Las Cortes constatan que debe darse un nuevo rumbo a la Directriz de política demográfica

Las Cortes de Aragón constataron este lunes la necesidad de dar un nuevo rumbo a la aplicación de la Directriz especial de ordenación territorial de política demográfica y contra la despoblación, aprobada por el Ejecutivo aragonés en el año 2017 con la finalidad de establecer las líneas que debían seguirse en materia de demografía y poblamiento para conseguir un desarrollo territorial equilibrado. La Ponencia de relaciones con la Cámara de Cuentas abordó el informe que este órgano de fiscalización ha realizado sobre esta directriz, en el que concluye que muchas de sus medidas son imprecisas y no han funcionado los órganos de control intermedio, y recomienda una simplificación de la misma así como una revisión de sus indicadores y la necesidad de diseñar una correcta “arquitectura institucional” para su aplicación.

El presidente y la vicepresidenta de la Cámara de Cuentas de Aragón, Jesús María Royo y Ana Isabel Beltrán, presentaron este informe especial, que es el primero que se elabora de estas características y en el que se analiza el periodo comprendido entre 2018 y 2022. Se subsana en parte así que el propio Ejecutivo no realizase un informe de seguimiento de los cuatro primeros años de su aplicación, tal como establece el artículo 3 de la directriz.

El informe de la Cámara de Cuentas constata, según indicó su presidente, que a pesar del amplio proceso de participación pública que se hizo para la elaboración de esta directriz, sus objetivos eran poco realistas al no establecer prioridades y fijar medidas imprecisas, además de la complejidad de los indicadores para medir su eficacia.

El documento del órgano de fiscalización pone de manifiesto también la falta de una adecuada coordinación para conseguir el desarrollo de estas medidas, así como la dificultad para hacer una evaluación total de las mismas debido a la falta de respuesta de los departamentos implicados. De las 310 medidas contenidas en la directriz, solo se han ejecutado 96, de las cuales únicamente 22 son novedosas y 14 suponen alguna mejora, puesto que las 60 restantes ya se estaban ejecutando con anterioridad.

Royo argumentó que durante el periodo analizado han aumentado los municipios con densidad de población inferior a ocho habitantes por kilómetro cuadrado, mientras que el saldo vegetativo continúa siendo negativo, si bien el crecimiento poblacional es “ligeramente superior” al del periodo anterior debido principalmente a la inmigración”.

El presidente de la Cámara de Cuentas indicó que una de las conclusiones a la que habían llegado es la existencia de una relación directa positiva “entre el crecimiento poblacional y el progreso o bonanza económica”, que también mejora con la implantación de las telecomunicaciones en el territorio.

Añadió que de igual forma existe una “relación directa negativa” en la evolución demográfica, al observar que “hay un descenso poblacional cuando existe una falta de servicios públicos” en el territorio en cuestiones como la vivienda, los centros educativos y de salud.

En la ponencia intervinieron en primer lugar los portavoces de los grupos, que reconocieron la dificultad de afrontar políticas demográficas si no se hace de forma constante un análisis de la eficacia de las medidas que se implementan, además de la necesidad de darle un nuevo rumbo a la directriz especial. Posteriormente fueron los representantes de la Cámara de Cuentas los que dieron cuentas del informe elaborado y respondieron a las consideraciones expresadas por los parlamentarios.

El documento establece una serie de conclusiones y recomendaciones tras un exhaustivo análisis tanto del contenido de la misma como de su aplicación durante los cuatro años analizados, y en el que se reconoce la dificultad de conocer con precisión su impacto puesto que las instituciones no han aportado toda la información que se les requirió.

El informe destaca, a partir de las propias respuestas de los departamentos del Ejecutivo aragonés implicados en el desarrollo de la directriz, la escasa implantación que han tenido las medidas aprobadas en su día. Los motivos alegados por los diferentes departamentos son la falta de personal o presupuesto, la falta de competencia en la materia, la ausencia de definición de las medidas, la falta de coordinación entre las áreas del Ejecutivo o que no se ha considerado prioritario.

Grupos parlamentarios

La diputada del PP, María Navarro, manifestó que a la vista del informe de la Cámara de Cuentas la Directriz especial de política demográfica “ha fallado”, y señaló entre las distintas causas la falta de seguimiento, la bajísima coordinación, que los indicadores hubiesen sido “poco útiles” y que las medidas no hubiesen generado ningún impacto adicional.

Navarro argumentó que aunque “la voluntad era buena”, la manera de implantar la directriz “no ha funcionado” y es preciso “cambiar el rumbo” y plantearse cómo se cambia.

El diputado del PSOE, Óscar Galeano, valoró la importancia de haber hecho este informe, si bien recordó la dificultad de abordar una problemática como la despoblación en el medio rural porque “hay otras variables” que deben tenerse en cuenta. Rechazó echar la culpa al mundo político porque es “luchar casi contra molinos de viento”, y consideró que tampoco ha transcurrido demasiado tiempo “como para evaluar determinados resultados”.

Fermín Civiac, parlamentario de Vox, admitió también que aunque no haya funcionado como debiera, la directriz fue “bien intencionada”, pero que había adolecido de una “falta de evaluación”, al igual que sucede con el resto de políticas públicas. Consideró que revisar y evaluar las políticas es vital porque es difícil acertar a la primera y es preciso entrar en una mejora continua de las mismas.

El parlamentario de CHA José Luis Soro, que fue consejero cuando se hizo la directriz, destacó que el documento fue “pionero” y defendió el trabajo realizado por los técnicos así como el proceso de participación ciudadana que se llevó a cabo. Aclaró que la directriz “no es un fin en sí mismo” sino que es “un instrumento, no es una varita mágica”. Argumentó que el problema fue que “no conseguimos que nadie se lo tomara en serio” y que faltó un responsable que la asumiera y la hiciera cumplir, que aclaró que no era el Departamento de Vertebración del Territorio.

Pilar Buj, de Aragón Teruel Existe, manifestó que lo sucedido con la directriz evidenciaba que la lucha contra la despoblación por parte del Ejecutivo aragonés ha sido “muy simbólica y poco efectiva”. Criticó que las actuaciones acometidas lo que hacen es “vestir” de extraordinarias acciones que son ordinarias. Reconoció el buen trabajo que se hizo en la elaboración de la directriz y abogó por reflexionar sobre el diseño de políticas públicas y “simplificar los objetivos”.

El portavoz del grupo mixto, Álvaro Sanz (IU), consideró la directriz una herramienta “imprescindible”, y echó en falta una mayor “voluntad” para su desarrollo más allá de la manifestada por el propio departamento que la elaboró.

Simplificar

El informe especial de la Cámara de Cuentas sobre medidas de lucha contra la despoblación y reto demográfico en Aragón hace cuatro grandes recomendaciones para que la Directriz especial de ordenación territorial de política demográfica y contra la despoblación pueda ser más eficaz, tras llegar a la conclusión de que cuando se hizo no se definió con claridad el problema de la despoblación ni se establecieron prioridades, mientras que las medidas que plantea la misma son “imprecisas”.

El documento, que también ha contado con la participación de la Universidad de Zaragoza, propone entre sus recomendaciones simplificar la directriz, concretar medidas y flexibilizarla, así como diseñar una correcta “arquitectura institucional” con un coordinador que asuma el “liderazgo para resolver problemas o ineficiencias” durante su ejecución. También propone mejorar la coordinación con las entidades locales potenciando el papel de las diputaciones y comarcas.

Propone revisar los indicadores de la directriz y reducir su número, y revisar el Índice Sintético de Desarrollo Territorial para ganar en eficacia.