Un total de once pueblos de Teruel y 26 en Aragón solicitan instalar una casa de infancia

Un total de once localidades de varias comarcas de la provincia de Teruel y hasta 26 en el conjunto de Aragón han solicitado ayuda al Gobierno de Aragón para abrir una casa de infancia. Se trata de una fórmula para el cuidado de los menores que financiará el departamento de Bienestar Social y Familia, que ha destinado una partida de 1,3 millones de euros para este 2024.

Las localidades de la provincia de Teruel que han presentado la solicitud para contar con una instalación de este servicio son Aliaga, Frías de Albarracín, Linares de Mora, Villar del Cobo, Celadas, Guadalaviar, Ariño, Monforte de Moyuela, Báguena, Alfambra y Escorihuela. Varios de estos municipios carecen de un espacio para el cuidado de niños de 0 a 3 años, mientras que otros sí los tienen a través del impulso de otras administraciones, como las comarcas o los propios ayuntamientos.

A las once turolenses se suman otras diez de Huesca -Castillonroy, Isábena, Berbegal, Plan, Osso de Cinca, Fanlo, Naval, Abiego, El Grado y Ansó- y cinco de la provincia de Zaragoza, que son Aniñón, Munebrega, Cariñena, Nonaspe y Anento.

La directora general de Familia, Infancia y Natalidad, Eva Fortea, especificó que ahora es el momento “de valorar las solicitudes” y destacó que el reparto de las ayudas se hará mediante la asignación de puntos según los requisitos. Fortea matizó que algunos de los pueblos que han formulado la solicitud son muy pequeños y detalló que las peticiones oscilan entre los municipios que buscan cubrir los gastos de los cuidadores y otros que pretenden obtener una subvención para financiar parte de los gastos del acondicionamiento del local.
 

Cuando lanzaron la idea se mantuvieron reuniones con los alcaldes y entre 40 y 50 municipios se interesaron por las casas de infancia, pero finalmente se han presentado un total de 26. Entre las solicitudes hay algunos municipios que ya contaban con servicio de guardería bien impulsado desde la comarca o a nivel municipal Ahora las casas de infancia “ofrecen un marco normativo”, dijo Eva Fortea, quien añadió que el objetivo es desarrollar pata 2025 un decreto legislativo para que la idea se prolongue en el tiempo y no desaparezca al igual que ocurrió con otras fórmulas pensadas para las pequeñas localidades, como las denominadas casas canguro.

Desde la Dirección general de Familia, Infancia y Natalidad, plantean que el mayor gasto para los ayuntamientos es el de personal, que además es continuado y no en una única vez, como ocurre con la adecuación del local. Fortea indicó que no se descarta llegar a acuerdos con otras administraciones para que colaboren en la habilitación de los espacios.

La gestión de las casas de infancia corresponde a los Ayuntamientos, que serán los que decidan si ofrecen el servicio gratuito o en fórmula de copago con los padres.

Para el próximo año el Gobierno de Aragón mantendrá las ayudas y es muy posible que a las casas de infancia que se monten este año se sumen otros porque, como plantea Eva Fortea, se trata de un servicio que constituye “un reclamo para fijar población itinerante”.