Los turolenses cumplen con la tradición de la Candelaria y llevan a bendecir a sus bebés
El obispo Satué presidió la celebración de la Presentación de Jesús en el Templo en Santa ClaraLos cristianos turolenses cumplieron ayer jueves con una de las tradiciones religiosas más arraigadas en la ciudad: la bendición de niños en la festividad de la Candelaria. Las familias acudieron a la iglesia de Santa Clara con sus hijos nacidos durante el pasado año 2022 para este simbólica celebración.
El obispo de la Diócesis de Teruel y Albarracín, José Antonio Satué, fue el encargado de presidir el acto con el que la Iglesia conmemora la Presentación de Jesús en el Templo y donde las velas, las candelas que se encendieron al inicio de la ceremonia, simbolizaban que “Jesús es luz”. Posteriormente, el obispo bendijo a cada uno de los pequeños que se habían reunido desde las 17.00 en esta iglesia del Centro Histórico.
Satué destacó que el gesto de presentar a los niños es “muy bonito” e invitó a las familias a aprovechar esa bendición para “dar gracias” y pedir a Dios que los cuide. Resaltó que la fe da fuerza y recordó a los padres la importancia de que los niños se sientan amados.
La Iglesia del ya cerrado convento de las Clarisas se llenó ayer por la tarde con muchos bebés y también con niños más mayores y es que a los turolenses les gusta mantener esta tradición que pasa de padres a hijos y en los bancos del templo, se veían los carritos de bebé y los hermanos mayores, papás, mamás y abuelas y abuelos, todos muy contentos de poder presentar a los nuevos miembros de la familia ante la comunidad
Cristina Ranera, que acudió a la celebración con su hijo Alejandro, de 10 meses, recordaba que en su familia se mantiene desde siempre esta costumbre. Su madre, la abuela del pequeño, comentó que ella ya había llevado a sus hijas y que ahora lo hacía con sus nietos, primero con los primos de Alejandro y ahora con el benjamín.
María Velasco llevó ayer de nuevo a su pequeño Mateo, que tiene 19 meses, porque le gustó la celebración el año pasado y quería volver a participar. También era el segundo año para Bruno, que tiene 13 meses y medio y en 2021 tenía solo un mes y medio cuando recibió la bendición. “Es importante que se mantengan estas tradiciones”, comentó su madre, Pilar Pardo.
Esta celebración religiosa fue organizada por Acción Católica General.