Los toques de las cofradías de Teruel pregonan la cercanía de la Semana Santa

Teruel vivió el miércoles el primer pregón de la Semana Santa. Los tambores y bombos volvieron a hacer vibrar la plaza del Torico y la plaza del Obispado para el tradicional acto de la imposición de la ceniza con el que se iniciaba la Cuaresma y que era el preludio de la actividad que se vivirá en la ciudad del 2 al 9 de abril. Una representación de todas las cofradías de la ciudad acudió a este acto. Sobre las 19.15 horas las bandas salieron desde la plaza del Torico hacia la plaza del Venerable Francés de Aranda, junto a la Catedral, tocando todas juntas.

El acto religioso con la bendición e imposición de la ceniza  estuvo presidido en esta ocasión por el vicario general de la Diócesis de Teruel y Albarracín, Alfonso Belenguer, ya que el obispo, José Antonio Satué, no pudo asistir. El vicario agradeció a las bandas y muy especialmente a los niños y jóvenes “este primer pregón, este primer anuncio de la Semana Santa con el sonido de los tambores”.

Belenguer recordó que, tras el tiempo de Cuaresma que comenzaba ayer, las cofradías y hermandades turolenses llevarán por las calles de la ciudad “la historia más grande de amor”, acompañando al Señor y a la Virgen y destacó que la Semana Santa es “amor, devoción y emoción”. El vicario señaló que la imposición de la ceniza es “un signo de humildad” que invita a la conversión y a “cambiar a mejor”.

Tras sus palabras volvieron a sonar los tambores y bombos, se realizó la bendición de la ceniza y se llevó a cabo su imposición a todos aquellos que quisieron. El presidente de la Junta de Hermandades de Teruel, José Villarroya, destacó que este acto se vivía con “ilusión” porque era “el pistoletazo de salida” para la Semana Santa que “ya se ve que se acerca”.

Villarroya señaló que la Junta de Hermandades está ya ultimando el programa que se presentará en breve.
 

El presidente de los cofrades turolenses aseguró que esta será la Semana Santa de la vuelta a la normalidad, tras los últimos años marcados por la pandemia, y que muchas personas que el año pasado estaban más temerosas de participar en algunos actos por temor a los contagios ahora ya regresarán.

La tarde se vivió con ilusión por los cofrades y sobre todo por los miembros de las bandas, quienes tras muchas semanas de ensayos tenían la primera oportunidad de tocar en un acto en las calles del Centro Histórico.

Un poco antes de las siete de la tarde, las cofradías se fueron reuniendo en la plaza del Torico. Los más pequeños eran los que disfrutaban con más emoción de este toque multitudinario, ya que para algunos era la primera vez que participaban en esta celebración.

Silvia Ortiz acompañaba a sus mellizos de 10 años, Hugo y Héctor, quienes a pesar de ser tan jóvenes, este era su cuarto año participando en el Miércoles de Ceniza. “Es un acto que nos gusta y venimos siempre que podemos”, comentó Silvia Ortiz, de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad.

Irene Torre, de la misma hermandad, también se mostraba contenta de poder asistir a este acto tan tradicional. “Como cristiana me gusta empezar la Cuaresma con la ilusión y la fe”, comentó y señaló que era un año especial por la vuelta a la normalidad. Ahora continuarán los ensayos para terminar de perfeccionar los toques que se podrán escuchar durante la Semana Santa turolense.

No bautizados

A petición de algunas cofradías de la diócesis, el obispo de Teruel y Albarracín, José Antonio Satué, ha emitido un comunicado en el que autoriza que podrán pertenecer a las hermandades o cofradías, como aspirantes o voluntarios, personas no bautizadas, permitiéndoseles usar el hábito. En las asambleas tendrán voz, pero no voto. Cuando sean bautizados, podrán asumir cargos de representación dentro de la misma, con todos los derechos y obligaciones.

La solicitud de esta autorización no procedía de la capital sino de otros puntos de la diócesis. Fuentes del Obispado explicaron que esta petición está vinculada a algunas situaciones que se puedan dar de personas que se han convertido pero aún no se han bautizado y quieren participar en los actos de la Semana Santa.