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El presidente  de la CHE reitera  su compromiso  con Montalbán El presidente  de la CHE reitera  su compromiso  con Montalbán
La Asamblea de Usuarios de la CHE en Zaragoza comenzó con un minuto de silencio por las víctimas de la dana

El presidente de la CHE reitera su compromiso con Montalbán

Arrazola no menciona en la Asamblea de Usuarios los daños sufridos en el Jiloca
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El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Carlos Arrazola, reconoció este jueves que no hay fecha para acometer las reparaciones que ha causado la última dana en Aragón, sobre todo en la margen derecha de la cuenca, porque no se puede acceder a los cauces, dado que sigue lloviendo, y una vez que se conozcan los daños, planificar y priorizar.

Así lo explicó a los medios antes de presidir en el Palacio de Congresos de Zaragoza la Asamblea de Usuarios, preguntado por las consecuencias de la dana (depresión aislada en niveles altos) en la Comunidad Autónoma de Aragón.

Allí, Arrazola recordó el compromiso adquirido con el alcalde de Montalbán, Carlos Sánchez Boix, en la conversación telefónica que mantuvieron el martes en la conversación que mantuvieron por teléfono, seis después de la tormenta. En esa charla, el alcalde reclamó a la Confederación el ensanchamiento del cauce del río Martí a su paso por el municipio de Montalbán para tratar de evitar los constantes desbordamientos del caudal. Además, solicitó la visita de un técnico que evaluara esa actuación y que se interviniera en la rambla, donde se han colmatado gravas y escombros arrastrados por el agua el pasado miércoles hasta alcanzar una altura de más de tres metros.

Carlos Arrazola destacó que, si bien la dana ha provocado daños materiales considerables en varios pueblos de Aragón, también ha ayudado a recuperar reservas hídricas y puso como ejemplo el embalse de Las Torcas, en el Huerva, que ha pasado “de estar casi vacío a llenarse en solo unos días”, o las “mejoras notables” del almacenamiento en los ríos Guadalope, Martín y Jalón.

Respecto a los daños en infraestructuras de competencia del organismo de cuenca y en municipios, informó de que la CHE ha iniciado contactos con alcaldes, con la Diputación Provincial y con el Gobierno de Aragón para coordinar los esfuerzos de recuperación.

Prioridades

Sobre el inicio de las reparaciones, Arrazola explicó que para que se pueda actuar es necesario que los accesos a los ríos estén en condiciones y mientras siga lloviendo no se puede porque las máquinas se atascan y una condición es no poner en riesgo al personal que las maneja.

“Tenemos que hacer una planificación de lo que vayamos a realizar, es decir, vamos a recopilar todos los daños que se han generado, vamos a ver dónde podemos actuar y vamos a priorizar”, dijo el presidente, antes de entrar a la reunión.

Una vez que se pueda acceder se recopilarán todos los daños que se han generado, se verá dónde se puede actuar y se priorizará, porque habrá sitios donde tenga un mal aspecto, pero no entrañan riesgo, y habrá otros sitios donde la obstrucción si que pueda tener “un riesgo inminente”.

En este sentido, precisó que las competencias de la CHE son las de restaurar la capacidad de desagüe de los cauces y eliminar obstrucciones que puedan generar riesgos.

Los trabajos iniciales, cuando sean posibles, se centrarán en los ríos de la parte este de la margen afectada, como el Matarraña, el Martín, el Aguas Vivas, el Huerva y el Jalón.

Arrazola reiteró asimismo su compromiso con el alcalde de Montalbán, Carlos Sánchez, quien solicitó la presencia de la CHE para evaluar los daños en su municipio, uno de los más afectados en la provincia de Teruel por la dana.

El Jiloca, olvidado

A pesar de manifestar expresamente su compromiso con el municipio turolense de Montalbán, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro no mencionó los daños sufridos por los municipios de la vega del Jiloca en las tormentas de finales del mes de agosto y principios de septiembre.

Reducir las dotaciones

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Carlos Arrazola, justificó este miércoles la reducción de dotaciones para la agricultura por la modernización de los sistemas de riego, pero se mostró dispuesto a escuchar las necesidades de los posibles afectados.

Así lo reconoció a los medios antes de presidir en el Palacio de Congresos de Zaragoza la Asamblea de Usuarios del organismo de cuenca, a la que asisten cerca de 500 personas, preguntado por las quejas que han planteado tanto agricultores como la patronal CEOE e incluso el consejero de Agricultura, Javier Rincón, al conocer el borrador de revisión de caudales con el que trabaja la CHE.

Arrazola aclaró que la medida no busca reducir el agua de forma arbitraria, sino ajustarla a las prácticas agrícolas actuales, ya que, según sus palabras, “las dotaciones están calculadas con estudios de hace 30 años. Nadie explota la agricultura como hace 30 años. Por lo tanto, las dotaciones tienen que ir acompasadas a la realidad”.

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