La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, a la izquierda, junto a Eva Calatayud en el Senado
Un estudio destaca la trascendencia de la farmacia rural en la cohesión territorial y recomienda apoyarla
El 43% de las boticas de Teruel se encuentran en pueblos de menos de 500 habitantes y el 61% en municipios de menos de mil
Un informe del Consejo General de Colegios Farmacéuticos destaca que la farmacia rural contribuye a la cohesión social y territorial, y recomienda que las administraciones públicas la apoyen mediante fórmulas de concertación que permita remunerar servicios sanitarios, además de darles incentivos fiscales para salvaguardar su permanencia en el territorio.
En la provincia de Teruel hay 105 oficinas de farmacia, de las cuales el 43% se encuentra en pueblos de menos de 500 habitantes y el 61% en municipios de menos de mil. La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, que asistió a la jornada de presentación del estudio en el Senado la semana pasada, aseguró que la provincia “refleja fielmente” todo lo que se recoge en el documento.
Las farmacias en las zonas rurales son importantísimas para el asentamiento de sus habitantes y la lucha contra la despoblación, puesto que son un servicio clave a la hora de que las personas decidan mantener o fijar su residencia en zonas rurales. Así lo constata un estudio realizado por la consultora Analistas Financieros Internacionales (AFI) por encargo del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.
El documento destaca que las farmacias rurales de pequeño tamaño en España tienen un impacto económico de 1.600 millones de euros, según datos de 2020, con un impacto multiplicador superior al de otros sectores productivos. De acuerdo con el informe, las boticas en las zonas rurales tienen una capacidad tractora muy superior al de otras actividades que se desarrollan en el territorio. Entre los aspectos en los que incide el documento, constata que estas farmacias aportan 23.600 empleos a jornada completa, y que cada euro que generan beneficia al conjunto de la economía española 4,30 euros.
Además, cada uno de estos empleos favorece la creación de otros 3,26 puestos de trabajo a jornada completa. El estudio se ha realizado en municipios de menos 2.000 habitantes y comprende el periodo de 2008 a 2021. El análisis realizado por AFI mediante métodos científicos revela que si bien en ese periodo estos municipios perdieron población en edad de trabajar, población femenina y puestos de trabajo, además de aumentar su tasa de paro, en el caso de los que tienen botica su evolución fue mejor.
Una situación adversa que tiene que ver con las problemáticas de los municipios en los que se asientan, de tipo “sociodemográficas, económicas y de infraestructuras que han situado a muchas al límite de la viabilidad económica”. Por este motivo, Vizcaíno reclamó que la farmacia sea tenida en “consideración como interlocutor y herramienta útil en el desarrollo de las políticas que tienen como objetivo lograr la cohesión social y territorial en España”.
El trabajo señala que el 20% del total de farmacias en España (4.422) están en municipios de menos de 5.000 habitantes, y un 8,5% en poblaciones de menos de 800 (1.864). Del total de la red, 697 farmacias están en situación de viabilidad económica comprometida (VEC), de las cuales el 76% (530) se encuentran en municipios de menos de 800 habitantes. La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, añadió que en la provincia hay 105 oficinas de farmacia repartidas por toda la provincia.
De ahí la necesidad de que pueda haber también incentivos fiscales, como plantea el documento en sus recomendaciones, “porque esas farmacias de pueblos pequeños tienen que asumir los mismos gastos”, además de tener que contratar a veces personal para poder atender los botiquines. “Nosotros tenemos que invertir en equipos lo mismo que una farmacia de Teruel capital o de Madrid; es decir, los sistemas informáticos para dar servicio con la receta electrónica, unos lectores de códigos de barras especiales, Internet y unos básicos para dar el servicio, el mismo, como se dice en el informe, con equidad y la misma calidad”, indicó Villafranca.
Precisó que la pandemia ha favorecido el entorno rural al haber personas mayores que por más seguridad se han quedado en los pueblos en lugar de volver a las ciudades con sus familias. “Eso ha hecho que en los años de la covid el número de farmacias en viabilidad económica comprometida haya disminuido en dos”, dijo Villafranca, de manera que actualmente son 17 establecimientos los que se encuentran en esa situación en la provincia, un 16% del total.
