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El Bajo Aragón premia a sus “inspiradoras” en la tercera Gala de la Mujer Bajoaragonesa El Bajo Aragón premia a sus “inspiradoras” en la tercera Gala de la Mujer Bajoaragonesa
Premiadas y autoridades, ayer en el salón de actos de la Casa de Cultura Víctor Romero. Ayuntamiento de Calanda

El Bajo Aragón premia a sus “inspiradoras” en la tercera Gala de la Mujer Bajoaragonesa

La comarca homenajea en Calanda a nueve referentes con el respaldo de la directora del IAM
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La Comarca del Bajo Aragón homenajeó este sábado en Calanda a ocho mujeres y una asociación “inspiradoras” en una ceremonia que celebra “su esfuerzo, dedicación y contribución” al territorio.

Por tercer año, la Gala de la Mujer Bajoaragonesa no solo premió logros individuales, sino que también puso en valor el papel fundamental de la mujer en la vida de la comarca y su lucha diaria por una sociedad más justa e igualitaria. En esta ocasión se reconoció a la calandina Cristina Tello, la alcorisana Isabel Félez, la torrecillana María Pilar Lorenzo, la valdealgorfana Malén Celma, la codoñerana Elia Sancho, la bergelina Estela Ferrer, la focina Margarita Nuez, la Asociación Amas de Casa de Castelserás y, a título póstumo, a la alcañizana Beatriz Royo.

Además, por primera vez se entregaron otros dos premios a dos auxiliares de ayuda a Domicilio que se jubilan en 2025 después de más de 20 años de servicio para la comarca, Isabel Herrero y Carmina Videira.

La gala contó este año con la actuación de Vicky Lafuente, cuya voz emocionó al público que abarrotó por completo el salón de actos de la Casa de Cultura Víctor Romero de Calanda; y la participación de Políglota Teatro, que hizo reflexionar a través del arte en clave feminista.

La gala contó con la presencia de la directora del Instituto Aragonés de la Mujer, María Antoñanzas, invitada por el presidente y vicepresidente de la Comarca del Bajo Aragón, José Miguel Celma y Alberto Carmona. Asistieron también el alcalde de Calanda y diputado por Teruel en el Congreso, Alberto Herrero; la diputada provincial y delegada de Bienestar Social e Igualdad, Beatriz Redón; o el diputado en las Cortes de Aragón Juan Carlos Gracia Suso.

“Hay que visibilizar la lucha por los derechos de las mujeres. El 8M es un buen momento para hacer eventos inclusivos, llegar a toda la población y trasladar el mensaje a los convencidos, los que no lo están tanto y los que no lo están nada”, dijo Carmona, quien emplazó a próximas celebraciones en más municipios.

Antoñanzas calificó de “excelente” la iniciativa en una jornada en la que “tenemos que seguir reivindicando que nos queda un largo camino todavía” por recorrer entre hombres y mujeres “para que la igualdad sea una realidad”. Queda por hacer, dijo, en materia de conciliación, corresponsabilidad, emprendimiento femenino, techo de cristal y violencia de género.

Herrero subrayó que el 8M hay que seguirlo “todos los días” para ser “una sociedad justa e igualitaria” que ponga en valor a las mujeres y las defienda con políticas como el Pacto de Estado contra la Violencia de Género.

Las homenajeadas

Con solo 18 años, Cristina Tello era coordinadora deportiva en el Ayuntamiento de Calanda. Desde 2003 dirige el mayor gimnasio de España, en Madrid, unas instalaciones de 25.000 metros cuadrados con capacidad para 8.000 socios. Desde allí, sigue siendo un referente en el entrenamiento, la salud y el bienestar.

Isabel Félez destaca en comercio justo y chocolatería desde su obrador de Alcorisa, que abrió en 2013 en una decisión valiente que le salió bien. Apostó por quedarse en el territorio, generar empleo y riqueza en la comunidad. Su chocolate gourmet es el reflejo de una forma de entender el mundo, donde la calidad se mide también en ética, en sostenibilidad y en justicia social.

Hablar de la Asociación de Amas de Casa de Castelserás es hablar de mujeres comprometidas, de trabajo en equipo, de aprendizaje compartido y de entrega absoluta por el bienestar de su comunidad. Han organizado cursos y actividades, y tejido una red de apoyo y sororidad, empoderando a generaciones de mujeres y demostrando que juntas son capaces de transformar lo local.

Elia Sancho ha llevado durante muchos años la carnicería de La Codoñera, pero su labor ha ido más allá de vender carne para alimentar, cuidar y acompañar a generaciones de vecinos con su trabajo. Su hija, María Pilar Lorenzo, ha seguido sus pasos en Torrecilla de Alcañiz durante 42 años. “Fue cerrar la carnicería y cesó un negocio en el pueblo”, apuntó el alcalde, José Miguel Celma. Madre e hija pertenecen a una saga de cuatro generaciones de carniceras que entienden el negocio “de la forma tradicional”, con corte a cuchillo y sabor.

El nombre de Margarita Nuez ha estado presente en las pasarelas más prestigiosas, desde Gaudí hasta Cibeles, desde Nueva York hasta Japón, y sus diseños han vestido a personalidades de gran renombre, incluida la reina Sofía. Su obra es un pilar fundamental en la historia de la moda española. Ha sido reconocida con grandes distinciones, como la Cruz de San Jorge de la Generalitat de Cataluña y la Encomienda de Isabel la Católica.

Malén Celma es esfuerzo, conocimiento y pasión por el trabajo bien hecho. Como maestra almazarera, ha sido guardiana de un oficio que es puro Bajo Aragón: el arte de extraer de las olivas el aceite de oliva virgen extra. Un oficio que requiere destreza y un profundo respeto por la tierra y por quienes la trabajan.

Estela Ferrer es una escultora de emociones, una creadora de formas que trascienden la materia y nos hablan directamente al alma. Su trabajo va más allá de la piedra, más allá del alabastro o del metal con el que esculpe. Graduada en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia, ha recibido reconocimientos como el Primer Premio de Escultura Grandes Valores de la Fundación Notariado en Madrid.

Por último, a título póstumo y con pañuelos rosas se rindió homenaje a Beatriz Royo, que luchó hasta el final con valentía. Fue profesora, deportista, solidaria, madre, activista... luchadora. Una mujer que amaba profundamente su tierra y que dedicó su vida a mejorarla, ya fuera en el ámbito de la educación, el deporte, la sanidad o la solidaridad. Miró a la cara al cáncer, le trató de ‘tú’ con la misma determinación con la que afrontó cada reto de su vida. Se entregó hasta el final para que la lucha contra el cáncer tuviera más recursos y más esperanza.

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