Este año si. No con toda la normalidad que debiera, pero casi, este año si hemos podido celebrar la tan esperada Gala del Deporte en nuestra ciudad. Por un día nos hemos permitido el lujo de ser el epicentro deportivo de nuestro país, con los focos puestos en nuestra ciudad, en nuestro pabellón, en nuestra gente e incluso en nuestros problemas.
Y es que es todo un logro, y un buen espaldarazo que un evento de esta magnitud tenga acogida en Teruel. Con la llegada de deportistas del más alto nivel, que hace unas semanas estaban colgándose medallas en unos Juegos Olímpicos, o leyendas en materia deportiva en España como Iker Casillas o Mireia Belmonte, entre otros. Seguro que para muchos de los asistentes era su primera visita a Teruel, y aunque fuera efímera no está mal que sepan colocarnos en el mapa.
Una gala bonita, con ese merecido homenaje a todos los sectores que han participado y siguen participando de una manera notable en la lucha contra la pandemia, en primera línea de fuego, y sabiendo que aún queda camino por recorrer. Y todos nuestros deportistas, que son muchos, a nivel individual y a nivel de club, porque Teruel es una ciudad que va de la mano del deporte, y no sólo el profesional acompañando a nuestros equipos más importantes, sino a nivel semiprofesional, amateur e incluso simplemente por diversión.
Que todo esto sirva para hacer ver también lo que es necesario para practicar el deporte y ser aficionados del deporte, desde instalaciones en condiciones hasta ayudas para el deporte base, ese que ahora es el futuro pero que un día no muy lejano será el presente, y que hay que trabajar por cuidar, mantener, hacerlo crecer y que nadie deje de hacer deporte porque no haya posibilidad.
Ver retransmitida una ceremonia de esta índole desde Teruel es motivo de orgullo, ver caras mundialmente conocidas recogiendo premios en nuestro pabellón es algo grandioso, pero también ver las caras conocidas del ámbito deportivo local, seguro que faltaron, pero cada uno cuando piensa en el deporte que más le gusta o del que es aficionado, seguro que vio rostros turolenses de los que todos nos sentimos un poco identificados.