EFFE, diez años de RNR

Lo normal en el rock’n’roll es que las bandas tengan más de 25 años o sean aventura de reciente creación. En 2013 parecía una locura montar un proyecto como EFFE, un grupo de provincias que bebía del rock estatal y el clásico, con influencias del punk e incluso del heavy. El género se estaba haciendo cada vez más de culto y la industria musical se transformaba radicalmente, pero EFFE nació para reivindicar que el rock sigue llenando estadios y que las guitarras eléctricas no han dicho todavía su última palabra.

La última década ha dado para que EFFE publique cuatro discos (Cuentos de invierno, 2014), Tras la tormenta (2017), Ni realidad ni quimera (2019) y Los días de palabras muertas (2023), que este sábado se extractaron en el frontón de San Julián durante el concierto de celebración de su décimo aniversario. Fabián Navarrete (voz), Gustavo Ramos (batería), Rubén Fernández (bajo), Borja Lacruz (guitarra) y Diego Soriano (guitarra) ofrecieron un excepcional concierto en el que además participaron ocho artistas -entre ellos Kutxi Romero o Kolibrí Díaz, de Marea, o Quini Ruano de Benito Kamelas- de entre la pléyade de grandes roqueros que han colaborado con EFFE.

Fue una celebración por todo lo alto, un gran concierto y un baño de realidad. Para lo malo -entre el público había más carritos de niños que perfiles de Instagram- y para lo bueno, porque el rock, aunque sea con la media de edad más cerca de los 50 que de los 20, sigue vivo y vigente.
 

Quini Ruano, cuyo temazo Aquellas cosas que solíamos hacer fue recientemente remezclado por el turolense Fernando Moreno, el artífice del fenómeno Potra Salvaje, fue el primer invitado en subir al escenario para cantar junto a Fabián Desueño, del disco debut de los turolenses. Jerry Erro -4madres- fue el siguiente, cantando El último, tema que grabó el año pasado y que pertenece a Los días de palabras muertas, el último trabajo que han entregado los EFFE.

A continuación la banda quiso homenajear a algunos de los músicos turolenses que han colaborado en su trayectoria. El primero en subir a la tabla fue Chema Mangas, guitarrista que estuvo en el nucleo original de EFFE hasta que abandonó la formación en 2020 y fue sustituido por Diego Soriano. Con Mangas arriba sonó Ella es mi ruina, del segundo disco.

El siguiente fue Alberto Arnau, frontman de bandas como Abismo o Visitantes, que colaboró en Papel de plata del disco debut, y a continuación subió al escenario Jorge Pérez Kapi, cantante de los Azero de La Codoñera, la banda más importante de la provincia con 25 años a sus espaldas y con presencia en el ViñaRock, uno de los festivales de referencia en el género. Kapi cantó junto a Navarrete Traficante, del primer disco.

Tampoco faltó Frankcho Gallego, que ofreció unos arreglos al piano en Eterna, tranquila y formal, del LP Tras la tormenta. Aunque Gallego no grabó originalmente esa canción, su presencia era obligada en la noche del sábado, ya que el turolense fue el responsable de la producción y el bajo de Cuentos de invierno.

El penúltimo artista invitado en subir fue Kolibrí Díaz, guitarrista de Marea y productor de los tres últimos discos de EFFE, que tocó Sin nada -aunque la grabación de los turolenses en los que pueden oírse sus seis cuerdas se encuentra en Eterna, tranquila y formal.

Y en la recta final del concierto subió al escenario uno de los músicos más esperados entre el abundante público que se dio cita durante la fiesta del rock: Kutxi Romero, cantante y compositor de Marea. El navarro ha grabado dos canciones con EFFE, La copla del rock and roll que pertenece al último LP y la que eligió para el concierto del décimo aniversario: A la sombra de una encina, del segundo LP Tras la tormenta, una de las canciones más paradigmáticas del quinteto turolense.

Una noche para recordar

Esos trece músicos sobre el escenario y varios centenares de espectadores entregados dieron para una espléndida noche para recordar. Hubiera encontrado mejor emplazamiento en la plaza del Seminario bajo la torre de San Martín, donde estaba originalmente concebido, pero las previsiones de lluvia -que no se cumplieron- hicieron que EFFE y el Ayuntamiento de Teruel optaran por el plan B del frontón de San Julián, ante el riesgo de volver a tener que suspender el concierto después de haberlo hecho ya en junio y en septiembre.
 

Para como podía haber sido, el espacio cumplió de sobra. La prueba de sonido fue decepcionante por culpa de la enorme reverberación que generaba, pero cuando el público llenó el frontón se mitigó el eco sensiblemente y, pese a la mala acústica, la calidad del sonido fue muy aceptable.

EFFE aprovechó para grabar en vídeo y en audio el concierto, y en los próximos meses se editará el que será el quinto trabajo discográfico de la banda. Mientras tanto los turolenses tienen cerrados dos conciertos, en La Línea de la Concepción (Cádiz) a finales de este mes y en Granada para marzo. A partir de primavera tocará empezar a preparar el verano de 2025 y comenzar a trabajar en nuevos temas que la banda tiene ya en la incubadora.

