Éxito de público en Fitruf con la ilusión del reencuentro social sin restricciones sanitarias

La Feria Internacional de la Trufa, Fitruf, terminó este domingo en Sarrión pasada por agua, lo que obligó a posponer el concurso de perros, pero con un buen sabor de boca por la gran afluencia de público durante todo el certamen y con la emoción de volver a recuperar el contacto estrecho entre los productores y los consumidores, una vez superada la etapa más dura de la pandemia de coronavirus.

Los expositores se mostraban satisfechos con la afluencia de público y las ventas y aseguraban que se había recuperado la actividad de 2019 e, incluso, se había superado. El presidente de la Asociación de Truficultores y Recolectores de Trufa de Teruel (Atruter), Daniel Brito, recordó que en 2020 la crisis sanitaria impidió la celebración del certamen y el año pasado se hizo, pero con restricciones y por ello había muchas ganas de volver a celebrar el certamen con normalidad, de verse y hablarse.

“Hay mucha gente que es habitual de la feria, que ya ha hecho amistad con algunos stands y es muy ilusionante y muy gratificante para la gente poder verse y tocarse. Fitruf no es solo una feria -que obviamente se vende- es un hecho social”, destacó Brito.

La vuelta a la normalidad también ha propiciado la llegada de visitantes de otros países. “La gente ya no tiene miedo de salir hemos tenido italianos, mexicanos o franceses”, explicó el presidente de los truferos que comentó que el público es muy variados, desde el consumidor, a hosteleros, productores y profesionales de las diferentes actividades relacionadas de una u otra forma con el cultivo de la trufa negra.

Ventas

En cuanto a la actividad comercial durante estos tres intensos días, a pesar del precio récord de la trufa, a 1.200 euros por kilo,  las ventas han sido buenas. Daniel Brito destacó que el consumidor acude cada vez con más conocimiento sobre a trufa negra (Tuber melanosporum), gracias a las redes sociales y a internet. Asimismo, aseguró que muchos son ya clientes fijos, aunque siempre hay personas que acuden por primera vez.

Estefanía Doñate, de Manjares de la Tierra, hacía un buen balance del certamen con mucha gente sobre todo por las mañanas, tanto del viernes como del sábado y algo menos ayer, por la climatología. “La lluvia no ha frenado a la gente para conocer la trufa, hemos tenido el mismo ambiente que en 2019 y la gente, a pesar de que el precio es más elevado, está muy contenta con la explicación y ver que se lleva trufa negra de Teruel”, afirmó.

Doñate aseguró que el consumidor cada vez conoce más el producto, pero que también llegan personas que no saben nada y desde este expositor están encantados de poder seguir explicando todo lo relativo a este manjar.
 

Sara Pulido, de Turbatruf, aseguró que había más gente incluso que en 2019 y que dan todas las explicaciones que les piden los clientes. Sobre la trufa de esta temporada, aseguró que tiene una calidad muy buena y que este es el momento adecuado para comprarla y consumirla.

El programa de la feria de ayer se vio afectado por la lluvia ya que una de las actividades centrales de la jornada era el concurso de perros truferos que no se pudo realizar y que se ha pospuesto para la inauguración del centro del interpretación Tuber Universum.

Patricia González, una de las participantes en el concurso, reconoció que había sido “un gran chasco” que no se hubiera podido celebrar ya que ella y su pareja habían acudido expresamente para ello desde Barcelona. Sin embargo, aprovecharon el día para visitar la feria, comprar producto y degustar las tapas.

Aunque el público cada vez tiene una procedencia más diversa, buena parte de los asistentes son de Levante, como Santiago, que es de Valencia y tiene casa en Mora de Rubielos y había acudido a Sarrión a este certamen por primera vez, animado por unos amigos. “La feria está muy bien, muy animada y todo está muy bien organizado y todo está muy bueno”, comentó.

Grandes atractivos

Uno de los grandes atractivos de Fitruf es precisamente la oportunidad de degustar recetas con trufa, gracias a la implicación de la Asociación de Mujeres de Sarrión que cocina platos con trufa que se venden en tapas a 3 euros. Unas 150 personas colaboran en esta iniciativa.

Los huevos fritos con patatas y las croquetas es lo que tiene más éxito, según explicó una de las voluntarias, Mabel Fontestad.

“A la gente le gustan los platos porque están muy buenos, son artesanos y, normalmente, todo el que viene un año, al año siguiente repite y sabe lo que tiene que pedir”, afirmó esta vecina de Sarrión.

Por otro lado, el coordinador general y diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, la senadora Beatriz Martín y varios miembros del Movimiento ciudadano visitaron ayer Fitruf, para seguir de cerca la situación del sector.

Guitarte destacó que la creación de la Indicación Geográfica Protegida de la Trufa de Teruel es un paso “fundamental” para el impulso de la marca, recordando que en las negociaciones de los Presupuestos Generales del Estado para 2022 se consiguió el compromiso del Ministerio de Agricultura para redactar un estudio de mercado e informes técnicos agronómicos para su elaboración, informó Teruel Existe en una nota de prensa. El diputado señaló que gracias a una enmienda de Teruel Existe se logró destinar 100.000 euros a este objetivo en 2022.

En la feria, los representantes de Teruel Existe pudieron conversar con la Asociación Trufa de Teruel, Atruter. Coincidieron en destacar el gran potencial de este recurso para la comarca de Gúdar-Javalambre y para otras zonas de la provincia, que es la principal zona productora de Aragón, alcanzando más del 80% de la producción.

Teruel Existe valoró muy positivamente los años de esfuerzo de Atruter, en los que se ha conseguido desarrollar y asentar una marca de calidad. También destacó el trabajo de los empresarios turísticos para generar una oferta de primer nivel en torno al “trufiturismo”.