El CD Teruel, al Grupo 1 junto a los equipos del norte de España

El CD Teruel ya conoce a sus rivales del próximo año para la Primera RFEF. Las federaciones territoriales y autonómicas han aprobado este 27 de junio la disposición de los grupos de Primera Federación para la temporada 2023/2024, que finalmente dividirá el territorio nacional en norte y sur. El conjunto rojillo estará encuadrado en el Grupo 1, por lo que formará parte de los conjuntos que estén en la zona norte del país. A pesar de que esta no era la opción preferencial para la entidad rojilla, que prefería una división este-oeste, el club de Pinilla evitará la zona andaluza, aunque tendrá que acometer largos viajes para enfrentarse a los equipos gallegos y castellano-leoneses.
 

El CD Teruel competirá en el grupo 1 en su primer año en la Primera RFEF. Sus rivales serán el Barça B, el Sabadell, el Cornellá, el Gimnastic de Tarragona, el Tarazona, el Osasuna Promesas, el SD Logroñés, el Real Unión, el Sestao River, la Real Sociedad B, la Cultural Leonesa, la Ponferradina, el Unionistas, el Rayo Majadahonda, el Fuenlabrada, el Lugo, el Deportivo de la Coruña, el Celta B y el Arenteiro.



Finalmente, la decisión de la RFEF ha sido la de trazar una línea horizontal recta por mitad de la Península Ibérica para distribuir a los cuarenta equipos que pelearán en la categoría de bronce durante la temporada que viene. Según el propio ente federativo, la división norte-sur era la opción B y  ha sido la más votada entre las federaciones territoriales presentes en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas en la Comisión de Primera RFEF. 

Las dudas acerca de cuál iba a ser el punto de corte en cualquiera de las posibles reparticiones que se dieran se han resuelto mediante la separación de los equipos madrileños, yendo dos a cada uno de los grupos. Así pues, el CD Teruel no coincidirá con los filiales del Atlético de Madrid ni del Real Madrid, pero sí que lo hará con el Fuenlabrada y el Rayo Majadahonda.

Sabor agridulce en el club

La distribución final ha dejado un sabor agridulce en la entidad turolense. La junta directiva del club no apoyaba la división norte-sur, ya que consideraba que la variante este-oeste era más beneficiosa económicamente para todos los equipos. Sin embargo, el CD Teruel es consciente de que competir en la vertiente norte del país es una opción mejor que hacerlo en la vertiente sur debido a que los desplazamientos son más asequibles. 

Sin embargo, en Pinilla no se comprende la decisión de que el CD Castellón o los dos filiales madrileños hayan quedado encuadrados en el grupo del sur, ya que confiaban en los duelos ante esos equipos para  obtener una gran taquilla. 

La buena relación que mantiene el equipo turolense con el castellonense hubiera generado una jornada festiva tanto en Pinilla como en Castalia, en caso de enfrentarse, pero la organización de grupos ha puesto fin a las esperanzas de ambos conjuntos, que querían cruzarse en temporada regular.

De tal modo, los partidos más llamativos para los aficionados rojilos serán los que enfrenten a su equipo ante colosos dormidos de la categoría, como el Deportivo de la Coruña, que será el principal atractivo del grupo 1, o ante  filiales poderosos, como el de la Real Sociedad y especialmente el del FC Barcelona. Además, la hinchada turolense también tendrá algún que otro desplazamiento sencillo, como el del derbi ante la SD Tarazona.

Mucho nivel en lo deportivo

Más allá del tema económico y logístico, el CD Teruel queda enmarcado en un grupo con un gran nivel en lo deportivo. Sin embargo, desde el club ya sabían que fuese cual fuese la distribución de los equipos el cuadro rojillo iba a tener rivales de “muchísimo nivel”. Así pues, el grupo 1 estará compuesto por dos equipos descendidos de la Segunda División (Lugo y Ponferradina); cuatro filiales del más alto nivel (Celta B, Osasuna B, Real Sociedad B y Barça B); diez equipos que ya estuvieron el año pasado en Primera RFEF (Deportivo de la Coruña, Cultural Leonesa, Unionistas de Salamanca, Rayo Majadahonda, Fuenlabrada, Real Sociedad B, Real Unión, Osasuna B, Gimnastic de Tarragona, Sabadell y Cornellá); y cuatro conjuntos recién ascendidos de la Segunda RFEF (Arenteiro, Tarazona, Sestao River y CD Teruel).

Los otros veinte equipos

Al haber caído en la zona norte, el cuadro dirigido por Víctor Bravo ha evitado largos desplazamientos a Andalucía, pero también equipos muy potentes de la Primera RFEF como pueden ser el Málaga, el Murcia, el Castellón o los dos filiales madrileños. Y es que el grupo 2 también tendrá un nivel futbolístico enorme, con otros dos equipos recién descendidos de la Segunda División (Málaga e Ibiza); tres filiales de equipos que militan en Primera - dos de ellos recién ascendidos de Segunda RFEF- (Real Madrid Castilla, Atlético de Madrid B, Recreativo Granada); once bloques que ya estuvieron en la categoría de bronce el curso 2022-2023 (Ceuta, Mérida, Algeciras, Alcoyano, Atlético Baleares, Castellón, Intercity, Murcia, Córdoba, Linares y San Fernando); y otros cuatro recién ascendidos más (Antequera, Melilla, Recreativo de Huelva y Atlético Sanluqueño).