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Los ‘sketchers’ plasman en sus láminas y cuadernos un Teruel mágico con los cinco sentidos Los ‘sketchers’ plasman en sus láminas y cuadernos un Teruel mágico con los cinco sentidos
En la Escalinata, uno de los espacios elegidos por la tarde para que plasmaran sus dibujos. Bykofoto/Antonio García

Los ‘sketchers’ plasman en sus láminas y cuadernos un Teruel mágico con los cinco sentidos

El encuentro solidario organizado por la Fundación Térvalis supera las expectativas y apunta ya a que tendrá continuidad el próximo año
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Los sketchers que este sábado participaron en el encuentro solidario organizado por la Fundación Térvalis y el colectivo @RuralSketchingTeruel en la capital turolense, plasmaron en sus láminas y cuadernos un Teruel mágico que captaron con los cinco sentidos. La iniciativa, con la presencia de 51 aficionados a este tipo de ilustración, superó las expectativas y el éxito apunta ya a que tendrá continuidad el próximo año.

Así lo indicó la directora de la Fundación Térvalis, Elena Utrilla, cuyos frutos comenzaron a verse ya desde el inicio por la obra artística donada a esta entidad antes incluso de que empezara, así como el interés mostrado por los participantes, algo que constataron también desde primera hora de la mañana los representantes del colectivo de este movimiento artístico que hay en la provincia, Óscar Blanch y Noemí Casas.

A muchos tutolenses les llamó este sábado la atención encontrarse con estos artistas por la plaza del Torico y otros puntos del Centro Histórico plasmando con sus lápices, rotuladores y acuarelas paisajes urbanos impregnados de todo tipo de sensaciones, no sólo visuales. Y es que los participantes aseguraron que para hacer sus dibujos emplean los cinco sentidos, de manera que después al verlos son capaces de evocar incluso los olores, los sonidos y las conversaciones de la gente.

La actividad comenzó por la mañana en una plaza del Torico llena de artistas. Bykofoto/Antonio García


Miriam Bernal viajó el viernes desde Madrid de propio para participar. Era la primera vez que visitaba Teruel y aseguró que nada más conocerla se enamoró para vivir una “experiencia muy interesante”. Destacó la diversidad de estilos artísticos que había en sus calles, “todo concentrado en un espacio reducido” fácil de recorrer.

Bernal comentó que para ella la práctica del sketching era su mindfulness particular con el que se empapaba de los entornos que recorría para sentirlos de una manera intensa. Esta técnica consiste en llevar un cuaderno de dibujo siempre encima en el que los sketchers plasman los lugares en los que están. No tiene nada que ver con la práctica de hacer una foto con el móvil, porque lo que ellos captan con sus dibujos es mucho más, son sensaciones y emociones que desbordan lo visual para llegar a otros sentidos como el olfato, el sonido y hasta el gusto. Cuentan que sus obras se impregnan de todo lo que les rodea y son capaces de evocarlo después al verlas y recordar el momento.

Impregnarse del lugar

“Te llevas al cien por cien los sitios que visitas, independientemente de la calidad del dibujo que hagas, porque eso no es lo que importa”, afirmó Bernal. Todos expresaron la intención de donar las obras que hiciesen en Teruel siempre y cuando tuviesen una calidad aceptable para otras personas, de manera que la Fundación Térvalis pudiera hacer uso de ellas.

Por ese motivo realizaron sus dibujos en unas láminas que les entregó la organización, gracias a la colaboración del establecimiento Materializarte, especializado en útiles para Bellas Artes y que regenta Lucía Cirugeda. Aunque a lo largo de la jornada se les vio también con sus cuadernos viajeros.

“Al hacer el dibujo pones en práctica los cinco sentidos, porque en él queda plasmado lo que ves, lo que oyes, los sonidos, el olor del lugar en el que estás”, comentó Bernal. Sus dibujos recuerdan a aquellas ilustraciones que hacían artistas como Frederick Catherwood en sus viajes de exploración a principios del siglo XIX a civilizaciones perdidas como la egipcia o la maya, cuyos libros tuvieron una gran difusión y que hoy día siguen evocando cosas que no es capaz de transmitir la fotografía.

