La mejor música de calle del España y Francia, de nuevo en el Tamborile

Sin ningún miedo al mal fario, el Festival Tamborile prepara su edición número 13 que tendrá lugar el 17 de junio en Mezquita de Jarque, una población que espera multiplicar su población por 30 y superar los 2.500 visitantes durante toda la jornada del sábado.

El único festival de España dedicado específicamente a la música de calle, junto al Haizetara de Amorebieta y el Femuka de El Espinar (Segovia), volverá a apostar por una programación muy ambiciosa para todos los públicos. Trece formaciones visitarán Mezquita: Opsa Dehëli (Francia), Sidral Brass Band (Barcelona), Los Mejillones Tigre (Jaén), La Selva Sur (Sevilla), Ataca Paca (Madrid), Compañía Teatro Gorakada (Euskadi), Turukutupa! (Euskadi), METER Mano Rara (Castellón), Orkresta Txaranga Elektrikoa (Euskadi) y Batucada La Trapala (Monreal del Campo, Teruel).

El escenario amplificado acogerá en formato eléctrico a Opsa Dehëli (19.30 horas), Los Mejillones Tigre (23.30 horas) y La Selva Sur (2.00 horas). El resto del tiempo la música será omnipresente en formato callejero por todo el pueblo, con dos pausas únicamente para comer, de 13.30 a 16 horas, y para cenar, de 22 a 23 horas.

Tras La Selva Sur, en torno a las 3.30 horas tomará los mandos Orkresta, una electrocharanga vasca fantástica que funde metales y percusiones tradicionales de la charanga con bajo y guitarra eléctrica, y que promete mantener los decibelios oportunos mientras quede personal en pie y con ganas de bailar.

Como novedad, Tamborile incluirá además las artes escénicas en su programa, con la compañía vasca Gorakada, que a las 12.30 horas ofrecerá en la localidad turolense el estreno absoluto de la obra con la que van a girar este verano, La Kermes del Vermú.

Público familiar

Jorge Andrés y Federico Sancho, de la asociación cultural Tamborile, estuvieron ayer acompañados en la presentación oficial del festival por Herminio Sancho, alcalde de Mezquita, y Diego Piñeiro, diputado provincial de Cultura. Los miembros de la organización explicaron que, junto a la música, Tamborile no se olvida de que la cita atrae a mucho público familiar, por lo que el parque del pueblo ofrecerá una zona de juegos y animación infantil durante toda la jornada, con la compañía vasca Turukutupa!, que dirige un proyecto de reciclaje artístico y sonoro que relaciona la música con la gestión creativa de los recursos.

También habrá un mercado de artesanía y productos locales, un área de descanso y servicios de bebida, comida y cena. Tamborile no renuncia a la filosofía de los festivales gratuitos, pero sus organizadores recordaron que consumir en las barras, comer y cenar en los puestos y comprar camisetas y merchandising es la mejor forma de asegurar que cada año habrá un nuevo Tamborile. “Si alguno viene con la lata de cerveza”, ironizó Jorge Andrés, “por lo menos que no se ponga en primera fila, que se tape un poco”.

Tamborile cuenta este año con un presupuesto de 45.000 euros, sufragado con los ingresos obtenidos por los visitantes y la colaboración del Ayuntamiento de Mezquita, la Diputación Provincial de Teruel y el Gobierno de Aragón. En ese sentido Herminio Sancho, alcalde de la localidad, aseguró que “es increíble el programa que consigue hacer la asociación con ese dinero”. Buena parte del mérito reside en “el trabajo voluntario que hacen quienes forman parte de la asociación cultural Tamborile”, según Sancho, aunque los organizadores también apuntaron que, afortunadamente, algunas de las bandas que recalan en Mezquita se avienen a rebajar sus cachés, “porque el Festival Tamborile ya empieza a ser una referencia conocida para los músicos de calle en la que quiere estar”.

En ese sentido abundó Diego Piñeiro, diputado provincial de Cultura, para quien Tamborile, que forma parte de la marca Teruel, Tierra de Festivales, “es ya uno de los grandes referentes de esta provincia en cuanto a los festivales, y un gran polo de atracción como avalan los datos”.

Además de la irreductible vocación de apostar por la música de calle y en directo -Tamborile es uno de los pocos festivales españoles en los que se prescinde de DJ’s o discomóvil al final, siendo toda la música que se escucha en directo-, la de Mezquita de Jarque mantiene sus fechas dentro de la primavera, “porque ya hay bastante festivales en verano, y no tienen ningún sentido que entráramos a competir por el público entre nosotros”.

Eso tiene sus inconvenientes, y es que hasta última hora habrá que estar pendiente del cielo, por si las precipitaciones hicieran su aparición. “Algún año nos ha llovido y tenemos plan B”, aseguraban ayer Jorge Andrés y Federico Sancho. “En caso necesario las actuaciones tendrían lugar en el pabellón de Mezquita, que no es lo mismo, pero al menos está tratado acústicamente para que se pueda escuchar bien”. Por tanto una mala previsión del tiempo no será excusa para perderse una nueva edición del Festival Tamborile.

La cita se extiende a Utrillas y Martín del Río

Como novedad, este año Tamborile ha organizado dos conciertos que tendrán lugar durante la previa, el viernes 16 de junio, en el Centro de Atadi en Utrillas y en la residencia de mayores de Martín del Río, en colaboración con la Comarca de las Cuencas Mineras. La actuación correrá a cargo de Meter Mano Rara, o lo que es lo mismo, Miguel Ángel Gimeno, un músico de Alcora especializado en blues y bluegrass y en fabricarse él mismo sus guitarras y otros instrumentos.

Además, también el viernes 16 el Tamborile realizará, como viene siendo habitual, una actividad en colaboración con los alumnos de la Escuela Infantil de Mezquita de Jarque y del CRA Pablo Antonio Crespo, que reúne niños de Aliaga, Camarillas, Cuevas de Almudén, Hinojosa de Jarque, Jarque de la Val y Mezquita. En esta ocasión se llevará a cabo un taller de música y materiales de reciclaje.