a Artistas del Gremio, con temas inéditos y versiones de sus propios temas al ritmo charanguero de los zaragozanos. Tras ese disco el tándem musical inició una exitosa gira que incluyó el Poborina Folk 2023, y que se reeditará este año a partir del 5 de abril en Zaragoza.

Amparo Sánchez recibió el Premio Global de la Música Aragonesa, uno de los premios sorpresa para los que no había nominaciones, mientras que Artistas del Gremio, que celebran su 20 aniversario, recibieron otro, el que destaca la Mejor Trayectoria.

El tercero de los premios sorpresa fue para la banda turolense EFFE, que el viernes había ofrecido un gran directo en el Flanagan’s junto a Luis Cebrián. EFFE, que está a punto de lanzar su quinto disco, primero de ellos en directo, recibió el Premio Itinerante, que este año Aragón Musical concedió “por la visibilidad que desde hace diez años están ofreciendo al rock y a la música turolense dentro del panorama aragonés y nacional.

El otro ganador turolense fue el productor y DJ Fernando Moreno, responsable del remix de Potra Salvaje (Isabel Aaiún/Pablo Mora). Moreno consiguió el hito de colocar esa versión entre las más escuchadas a nivel mundial durante el verano de 2024, antes incluso de que la selección española de fútbol que ganó la Eurocopa la adoptara como himno oficioso y sonara por todo lo algo durante la fiesta de celebración en Cibeles.

Quienes no lograron levantar ninguna de las estatuillas diseñadas por el artista de Burbáguena José Azul fueron Vizcaíno Reyes, nominado a Mejor LP por Identidad y a Mejor Proyección, o Mario Lafuente, que aspiraba a Mejor Proyección y a Mejor Diseño, por la portada de su sencillo El niño creado por Lucía Cordero. Tampoco lograron el premio de este año el Festival Sonoro de Alcañiz o el audiovisual De Zaragoza a Berlín firmado por la cineasta Paula Ortiz, que cerraba el grupo de nominados de la provincia de Teruel.

Sopeña & Vallejo

Gabriel Sopeña y Ester Vallejo no solo fueron dos de los grandes triunfadores de la gala -el primero se llevó el Premio a Mejor Solista y a la Mejor Producción por su disco Desiertos, con Guillermo Mata a los mandos, y la segunda ganó Mejor LP con A la fresca y Mejor Audiovisual por el videoclip del tema central de ese disco, exaequo con el programa Tenía que ser de aquí de Aragón TV sobre Pau Donés-, sino que además protagonizaron uno de los momentos de la gala que quedarán para el recuerdo.

Fue cuando el compositor y crítico  musical y la investigadora, cantante y percusionista ofrecieron todo un himno de la música aragonesa y de la España Vaciada, el Hay una cruz en el saso de Más Birras, que escribió el propio Sopeña a finales de los 80. Con ellos tocó el contrabajo Guillermo Mata, músico que militó en Berzas -entre otras bandas-, hermano de Miguel, bajista original de Más Birras, y miembro de La Estrella Azul que ha provocado el revival de Mauricio Aznar gracias a la película de Javier Macipe.

Otros momentos estelares de la velada los ofrecieron el rapero El Momo, ganador del premio a Mejor Canción por De barrio, que grabó junto a Estopa y que ayer sonó con DJ Fleki Flex a la mesa; o Juanjo Bona, el jotero de Magallón que se hizo con el premio a Mejor Proyección, el único de los 18 que se conceden por votación popular.

Otro de los premios más esperados de la noche, el de Mejor Grupo, recayó en The Moorland, la banda binefarense formada en 2022 por cinco experimentados músicos como Jorge Gallart (guitarra, voz), Leandro Lasheras (sintetizador), Javi Torres (bajo), Óscar Mur (guitarra), Oscar Satué (percusión), cuya propuesta -lanzada en el EP Songs of rats- pasa por el postpunk en inglés.

Por su parte Elem recogió el premio a Mejor Portada por la obra de Jaime Oriz; Multipla, Mejor Epé por Lola; Tiedas de San Chuan de La Orquestina del Fabirol fue la Mejor Canción en Lengua Autóctona Aragonesa -y agradeció su premio en aragonés-;  el espacio zaragozano de La Lata de Bombillas, el de Mejor Sala; y el ciclo de Músicas Dispares de Zaragoza Bombo y Platillo ganó el Premio a la Mejor Programación.

En la parte institucional, el director general de Cultura del Gobierno de Aragón, Pedro Olloqui, y la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, coincidieron que la cultura aragonesa y en particular su música viven “un momento dorado”, y celebraron que Teruel forme parte de eso.

La 26º gala de los Premios de la Música estuvo organizada, como siempre, por la plataforma Aragón Musical. En esta ocasión, primera en la que llegaba a la capital turolense, estuvo patrocinada por el Ayuntamiento de Teruel, junto al Gobierno de Aragón, Cervezas Ambar, Universidad de San Jorge y Corporación Aragonesa de Radio y Televisión. La fiesta que tuvo lugar en el Teatro Marín se emite a partir de las 24 horas a través de Aragón TV, y puede verse en diferido a través de la emisión A La Carta de la televisión pública aragonesa.