Una ‘sketcher’ concentrada en su dibujo. Bykofoto/Antonio García


Mari Carmen Martínez, otra de las participantes procedente de Valencia, dijo que este tipo de encuentros le gustaban porque podían compartir experiencias con otros aficionados, además de reencontrarse porque van recorriendo España. Llegado también de Valencia, Francisco Martín dijo que le encantaba participar en este tipo de actividades, aunque reconoció que lo suyo era sobre todo la acuarela, y que la participación de los artistas José Galarzo y Alfredo Ugarte, que impartieron sendos talleres en la calle, había sido una de las cosas que le había motivado.

Desde mucho más lejos, desde Vitoria, llegó Luis García de Albéniz, que aprovechó la experiencia no sólo para reencontrarse con sus amigos skertchers y poder colaborar con el fin solidario de la actividad, sino para conocer Teruel ya que nunca antes había estado en la ciudad, que le pareció “muy interesante”.

Al final de la jornada donaron mucha obra, según destacaron los organizadores, que calificaron la actividad de “fantástica”. Elena Utrilla, directora de la Fundación Térvalis, comentó que no esperaban una respuesta tan buena al haber acudido gente de Teruel, Valencia, Castellón, Zaragoza, Huesca, Vitoria, Málaga y Madrid.

Utrilla indicó que dada la buena acogida que había tenido, habían despertado el interés de otras organizaciones de cara a futuras actividades similares. “Viendo un poco la movilización que ha habido creemos que esto puede tener continuidad e intentar que cada vez sea un poco más grande”, dijo, con lo cual dio por hecho “prácticamente con toda seguridad que volveremos a hacerlo”.

Obra donada

La obra donada se destinará a nuevos productos de sus centros de empleo que ofrecen oportunidades laborales a personas con riesgo de exclusión. Un centro de personalización, dijo Utrilla, cuya voluntad es que siga creciendo con la incorporación de más personas.

Los participantes en la jornada en una foto de familia. Fundación Térvalis


Óscar Blanch y Noemí Casas, el primero de Peñarroya de Tastavins y ella de El Pobo, algo en lo que incidieron para reivindicar sus territorios, se mostraron muy satisfechos de la respuesta que había tenido esta primera edición. Ambos forman parte del colectivo @RuralSketchingTeruel, que como su nombre indica mira más hacia el medio rural que hacia las ciudades. En el caso de Teruel quieren focalizar el encuentro con gente de fuera en la capital, mientras que el movimiento interno con los turolenses que forman parte del mismo se despliega por toda la provincia.

Ambos aseguraron que estaban “más que satisfechos” por la respuesta obtenida y al apoyo que les había dado Térvalis, al igual que el programa de actividades al haber podido contar con dos artistas de renombre como José Galarzo y Alfredo Ugarte para impartir los dos talleres prácticos en la calle, que era además uno de los atractivos del encuentro para la gente que acudió.

Volver a repetir

Blanch y Casas confiaron en que la experiencia se pueda volver a repetir. Comentaron que el colectivo al que pertenecen surgió para promover el dibujo al aire libre en toda la provincia y “dar voz a los pueblos”. Ahora mismo el grupo lo conforman algo más de una decena de personas. Es de reciente creación y lo están promoviendo por las redes sociales, con lo cual confían en que vaya creciendo.

Los dos ilustradores se mostraron encantados con esta técnica de dibujo, con la que aseguran que son capaces de plasmar mucho más que la imagen. “Cuando tú después miras el dibujo en el cuaderno, te evoca hasta el olor y te recuerda incluso la conversación que tenías al lado”, dijeron.

Alfredo Ugarte, alias Urumo, que impartió un taller de composición, comentó que el objetivo de su charla, impartida en la calle mientras los participantes dibujaban y ponían en práctica lo que estaban escuchando de este experto, era “romper con algunos tópicos” existentes.

Ugarte aseguró, al igual que expresaron otros ilustradores, que el sketching era toda una forma de vida porque lo importante es desplegar “toda la vivencia del momento presente”. Comentó que al bucear en el entorno de una experiencia que se está viviendo “aparecen infinidad de estímulos”, que es lo que plasman en los dibujos y después son evocadores de todo tipo de sensaciones.

El otro tallerista que participó como docente en el encuentro fue el acuarelista José Galarzo, que presumió de su ascendencia turolense y que habló sobre los mitos y leyendas de la acuarela.

El artista comentó que la acuarela, aparte de ser más limpia, resultaba “casi más física” y hoy día se ha extendido su uso. Argumentó que la acuarela es una técnica que se puede acoplar con facilidad al mundillo del sketching “porque no te exige llevar mucho equipo”.

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