Se inaugura Simiente, la nueva tienda de Fundación Térvalis

La Fundación Térvalis inauguró este jueves la tienda Simiente de Teruel, en la plaza de los Amantes, un espacio que visibilizará todo el trabajo que se lleva a cabo en esta entidad, a través de sus dos centros especiales de empleo y su empresa de inserción porque en ella se comercializan todos sus productos: ropa de la marca Reiite y complementos, bolsos, productos de la nueva línea de cosméticos de lavanda AMA Lavanda que se fabrican en Utrillas, objetos decorativos y de regalo que se hacen en el CEE de Teruel, entre otros.

Para la atención y gestión de la tienda, se han creado cinco puestos de trabajo que podrán ampliarse hasta los nueve si la tienda funciona bien. Con estas incorporaciones la Fundación  cuenta ya con más de un centenar de trabajadores y trabajadoras.

Este establecimiento está enfocado principalmente al turismo, por ello abrirá prácticamente todos los días del año, de 10.00 a 21.00 horas.

Tiene un rincón gastronómico con productos de calidad diferenciada de Teruel que elaboran empresas del grupo como son los Vinos Lagar d'Amprius y los productos curados de Aire Sano y Naturel, que pueden degustarse en el propio local.

Por otra parte, en Simiente de Teruel también se puede adquirir el merchandising de la Fundación Amantes y del Teruel Club de Fútbol, y desde Fundación Térvalis están abiertos a que otras marcas y productos de calidad puedan tener su espacio.

La tienda está adaptada para personas con movilidad reducida y ha contemplado la instalación de un elevador eléctrico que salva las escaleras existentes en esta plaza de los Amantes, junto a la torre San Pedro.

Este local tiene unos 120 metros cuadrados útiles (el resto son almacén y pequeño office) y la han diseñado María Hernández y Gene Martín, basándose en esta idea motor del proyecto: De la tierra de Teruel.

Todos los productos que se venden se hacen en Teruel, y como se destacó en la inauguración se quieren presentar “como simientes entre tierra labrada”. Por ello, se basaron en las formas de los surcos de la tierra, el color terracota de las arcillas y el color crema de las canteras de Teruel para el diseño del mobiliario. Todo esto, junto con el uso de la madera de pino autóctono de la zona, en un acabado natural; el uso del color verde, como guiño al arte mudéjar; y el diseño de los letreros con una ceramista turolense, han hecho que la tienda sea un ejemplo de arquitectura totalmente vinculada al lugar, a Teruel.