La banda todavía ve lejos el adiós a los escenarios

EFFE nació en 2013 como un proyecto personal de Fabián Navarrete, cuatro años después de disolverse El Frío. Navarrete escribió un disco, Cuentos de invierno, que produjo Frankcho Gallego y fue grabado con Gustavo Ramos (batería), Rafa Sánchez (guitarra) y los bajos de Frankcho Gallego en los estudios RockFlow de l’Alcudia. En ese primer disco colaboraron músicos que entonces estaban en Almas para el diablo junto a Gallego y Ramos, como Alberto Arnau (Papel de plata). También colaboraron Quini Ruano de Benito Kamelas (Desueño) o Kapi, de Azero (Traficante).
 

Para defender el disco en directo se formó una banda con el propio Gustavo Ramos, además de Rubén Fernández al bajo y Borja Lacruz y Chema Mangas a las guitarras. Este último grabó el segundo y el tercer disco de EFFE, pero en 2020 tuvo que abandonar el grupo. Fue sustituido por el joven Diego Soriano, que participó en la grabación del último disco, Los días de palabras muertas.

La nueva banda turolense debutó en directo presentando el disco el 8 de noviembre de 2013 en el Cine Maravillas de Teruel. El éxito de ese primer disco y de los cerca de 80 conciertos que se organizaron hicieron que EFFE dejara de ser un proyecto personal y se afianzara como grupo.

Navarrete, que al mismo tiempo ejerció como manager de Almas para el Diablo, tardó en volver a ponerse a componer, pero en 2017 pudo ver la luz el segundo disco, Tras la tormenta, el primero que produjo Kolibrí Díaz, guitarrista de Marea, en su estudio R5 de Orikain (Navarra). Desde entonces el navarro ha producido todos los discos de EFFE.

Ese disco supuso decidir el camino de la banda, que optó por avanzar por la senda abierta en 2013, mantener la esencia del rock español y buscar cada vez más calidad en las composiciones y en el sonido. En ese segundo trabajo colaboraron El Drogas (Vale ya) , Kutxi Romero (A la sombra de una encina) o el propio productor David Kolibrí Díaz, con un solo de guitarra de Eterna, tranquila y formal.
 

Con solo dos discos EFFE pasó a forma parte de la discográfica Rock Estatal Records y comenzó a proyectarse en todo el territorio nacional, cosechando críticas muy favorables en la prensa especializada. El grupo superó el centenar de conciertos entre 2017 y 2019.

En 2019 salió Ni realidad ni quimera, tercer disco de la banda y segundo producido por Kolibrí Díaz y editado por Rock Estatal Records. Tras la grabación del disco el grupo pasó por sus momentos más difíciles. Con una enorme gira de 25 conciertos por España por delante, la pandemia obligó a cancelarla y EFFE pasó por el mismo impass que el resto de grupos de música. Por si fuera poco, Chema Mangas tuvo que abandonar la formación por motivos personales. Diego Soriano rellenó su hueco y supo adaptarse perfectamente a EFFE, aportando además sonidos nuevos, más pesados, característicos de las guitarras de siete cuerdas.

Este aporte de sangre nueva fue más evidente a partir del cuarto y hasta el momento último disco. Vio la luz en octubre de 2023, hace justo un año, y es el primero cuyas guitarras están grabadas por Borja Lacruz y Diego Soriano. Kolibrí Díaz volvió a producir un trabajo que en esta ocasión salió bajo el sello Animal Records. Contó con las colaboraciones de Kutxi Romero (La copla del rock and roll), Ramoncín (Aurora Boreal) y Jerry Erro, de la banda 4Madres (El último).

Hasta ahora es el disco más maduro y más redondo de la banda, pero los músicos de EFFE no ven el final. Pese a que el cambio en la industria del disco, y la irrupción de las redes sociales y las plataformas de música digital han cambiado las reglas del juego. Se abre una ventana promocional a los grupos menos conocidos pero también se cierra para quienes menos recursos económicos pueden dedicar a la promoción.

EFFE cuenta desde hace un año con los servicios de Laballo Comunicación, una de las agencias de prensa más prestigiosas en el panorama nacional del rock. Desde entonces cuentan con más presencia en revistas y medios digitales especializados y han sonado en R3. Sin embargo son más selectivos a la hora de organizar conciertos en directo, ya que la política de muchas de las salas -y también la caída de la demanda de rock en directo entre el público- hace que no pocos conciertos, especialmente fuera de la provincia de Teruel, terminen siendo deficitarios.

Pero en el rock no todo se hace por dinero, así que habrá mas conciertos, más discos y más aniversarios de EFFE. Y aunque admiten que el cuerpo ya no aguanta como a los veinte años, Fabián lo tiene claro: “Los años pasan factura, pero existe el Ibuprofeno”.