DobleUve reedita ‘Crónica Humana de la Batalla de Teruel’, de Pompeyo García

La editorial turolense DobleUve acaba de lanzar una nueva reedición de Crónica Humana de la Batalla de Teruel. Hechos y testimonios de 71 días de la Guerra Civil, cuya edición original salió a la calle en 1997. Como en la edición original, se trata de una refundición del manuscrito de Pompeyo García Sánchez, realizada por Toni Losantos, en la que narra pormenorizadamente los detalles de la Batalla de Teruel día a día, casi a modo de diario, al mismo tiempo que apoya su narración en numerosos testimonios en primera persona recogidos a lo largo de los años y ofrece información sobre los principales personajes inmersos en la doble conquista militar de Teruel, los episodios fundamentales de la contienda y también mapas que explican geográficamente esos casi tres meses decisivos en el Frente de Aragón.

Crónica Humana de la Batalla de Teruel sigue siendo uno de los textos de referencia en el análisis de la Batalla de Teruel, sobre todo porque enriquece la sucesión de datos y números propia de un ensayo de corte histórico, bien documentados y con abundante bibliografía, pero que no contextualiza lo suficiente los sucesos, con testimonios de personas de todo tipo, narrando episodios muy concretos, en muchos casos con nombres y apellidos, algunos de los cuales no quedaron registrados sino en la memoria -frágil y maleable en algunos casos, aunque no menos que los datos que quedan reflejados en los informes oficiales, esto lo tiene que juzgar el lector- de quienes los vivieron en vivo y en directo.

Algunos de los libros de historia más recientes que se refieren a la Batalla de Teruel, como el que publicó David Alegre Lorenz en 2018, siguen citando el texto de Pompeyo García, que a pesar de que estaba agotado seguía siendo demandado por algunos aficionados al estudio de la guerra civil. La primera edición se publicó en 1997, coincidiendo con el 60 aniversario de la Batalla de Teruel. Según Pablo Perruca, de la editorial DobleUve, “después de la primera edición de la Imprenta Perruca se lanzó alguna reedición más”, una de ellas en 2001, “pero ahora mismo estaba prácticamente agotado. Quedaba alguno por ahi, pero no era fácil conseguirlo y había gente que seguía interesada”.

Eso ha movido a los editores a lanzar una nueva edición del texto tal y como lo reescribió Toni Losantos. “Losantos dio forma más literaria y ordenó toda la información que había recopilado Pompeyo García, su peripecia vital y la de tantas personas con las que habló”, explica Perruca, que apunta que “preguntar y hablar con las personas que estuvieron allí, o que conocían datos y anécdotas de primera mano, fue una constante en su vida”.

El propio Pompeyo García, que dedicó el libro a su padre, “una víctima más de las miles que se cobró la Batalla de Teruel”, según la dedicatoria que reproduce la nueva edición, narró en ese libro su dramática y vibrante peripecia cuando era solo un niño de apenas 12 años. Pero además García se ilustró con toda la documentación que cayó en sus manos, publicada e inédita, y fue un incansable conversador gracias a cuyo tesón y sistematismo pudo componer y redactar -con la ayuda estilística de Toni Losantos- uno de los mejores crisoles sociales y humanos que se han escrito sobre la guerra-.

Según escribió el de Cedrillas en la introducción a la obra, esta fue producto de “una obsesión y una sed de conocer el pasado” y de no dejar que muriese en el olvido. “Yo siempre he deseado profundizar en el tema, por triste y desagradable que este fuese. El ocultar los hechos, el protegerlos con el silencio, la vergüenza o el miedo, no impide que hayan sido ciertos”.

Sirva también, como declaración de intenciones, un párrafo extraído también de ese preámbulo: “He leído cuanto he tenido a mi alcance y he escuchado con atención cuantas versiones me han contado muchos de los participantes. Todos creen saberlo todo. A muchos los engaña su voluntad o su deseo. Haber intervenido en alguno de los combates no es conocimiento suficiente para explicar los setenta y un días de contienda. Tampoco yo voy a descubrirlo plenamente, ni mucho menos voy a dar carpetazo a este periodo de la guerra: quedaré satisfecho si con mi grano de arena contribuyo a una elaboración completa y rigurosa de la historia de Teruel”.

Y eso pese a que el texto no se desgrana como una investigación histórica destinada a sacar a la luz datos desconocidos y confirmar los que ya se saben; eso se había hecho antes y se siguió haciendo después. La crónica de Pompeyo García tenía como objetivo conocer el relato que vivieron en sus carnes numerosas personas de muy índole condición e ideología, para conformar un rico retrato humano.

La reedición de DobleUve respeta el texto publicado en 1997 tal cual, y tan solo aporta como novedades sobre esa edición la fotografía de portada, una imagen de la plaza del Torico -donde la columna está apuntalada y sin el símbolo de la ciudad- fechada el 18 de febrero de 1938 por la Biblioteca Nacional, propietaria de la imagen, “y algunas otras fotos en las últimas páginas, también propiedad de la Biblioteca Nacional”, según explica Perruca, además de las pertenecientes al archivo personal de Pompeyo García, a la editorial o a recortes de prensa, que ya aparecían en la edición original.

Considerado un referente entre los estudiosos del tema

Pompeyo García Sánchez (Cedrillas, 1926-Teruel, 2001), trabajó como funcionario de los Servicios de Telecomunicación, fue colaborador habitual de Lucha, en el suplemento La voz de la Sierra dedicada a la comarca de Gúdar y DIARIO DE TERUEL, donde firmaba como Yo-Gar; además colaboró habitualmente con El Muletón, boletín informativo de la Asociación Batalla de Teruel (Abate), que en su número seis de 2002 publicó su último artículo, a título póstumo.

Su permanente búsqueda de testimonios sobre la contienda, no solo en Teruel sino también fuera -su trabajo le llevó a vivir en numerosas ciudades españolas- le proporcionó un ingente archivo de entrevistas, documentos y recortes de prensa, que le convirtieron en un consumado especialista sobre el Frente de Teruel, y fueron la materia prima de su obra. Antes de Crónica Humana de la Batalla de Teruel había publicado su primer libro, La Feria de Cedrillas en su primer centenario. Persona muy querida y respetada, su fallecimiento se produjo el 3 de diciembre de 2001 a los 75 años.