Más de 200 personas trabajan y se forman en Teruel gracias a 18 programas experienciales del Inaem

Ya están en marcha los nuevos programas experienciales del Instituto Aragonés de Empleo (Inaem), que sustituyen a los hasta ahora conocidos como talleres de empleo y escuelas taller. En la provincia de Teruel 18 entidades desarrollan ya estos proyectos que permiten ofrecer formación y empleo a persona desempleadas y, al mismo tiempo, desarrollar iniciativas de interés social.

A lo largo del mes de febrero ayuntamientos, comarcas y entidades sin ánimo de lucro, con la colaboración de las oficinas de empleo, han contratado a los participantes de estos proyectos, cuyo coste es sufragado íntegramente por el Inaem, tanto en lo que se refiere a los costes salariales de docentes y directores como de los alumnos participantes que, a lo largo de sus 12 meses de duración, percibirán la nómina correspondiente al SMI.

El Inaem también asume los gastos de gestión, así como los que se generan para la puesta en marcha de las obras y servicios que son objeto de la convocatoria con una inversión total que asciende a más de cinco millones de euros.

El objetivo de los programas experienciales es facilitar la inclusión en el mercado laboral de personas desempleadas y mejorar de su empleabilidad ofreciéndoles cualificación y la experiencia necesaria para la práctica profesional.

Estos programas responden a las necesidades del mercado laboral, centrándose preferentemente en ocupaciones relacionadas con la recuperación o promoción del patrimonio artístico, histórico, cultural o natural, la rehabilitación de entornos urbanos o naturales, la eficiencia energética y las energías renovables, así como cualquier otra actividad de utilidad pública o de interés general y social que permita compatibilizar el aprendizaje formal y la práctica profesional en el puesto de trabajo.La directora provincial del Inaem, Patricia Utrillas, ha destacado la “repercusión que estas iniciativas tienen en nuestra provincia”.

“No se trata solo de la creación de más de 200 puestos de trabajo entre alumnos y profesores, sino de la ventana de futuro que se les abre de cara a insertarse en el mercado laboral. Los participantes obtienen una formación de calidad y la experiencia necesaria para afrontar su posterior colocación”, afirma.

Los alumnos-trabajadores, una vez concluido el programa, obtendrán uno o varios Certificados de Profesionalidad que les capacitarán para desarrollar la profesión en la que se han estado formando durante su contratación. Por su parte, las entidades locales y sin ánimo de lucro también obtienen importantes beneficios puesto que, mediante estos proyectos, llevan a cabo tareas como la mejora de espacios naturales y urbanos u ofrecen diversos servicios, además de contar en un futuro próximo con profesionales cualificados.