Los castillos de Teruel pasarían de tener 140.000 visitas a 500.000 al año con una inversión mínima

Teruel tiene más de 500 fortificaciones y solo nueve de ellas tienen las visitas reguladas. Por esas nueve pasan en torno a 140.000 personas cada año y los responsables de Arcatur calculan que, si se pusieran en valor la treintena de castillos que tienen mayor interés histórico y turístico en la provincia, las visitas podrían alcanzar el medio millón ya que por cada una de ellas pasarían entre 5.000 y 10.000 personas anuales. Así lo planteó este sábado Rubén Sáez, presidente de Arcatur, durante la ponencia que ofreció en Cutanda en el Día de los Castillos de Teruel y que llevaba por título Los castillos de Teruel: un recuerdo turístico excepcional.

El experto destacó que se trata de un patrimonio en el que apenas se ha invertido y aclaró que para revitalizar muchos de ellos no es necesaria una cantidad ingente de dinero, sino que podrían abrirse al público y atraer visitantes con apenas una inyección por fortaleza de 50.000 euros.

Comentó que los 140.000 turistas que acogen las nueve fortalezas de Teruel en las que se cobra entrada solo los supera  Dinópolis y planteó que, mientras que el parque paleontológico concentra su público básicamente la capital, las fortalezas suponen una distribución del recurso turístico por distintas comarcas.

Enclaves

Indicó que algunos castillos están situados en enclaves que cuentan por sí mismos con muchos visitantes, y puso como ejemplo Mora de Rubielos o Valderrobres –en Gúdar-Javalambre y Matarraña, respectivamente–, pero hay otros, y citó a Peracense, que son el motor turístico y prácticamente único de la zona: “A Peracense va la gente a ver el castillo y en 2019 pasaron por allí más de 23.000 personas”, señaló.

Además de la ponencia, tuvo lugar la entrega de premios del VII concurso de fotografía Castillos de Teruel, que ganó Sinuhé Vallvé por una foto tomada en el Castillo de Los Ares de Pozondón. El segundo premio fue para una imagen de Mora de Rubielos captada por José Torres. Sinuhé Vallvé hizo doblete al alzarse con el tercer premio por una captura del castillo de Bueña.

Ubicación

Los participantes se desplazaron hasta el castillo, donde les explicaron dónde se ubicaba el campamento, que se localizó gracias a los 5.000 fragmentos de cerámicas distribuidos en una superficie de 20 hectáreas. Rubén Sáez indicó que el ejército ganador –en este caso el cristiano– saqueaba el campamento, dejando las cosas que no tenían valor, como la cerámica. La presencia de tanta concentración de material “responde a un campamento o a unos alfares, pero entonces aparece cerámica pasada de cocción y restos, algo que no ocurre aquí donde es uniforme y de calidad”.

Los responsables de Arcatur explicaron a los vecinos lo mucho que se ha avanzado para poner en valor a batalla de Cutanda, algo que ha ayudado a poner a esta pedanía calamochina en el mapa: “Ha pasado de no conocerla nadie a estar en artículos de revistas especializadas y de divulgación” aseguró Sáez, quien añadió que a ello también ha contribuido el buen hacer de los participantes en la recreación histórica.

El Día de los Castillos también incluyó la visita al Centro de Interpretación Batalla de Cutanda, que abrió sus puertas hace unas semanas.