Petar y el ‘Club de los 300’

Vino para ello, y en ello se afana, con regularidad creciente y acelerada en los últimos partidos de Pamesa Teruel Voleibol. Cuando el equipo naranja firmó al búlgaro Petar Hristoskov como opuesto titular para esta Superliga, venido de la liga francesa, apostaba por un artillero que debía sostener el grueso de la producción ofensiva del equipo. Y, a tenor de las cifras publicadas por las estadísticas de la Federación Española de Voleibol, está cumpliendo con su cometido; Petar está dentro de un selecto grupo de jugadores que han superado los 300 puntos en las ya 17 jornadas que se han disputado de momento.

No hay tantos artilleros que hayan sobrepasado ese umbral de anotación directa. Lo ha logrado Gerard Osorio, por ejemplo, para mantener con vida a Sant Pere i Sant Pau dentro de la categoría. Lo tiene Cunha, el martillo pilón de Soria, que es de hecho el máximo anotador de la categoría con 366 tantos. Los demás andan con registros inferiores. Y aquí cabe hablar del papel que Hristoskov asume dentro de su rol anotador. En los grandes equipos de la categoría el tanto está más repartido, con varios jugadores de Guaguas, Manacor o Léleman entre los 200 y los 270 puntos. El ataque de Teruel gira alrededor de Hristoskov.

Defensa desde el bombardeo

Lo cual, en realidad, tampoco es un problema de enorme magnitud. El equipo de Muraco ha sabido construirse a partir de las dinámicas ofensivas que aglutina Petar. Casi un tercio de los puntos directos del equipo son cosa suya, pero es cierto que su vendaval también da opciones para generar buenas defensas, en la misma jugada o en puntos posteriores, para el otro gran baluarte de Pamesa, su defensa en la red.

Aquí sobresalen los escuderos de la puntuación naranja, de entre los que destaca sobremanera Emilio Ferrández. Fue, de hecho, el más productivo en la última victoria del equipo ante Cisneros, Los Planos volvió a ver la versión aguerrida, comprometida y productiva del todocampista que roza los 200 tantos en juego. Y tras él, el colectivo bajo las mallas, Omar, David y Rubén; los Superlópez rozan los 150 puntos cada uno, ya ha llegado a esa cifra el puertorriqueño, que está encontrando en España un buen sitio para explotar sus características.

Un modelo consolidado

Fruto de esta máxima optimización de los recursos propios, Pamesa Teruel Voleibol ha encadenado una racha de cinco triunfos que le sostiene con holgura como el campeón de los mortales y que le coloca, además, a una distancia asumible, abordable, con las cuatro primeras posiciones de la tabla clasificatoria. Pamesa es quinto, 32 puntos, cuatro por debajo de Manacor, a dos partidos de distancia del podio en el que están Soria y Valencia. Precisamente los levantinos serán el próximo rival de los naranjas.

En un enfrentamiento directo en el que Pamesa tendrá la oportunidad de extender su racha victoriosa y colocarse, si vence, directamente en la pomada de los cuatro mejores. En cualquier caso, su último mes y medio de competición le ha servido para colocar ya doce puntos de renta sobre la novena posición que deja fuera de las eliminatorias por el título. Para seguir ese camino, necesitará más piezas que se acerquen a ese Club de los 300.

Horizonte copero

El calendario le guarda a Pamesa Teruel dos citas ligueras más antes de la disputa de esta próxima edición de la Copa del Rey, dentro de tres fines de semana en el pabellón Siglo XXI de Zaragoza. Más de 200 aficionados han sacado ya su abono para animar al equipo naranja, y se espera gran ambiente para la cita deportiva.

En la que Pamesa, además, viene trabajando desde lo cotidiano con la Superliga como acicate y, además, con la ventaja de que en las próximas semanas no aguardan largos desplazamientos ni viajes incómodos. Este próximo sábado Pamesa acude a Valencia para medirse a Léleman Conqueridor, en partido vespertino que permitirá una semana de entrenamientos concentrada en Teruel. Y la siguiente semana el equipo recibe a Arenal Emevé en el encuentro previo a que comience la fiesta del torneo del KO.