El Mitma avanza en las expropiaciones para ejecutar las obras en la N-330

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) está avanzando en las expropiaciones de los terrenos afectados por las obras de mejora de la carretera N-330 entre Teruel y Villastar, que están en proceso de licitación y que se prevé que puedan iniciarse en abril del próximo año para que estén finalizadas en la primavera de 2024. La Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón ha citado a los propietarios de los terrenos afectados por las expropiaciones forzosas a partir del 30 de noviembre, para proceder al levantamiento de las actas previas de los bienes que serán ocupados para la mejora de esta infraestructura.

Los afectados por las expropiaciones van a ser convocados para que asistan al levantamiento de las acta previas a la ocupación, que tendrá lugar los días 30 de noviembre y 1 y 2 de diciembre en el centro sociocultural de San Julián en Teruel capital. La notificación se comunicará a cada uno de los titulares de los terrenos indicándoles el día y la hora a la que tienen que acudir, y además se publicará la relación completa en el tablón de anuncios del Ayuntamiento de Teruel.

El levantamiento de las actas previas es un nuevo paso para poder empezar a ver por fin el inicio de las obras de una mejora cuyos primeros proyectos se remontan a finales del siglo pasado, y que por distintas circunstancias se ha ido retrasando en el tiempo. La actuación que se va a acometer ahora será entre Teruel y Villastar, enlazando la N-330 con la N-234 mediante una glorieta, y posteriormente se ejecutarán el resto de las obras hasta el límite con la provincia de Cuenca, aunque esta otra intervención se encuentra todavía en fases previas de tramitación administrativa.

Obras a licitación

Las obras salieron a licitación a principios de septiembre con un presupuesto de 17,5 millones de euros y consistirán en la mejora de la seguridad vial en un tramo con una alta concentración de accesos y con interferencia con gran número de servicios debido a su proximidad a la ciudad de Teruel.

En total se mejorarán unos 5 kilómetros de la carretera N-330 para mejorar la seguridad vial. Eso supondrá una ampliación de la sección transversal y la adaptación del trazado en parte de su recorrido.

Se va a actuar en el trazado que tiene su origen a la altura del kilómetro 296,500 de la carretera N-330 en las proximidades de Villastar, y finalizará en la intersección con la N-234 en Teruel, que se resolverá mediante una glorieta.

Las características resultantes de la actuación serán las propias  de una carretera convencional, con una única calzada y un carril de circulación por sentido de tres metros y medio, con arcenes exteriores de metro y medio y bermas de 1,30 metros. La carretera mantendrá el eje actual en la llegada a la N-234, con trazado exento en el resto.

Enlaces

La intervención plantea dos nuevos enlaces, en Villaspesa y Valdeciervos, que comunicarán el eje proyectado con la carretera actual, liberando así los accesos a las fincas colindantes. Está prevista también la reposición de caminos para restitución del viario de servicio a las fincas.

El proyecto incluye una estructura sobre la rambla de Barrachina, y dos pasos inferiores en los enlaces diseñados, así como dos pasos inferiores para dar continuidad a la N-330 existente, un paso inferior bajo la carretera N-330 para permitir accesos peatonales a las zonas de riego, diez muros de contención y dos escolleras.