El informe presentado en el Senado señala que dada la capacidad de llegada y cercanía con los ciudadanos, las farmacias han de tenerse en consideración “como interlocutores y herramientas útiles en el desarrollo de las políticas que tienen como objetivo lograr la cohesión social y territorial en España”. Para conseguir esa cohesión, los autores entienden que es fundamental “reforzar la coordinación efectiva y la definición de objetivos comunes entre la administración territorial y la sanitaria”.
Pone como ejemplo el desarrollo de acuerdos marco para el impulso de la atención primaria de las comunidades autónomas. Recomienda por otra parte integrar a los farmacéuticos y a la farmacia comunitaria en las estrategias de salud pública y en el nuevo Sistema de Vigilancia de la Salud Pública. Argumenta que eso “contribuiría a mejorar la eficacia y eficiencia de la asistencia sanitaria”.
Sobre esta cuestión, la presidenta de los farmacéuticos turolenses explicó que en los pueblos pequeños el ingreso que tiene el farmacéutico es básicamente la venta de medicamentos, porque se trata de clientes que por su edad no suelen adquirir otros productos de parafarmacia, de ahí la dificultad de conseguir otros ingresos en estas boticas. Villafranca aseguró que por ese motivo es importante que puedan concertarse servicios asistenciales. “Eso ayudaría muchísimo porque estos pacientes son envejecidos, crónicos, polimedicados, y ayudarles con la medicación en el cumplimiento y la revisión ayuda mucho al farmacéutico”, dijo.
Unos días después de la presentación del informe en el Senado, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció la intención de firmar próximamente una alianza estratégica entre el Consejo General de Colegios Farmacéuticos y el Gobierno de España para fomentar esto. En concreto, se refirió a poder prestar atención sociosanitaria integral a las personas mayores que viven en las zonas rurales por parte de las farmacias. Villafranca reconoció que cuando proponen iniciativas a las instituciones locales “son muy sensibles”, si bien tienen limitaciones económicas porque trabajan con presupuestos muy pequeños.
Aseguró que en el caso de la Diputación de Teruel están trabajando desde el año pasado en un convenio para la realización de lo que se denomina SPD, un sistema personalizado de dosificación de los medicamentos a las personas mayores. El acuerdo será para atender a pacientes en pueblos de menos de 500 habitantes y el convenio se encuentra en redacción.
“Esa es otra parte que nosotros tenemos, la asistencia social, porque somos los que detectamos en las poblaciones cuestiones como la soledad no deseada, la violencia de género, o también la prevención del suicidio, que es muy importante”, argumentó la presidenta del Colegio de Farmacéuticos, que destacó igualmente el papel que han desempeñado durante la covid al “proteger la salud de los pacientes y haber hecho mucha educación sanitaria en protección”.
Villafranca dijo que no es suficiente que los políticos lo reconozcan, sino que deben llegar soluciones. “Las farmacias tenemos mucho potencial para mejorar la salud y calidad de vida de la gente y queremos ponerlo a disposición de las administraciones públicas, pero que se nos integre y que se nos remunere”, concluyó.
En la provincia de Teruel hay 105 oficinas de farmacia, de las cuales el 43% se encuentra en pueblos de menos de 500 habitantes y el 61% en municipios de menos de mil. La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, que asistió a la jornada de presentación del estudio en el Senado la semana pasada, aseguró que la provincia “refleja fielmente” todo lo que se recoge en el documento.
Las farmacias en las zonas rurales son importantísimas para el asentamiento de sus habitantes y la lucha contra la despoblación, puesto que son un servicio clave a la hora de que las personas decidan mantener o fijar su residencia en zonas rurales. Así lo constata un estudio realizado por la consultora Analistas Financieros Internacionales (AFI) por encargo del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.
Cohesión territorial
El informe, titulado La aportación de valor del modelo de farmacia a la cohesión territorial y al reto demográfico, fue presentado la semana pasada en el Senado en el marco de una jornada sobre Farmacia: cohesión social y salud pública, a la que asistieron la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, y la vocal de oficina de farmacia, Eva Calatayud. En el acto intervinieron también por parte de la provincia en una mesa de debate la senadora de Teruel Existe, Beatriz Martín, y la directora de La Comarca, Eva Defior.El documento destaca que las farmacias rurales de pequeño tamaño en España tienen un impacto económico de 1.600 millones de euros, según datos de 2020, con un impacto multiplicador superior al de otros sectores productivos. De acuerdo con el informe, las boticas en las zonas rurales tienen una capacidad tractora muy superior al de otras actividades que se desarrollan en el territorio. Entre los aspectos en los que incide el documento, constata que estas farmacias aportan 23.600 empleos a jornada completa, y que cada euro que generan beneficia al conjunto de la economía española 4,30 euros.
