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Pamesa vive en el segundo piso de los tres que tiene la Superliga Pamesa vive en el segundo piso de los tres que tiene la Superliga
Sin opciones ante San Roque este pasado sábado, Pamesa debe conformarse con aguantar en el segundo pelotón del vóley español. CV San Roque

Pamesa vive en el segundo piso de los tres que tiene la Superliga

La primera vuelta confirma que la competición se ha dividido en tres niveles y Teruel está entre la clase media

Transcurrida, finalizada y rubricada la primera vuelta de esta Superliga 24-25 de voleibol, Pamesa Teruel ya es perfectamente conocedor y consciente de cuál está siendo y, probablemente, vaya a ser su papel en este curso de reconstrucción y rejuvenecimiento de su plantilla. El grupo más joven de los quince años de exitoso transitar naranja por la competición ha firmado la vuelta más pobre de resultados de la que se recuerdan registros, por vez primera con un balance de derrotas superior al de victorias, seis a cinco.

Se sabía, realmente, que este año significaría un cambio respecto a lo que está habituado a paladear el aficionado naranja. La disponibilidad económica de Pamesa es más o menos similar a la de cursos precedentes, y contrasta con la cada vez mayor capacidad inversora de proyectos vecinos cuyos resultados ya pueden medirse y testarse. La actual competición española es un inmueble de tres pisos, una pirámide de tres escalas, una nueva jerarquía en la que cuatro proyectos están al mando, otros cuatro deben conformarse con pertenecer a la clase media, y los cuatro restantes deberán pelear por su propia supervivencia.

Tres gigantes y Soria

Era previsible que Guaguas caminase en la primera posición de la clasificación, por presupuesto, por horizonte competitivo, evidentemente por plantilla, los canarios son el equipo a batir de la competición y lo han demostrado con nueve triunfos en sus once primeras jornadas. Eso sí, recibieron un par de advertencias, y por detrás han aparecido otros dos aspirantes que quieren ir a por todas, Manacor y Léleman Valencia, que cierran la primera mitad de la Superliga apenas un punto por detrás de Guaguas.

Al trío de cabeza se le suma un cuarto integrante que no renuncia a las mieles del vóley español; Grupo Herce Soria finaliza la primera fase de la competición con 25 puntos, a sólo un partido del liderato, con nueve triunfos también, eso sí con marcadores algo más cortos lo que determina su puntuación algo menor. Soria no quiere salir de la élite.

Teruel y tres clásicos menores

En realidad, el club castellano es el único de los clásicos de la competición que es capaz de aguantar el empuje de los nuevos proyectos rutilantes. Los demás quedan, y entre ellos está Pamesa Teruel, en un pelotón intermedio que finaliza la primera vuelta entre los puestos quinto y octavo de la clasificación. Se han repartido los cruces difíciles de la Copa del Rey, apenas les separan dos puntos en la tabla, y presentan un balance de victorias y derrotas que ya les es desfavorable.

Melilla respira quinto, da la sensación de ser capaz de rascar algún punto aislado más que determina un nivel de competitividad algo más elevado. No lo demostró en Los Planos, pero le ha permitido amarrar el cruce copero menos inasequible. Tras los de la ciudad autónoma, triple empate entre Unicaja, Pamesa y Tenerife. Los almerienses son los únicos que pueden presumir de haber ganado más que perdido, aunque sea por la mínima.

La última derrota de los naranjas en Las Palmas demuestra, además, que esta clase media venida a menos tiene riesgos, puede verse sorprendida por los equipos de la zona baja, el tercer nivel de esta Superliga. San Roque también ganó en Soria. Y Tarragona está empezando a plantar cara para, de momento, asegurar plaza en la máxima división del vóley nacional para la próxima temporada. Lo tienen algo más difícil los gallegos de Arenal y, sobre todo, los baleares de CV Palma, los que cierran la clasificación de esta primera vuelta que define tres escalas en esta liga.

La agenda

Ya ha comenzado la semana preparatoria para esta primera jornada de la segunda vuelta en la Superliga de voleibol, con Pamesa Teruel dando inicio a las sesiones de entrenamiento que combinarán, como es habitual, doble turno con la pelota como protagonista en cuatro tandas mezcladas con físico. Además habrá jornadas de una sola sesión con el objetivo de repartir cargas de trabajo y, sobre todo, esfuerzos en una competición que empieza a pasar factura.

Y ya no tanto en lo puramente deportivo, a pie de pista, como en el calendario de viajes y desplazamientos que debe afrontar el equipo, que acaba recién de aterrizar desde Canarias para afrontar otro nuevo desplazamiento de cara al próximo fin de semana. Esta vez aguarda otro largo viaje en carretera con destino Almería, en el extremo sudeste de España, cerca de 600 kilómetros y casi seis horas de trayecto para que el equipo se enfrente a Unicaja, otro de los de la llamada “clase media” de esta Superliga. El partido se jugará este sábado a partir de las cinco y media de la tarde.

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