Concluye el taller de empleo Montalbán Perspectivas tras arrojar luz sobre la historia local

La sala de audiovisuales de la casa de cultura de Montalbán sirvió este lunes para acoger la clausura del I Taller de Empleo Montalbán Perspectivas, que desde el mes junio del año pasado se estaba desarrollando en Montalbán. Ha sido auspiciado y financiado por el Instituto Aragonés de Empleo (Inaem) y promovido por el Ayuntamiento, el Servicio Público de Empleo Estatal y el Gobierno de Aragón.

El acto contó con la presencia de Patricia Utrillas, directora provincial del Inaem, diversos representantes del instituto de empleo aragonés, miembros del ayuntamiento de la localidad de Montalbán, alumnos, arqueólogos y personal docente del taller.

Miguel Ángel Nuez, concejal de Turismo y gestor de este proyecto, el balance es muy positivo ya que los objetivos planteados inicialmente se han cumplido al 100 por 100, tanto los que se trazaron para la Era de la Cruz como las catas arqueológicas y accesos al castillo de la Orden de Santiago,  según indicó  en su intervención. También mostró su satisfacción por poder sacar a la luz “parte de nuestra historia”.

Hallazgos

La directora del Taller, Amparo González, hizo un rápido bosquejo de todos los aspectos trabajados y destacó los hallazgos obtenidos en la realización de las catas arqueológicas, último de los trabajos realizados por el alumnado. Mencionó la abundante cerámica que han ido catalogando, vidrio, huesos, metales, objetos bélicos, botones, incluso un esqueleto completo de una persona que bien puedo ser ejecutada durante el asedio de la primera guerra carlista a la localidad.

El objetivo principal de este taller de empleo de 1.920 horas, siempre ha sido mejorar la empleabilidad del alumnado, que los participantes obtengan el certificado de profesionalidad con la especialidad de Operaciones auxiliares de acabados rígidos y urbanización,  un certificado de profesionalidad de nivel 1, además de una acreditación  del módulo de Trabajos Auxiliares de Arqueología.

La directora provincial del Inaem destacó en su intervención lo demandado que está actualmente este tipo de certificado de profesionalidad, más aún si cabe por no existir una enseñanza reglada que imparta este tipo de formación, de ahí la importancia de talleres de empleo como este. Patricia Utrillas también puso de relieve que de los  siete alumnos cuatro hayan sido mujeres, incidiendo en que actualmente se está viendo una mayor presencia de mujeres en profesiones tradicionalmente muy masculinizadas.

El taller ha estado divido en cinco módulos en los que alumnado, formado por Ana, Jessica, Lauren, Marc, Merche, Olga y Pedro, ha adquirido conocimientos teóricos y prácticos teniendo como docente a Jesús Moya, quien retrasó el momento de su jubilación para poder impartir sus conocimientos a este alumnado hasta el final del taller. Las prácticas las realizaron inicialmente en una nave del ayuntamiento y el sus aledaños, 1000 metros cuadrados donde pudieron poner en práctica lo que iban aprendiendo.

Era de la Cruz y castillo

Las intervenciones posteriores estuvieron centradas en crear un mirador en la Era de la Cruz arreglando y acondicionando los accesos, instalando barandillas y colocando dos mesas interpretativas explicando la panorámica excepcional que se aprecia desde ese lugar y otra poniendo en valor el cielo nocturno de la Comarca declarada Starlight.
 

Los últimos trabajos del mes de mayo han consistido en trabajos auxiliares de arqueología en el Castillo de Montalbán. Las labores han ido desde el acondicionamiento a la ubicación de las dependencias del castillo, realizando las primeras catas siguiendo las indicaciones de los arqueólogos Rubén Sáez Abad, Javier Ibáñez y José Casabona, encargándose de la intervención arqueológica.

Tras la entrega de diplomas todos los presentes recorrieron la zona del castillo en donde se ha estado interviniendo en los últimos meses. Los alumnos habían preparado junto a su directora, el docente y los arqueólogos un recorrido guiado con seis paradas en las que fueron explicando los trabajos y hallazgos realizados.

Comenzó las explicaciones Javier Ibáñez, arqueólogo, quien destacó la importancia de haber iniciado estas excavaciones dado el gran interés y la poca información de la que se disponía.

Yacimiento

“Se trataba de abrir unas ventanas en el yacimiento arqueológico para verificar que había elementos conservados, para saber tipo de estructuras que nos encontramos y cómo podían ser futuras intervenciones”, explicó el arqueólogo.

Lauren fue el primero en ejercer de cicerone explicando las peculiaridades de la cata 5 hecha en la subida original por la que se accedía al Castillo.

Se trata del punto mejor defendido de la muralla, una subida con una rampa  abaluartada, los soldados subirían haciendo muchos giros lo que suponía una defensa en el caso de que accediera el enemigo. Esta subida se complementaba con una torre ubicada en un espolón próximo que cubría posibles ángulos muertos.

En esta subida es donde más material militar se ha encontrado: proyectiles de fusil de plomo, fragmentos de la culata de un cañón de bronce reventado.

Pedro habló de la cata 1 en donde se encontraría la iglesia del castillo, sobre cuyos cimientos se han encontrado restos de otra posterior en el siglo XVIII. En este punto se piensa que puede hallarse, por los indicios encontrados, ubicada la tumba del hijo de Jaime I de Aragón, Pedro Fernández de Híjar. La iglesia original datada de mitad del siglo XIII sería de tres tramos, de una sola nave, con un coro alto y una galería. Jessica explicó la cata 2, en la que hallaron cerámica islámica de algún castillo anterior. Aquí se ubicaría los pies de la iglesia, concretamente una capilla de ésta.

Diferentes épocas

Marc en la cata 3 explicó la estructura de un espacio en el que se ven muros de diferentes épocas. El siguiente paso nos llevaría al espacio conventual, en la cata número 4 Olga mostró la ubicación de lo que serían las dependencias del convento con más de 30 habitaciones, según consta en el documento que lo describe de 1499. Ana fue la encargada de explicar lo hallado en la cata 6 en donde se ubicó el cementerio hasta finales del siglo XIX.

En este lugar hay enterramientos y muestra de ello son los restos de madera que se pueden encontrar y los huesos que se ven a simple vista. Cuando estaba trabajando en esta cata, Ana encontró un esqueleto boca abajo, con las manos atadas a la espalda y con una gran fractura en el cráneo. Su muerte se produjo por el golpe con una espada y posiblemente esté datado de las guerras carlistas. “Tenemos 5.000 metros cuadrados llenos de estructuras, en ningún sitio en donde hemos excavado nos sale un espacio vacío. Se trata de un espacio muy importante a nivel histórico, centro de una Encomienda desde la que se regía en territorios del entorno, pero es también muy importante a nivel arqueológico y a nivel patrimonial, por lo que sería muy interesante poder seguir investigando más sobre el terreno”, concluyó Javier Ibáñez.