Además, cada uno de estos empleos favorece la creación de otros 3,26 puestos de trabajo a jornada completa. El estudio se ha realizado en municipios de menos 2.000 habitantes y comprende el periodo de 2008 a 2021. El análisis realizado por AFI mediante métodos científicos revela que si bien en ese periodo estos municipios perdieron población en edad de trabajar, población femenina y puestos de trabajo, además de aumentar su tasa de paro, en el caso de los que tienen botica su evolución fue mejor.
Informe
Durante la presentación del informe, el socio director de AFI, Diego Vizcaíno, explicó que estos datos reflejan que las farmacias rurales “potencian la cohesión social al ofrecer los mismos servicios asistenciales que en las ciudades, pero sin embargo se enfrentan a situaciones adversas en el desarrollo de su actividad”.Una situación adversa que tiene que ver con las problemáticas de los municipios en los que se asientan, de tipo “sociodemográficas, económicas y de infraestructuras que han situado a muchas al límite de la viabilidad económica”. Por este motivo, Vizcaíno reclamó que la farmacia sea tenida en “consideración como interlocutor y herramienta útil en el desarrollo de las políticas que tienen como objetivo lograr la cohesión social y territorial en España”.
El trabajo señala que el 20% del total de farmacias en España (4.422) están en municipios de menos de 5.000 habitantes, y un 8,5% en poblaciones de menos de 800 (1.864). Del total de la red, 697 farmacias están en situación de viabilidad económica comprometida (VEC), de las cuales el 76% (530) se encuentran en municipios de menos de 800 habitantes. La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, añadió que en la provincia hay 105 oficinas de farmacia repartidas por toda la provincia.
Capilaridad
Destacó en este sentido la “capilaridad” de esa red porque hay boticas hasta en pueblos de 100 habitantes, así como la relevante presencia que tienen en los municipios más pequeños. Indicó a este respecto, que de esas 105 oficinas de farmacia con que cuenta la provincia, 45 se encuentran en municipios de menos de 500 habitantes, lo que supone el 43%; y 64 establecimientos en localidades de menos de mil habitantes, el 61% del total. Además, estas farmacias atienden 120 botiquines, “es decir, que tenemos una capilaridad y presencia en todo el territorio, de manera que prácticamente todos los ciudadanos de la provincia de Teruel tienen cerca una farmacia o un servicio de farmacia a través del botiquín”. Villafranca recordó que para ir a los botiquines, puesto que hay farmacias que atienden hasta doce de ellos, hay que hacer desplazamientos por carretera que entrañan “un gasto que hay que asumir”.De ahí la necesidad de que pueda haber también incentivos fiscales, como plantea el documento en sus recomendaciones, “porque esas farmacias de pueblos pequeños tienen que asumir los mismos gastos”, además de tener que contratar a veces personal para poder atender los botiquines. “Nosotros tenemos que invertir en equipos lo mismo que una farmacia de Teruel capital o de Madrid; es decir, los sistemas informáticos para dar servicio con la receta electrónica, unos lectores de códigos de barras especiales, Internet y unos básicos para dar el servicio, el mismo, como se dice en el informe, con equidad y la misma calidad”, indicó Villafranca.
Fiel reflejo de la provincia
La representante de los farmacéuticos turolenses añadió que la provincia cumple también, “casi con fiel reflejo”, el problema de las farmacias con viabilidad comprometida que se da en el conjunto del país, según el informe. Aseguró que en la provincia había entre 17 y 20 farmacias en esa situación, prácticamente una de cada cinco o de cada seis, ya que depende de los años.Precisó que la pandemia ha favorecido el entorno rural al haber personas mayores que por más seguridad se han quedado en los pueblos en lugar de volver a las ciudades con sus familias. “Eso ha hecho que en los años de la covid el número de farmacias en viabilidad económica comprometida haya disminuido en dos”, dijo Villafranca, de manera que actualmente son 17 establecimientos los que se encuentran en esa situación en la provincia, un 16% del total.
