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Objetivo, jugar como el Mirandés que deslumbró en Copa del Rey Objetivo, jugar como el Mirandés que deslumbró en Copa del Rey
El CD Teruel busca un modelo de juego rápido y vertical para el próximo año en Segunda RFEF

Objetivo, jugar como el Mirandés que deslumbró en Copa del Rey

Intensidad, presión y velocidad, ejes del ideario futbolístico del futuro entrenador
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El valor añadido que busca el CD Teruel con el entrenador Unai Mendía tiene que ver con una forma de entender el fútbol que se asemeja a la de aquel Rayo Vallecano de Iraola que convertía sus partidos, sobre todo en Vallecas, en un aluvión de fútbol ofensivo en oleadas basado sobre todo en transiciones rápidas con las bandas como grandes protagonistas. Se construye el equipo a partir de una defensa presionante, rápida, que no tiene miedo de dejar veinte metros a su espalda y empuja al equipo hacia una presión alta para el robo de pelota lo más rápido posible.

Se apoya el ideario de Mendía en un centro del campo dinámico, con presencia, que sea capaz de cubrir terreno. El manejo de la posesión, de esta manera, se circunscribe a la búsqueda de la transición rápida, que encuentre en las bandas jugadores verticales y explosivos que lleven la pelota con rapidez y en buenas condiciones a la línea de ataque, mejor con dos puntas o, en su caso, con ariete fijo y segundo delantero de perfil más relacionado con la generación de juego. Como resume Quique García, “velocidad por las bandas, precisión por el centro”, el modelo del Rayo, expresión más conocida.

Pero acaso fue en Miranda de Ebro donde este modelo alcanzó su versión más perfeccionada. Allí el tandem Iraola-Mendía alcanzó las semifinales de la Copa del Rey, con un modesto equipo de Segunda División que, sin embargo, rozó las eliminatorias de ascenso a Primera en esa temporada de inicio de pandemia en la que el Mirandés se quedó a apenas cinco puntos de pelear por subir de categoría. Ese cuadro jabato se caracterizaba por una velocidad e intensidad que incendiaban los partidos en Anduva.

Un hombre tranquilo

Su fútbol aspira a prender en la plantilla y en la afición del CD Teruel, pero, por el contrario, el club destaca del que será previsiblemente nuevo inquilino del banquillo mudéjar su carácter tranquilo y afable, precisamente muy poco dado a los incendios y al ambiente crispado y enrarecido. Bien al contrario, Unai Mendía se caracteriza por ser un preparador de talante tranquilo y con gran predisposición, un hombre de club.

Será el guipuzcoano, eso sí, el tercer entrenador en menos de un año. Comenzó la pasada temporada al frente del equipo el zaragozano Víctor Bravo, que se había ganado el derecho a llevar al CD Teruel toda vez que consiguió la machada de ascenderlo de Segunda a Primera RFEF. Armó un conjunto mudéjar muy difícil de vencer, pero su escasa producción ofensiva le privó de victorias y condujo al equipo a la última posición de la tabla.

A finales de otoño llegó la oportunidad para Raúl Jardiel, con el que el equipo enganchó una racha de resultados con números de play-off que mantuvieron al equipo con vida hasta la penúltima jornada de la competición. Sin embargo, el objetivo de la permanencia no se alcanzó;ˆentrenador y equipo decidieron separar sus caminos. Llega la era Mendía, y sus resultados marcarán su futuro en una temporada difícil.

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