El informe presentado en el Senado señala que dada la capacidad de llegada y cercanía con los ciudadanos, las farmacias han de tenerse en consideración “como interlocutores y herramientas útiles en el desarrollo de las políticas que tienen como objetivo lograr la cohesión social y territorial en España”. Para conseguir esa cohesión, los autores entienden que es fundamental “reforzar la coordinación efectiva y la definición de objetivos comunes entre la administración territorial y la sanitaria”.
Pone como ejemplo el desarrollo de acuerdos marco para el impulso de la atención primaria de las comunidades autónomas. Recomienda por otra parte integrar a los farmacéuticos y a la farmacia comunitaria en las estrategias de salud pública y en el nuevo Sistema de Vigilancia de la Salud Pública. Argumenta que eso “contribuiría a mejorar la eficacia y eficiencia de la asistencia sanitaria”.
Sostenibilidad
Por último, el informe señala que la sostenibilidad de los servicios profesionales farmacéuticos asistenciales “requiere el diseño de nuevas fórmulas de concertación y remuneración de servicios sanitarios y sociosanitarios, así como el estudio de incentivos fiscales”. Añaden los autores del trabajo que eso es “particularmente urgente en las farmacias ubicadas en micromunicipios rurales, donde se localiza la mayor parte de farmacias en situación de viabilidad económica comprometida”.Sobre esta cuestión, la presidenta de los farmacéuticos turolenses explicó que en los pueblos pequeños el ingreso que tiene el farmacéutico es básicamente la venta de medicamentos, porque se trata de clientes que por su edad no suelen adquirir otros productos de parafarmacia, de ahí la dificultad de conseguir otros ingresos en estas boticas. Villafranca aseguró que por ese motivo es importante que puedan concertarse servicios asistenciales. “Eso ayudaría muchísimo porque estos pacientes son envejecidos, crónicos, polimedicados, y ayudarles con la medicación en el cumplimiento y la revisión ayuda mucho al farmacéutico”, dijo.
Conciertos con instituciones
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos comentó que estos conciertos deberían hacerse con todas las entidades públicas, desde los ayuntamientos, comarcas y diputaciones hasta la Comunidad Autónoma, “y por supuesto con un marco nacional que lo facilite y que esté por encima de cualquier gobierno y el compromiso sea estable”.Unos días después de la presentación del informe en el Senado, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció la intención de firmar próximamente una alianza estratégica entre el Consejo General de Colegios Farmacéuticos y el Gobierno de España para fomentar esto. En concreto, se refirió a poder prestar atención sociosanitaria integral a las personas mayores que viven en las zonas rurales por parte de las farmacias. Villafranca reconoció que cuando proponen iniciativas a las instituciones locales “son muy sensibles”, si bien tienen limitaciones económicas porque trabajan con presupuestos muy pequeños.
Aseguró que en el caso de la Diputación de Teruel están trabajando desde el año pasado en un convenio para la realización de lo que se denomina SPD, un sistema personalizado de dosificación de los medicamentos a las personas mayores. El acuerdo será para atender a pacientes en pueblos de menos de 500 habitantes y el convenio se encuentra en redacción.
Ilusión
Manifestó que estaban “ilusionados” con esta iniciativa y confió que en breve se pueda firmar el convenio, “primero para ayudar a los pacientes y después también para ayudar de alguna forma a las farmacéuticos de estas poblaciones”. Villafranca comentó que para ella había sido “un honor” representar en el Senado a todos los farmacéuticos de la provincia, a los que agradeció “la labor que realizan en los pueblos”. Aseguró que los mismos tienen un “compromiso” no solo asistencial sino también “social”.“Esa es otra parte que nosotros tenemos, la asistencia social, porque somos los que detectamos en las poblaciones cuestiones como la soledad no deseada, la violencia de género, o también la prevención del suicidio, que es muy importante”, argumentó la presidenta del Colegio de Farmacéuticos, que destacó igualmente el papel que han desempeñado durante la covid al “proteger la salud de los pacientes y haber hecho mucha educación sanitaria en protección”.
Villafranca dijo que no es suficiente que los políticos lo reconozcan, sino que deben llegar soluciones. “Las farmacias tenemos mucho potencial para mejorar la salud y calidad de vida de la gente y queremos ponerlo a disposición de las administraciones públicas, pero que se nos integre y que se nos remunere”, concluyó.