Lledó inicia las obras de la segunda fase de la balsa lateral de Les Sortetes

El municipio de Lledó está un paso más cerca de solucionar sus problemas de suministro de agua, con el inicio de la segunda fase de las obras de la balsa lateral, situada en el término de Les Sortetes. Este proyecto, impulsado por el Ayuntamiento de Lledó y financiado con el apoyo del Instituto Aragonés del Agua, unirá la balsa de 11 millones de litros de capacidad a la red de abastecimiento del pueblo. La alcaldesa, Teresa Crivillé, explicó que esta infraestructura, eliminará la dependencia directa del agua del río y asegurará un suministro constante, incluso en momentos de sequía o crecidas.

La segunda fase, que se centra en la conexión de la balsa con la red de abastecimiento mediante tuberías y bombas, comenzó recientemente y no tiene una fecha exacta de finalización, ya que las características del terreno pueden influir en la duración de las obras. “Depende de si se ejecutan en tierra o sobre terreno pedregoso, porque en este último caso podrían tardar algo más. Pero, una vez terminada, la balsa estará en funcionamiento continuo y garantizará que siempre tengamos agua almacenada”, explicó la alcaldesa.

Problemas que resolverá

El proyecto de la balsa lateral lleva en marcha desde mayo de 2023 y se diseñó para hacer frente a las dificultades que históricamente han afectado al suministro de agua en Lledó, especialmente en periodos de emergencia o cuando las condiciones del río eran adversas. Según detalló la alcaldesa, la dependencia directa del río ha sido el “mayor desafío’ para el pueblo.

“El depósito municipal, que fue construido hace más de 55 años, es demasiado pequeño para las necesidades actuales del municipio. Cada vez que el agua del río bajaba turbia o había una riada, nos quedábamos sin abastecimiento. Además, en épocas de sequía, cuando el caudal del río disminuía, nos enfrentábamos al mismo problema: los vecinos se quedaban sin agua”, comentó Crivillé.

La situación llegó a un punto crítico durante la última dana, cuando las fuertes lluvias en la región dejaron al pueblo sin agua durante 24 horas. “En esos días, dependimos completamente de los bomberos, que trajeron hasta 125.000 litros de agua en cuatro días. Hubo un día en el que no pudieron traernos ni una gota, y el pueblo estuvo sin abastecimiento. Esa experiencia fue muy dura para todos, y lo último que quiero es volver a llamar a los bomberos porque nos hemos quedado sin agua”, recordó la alcaldesa.

Con la nueva balsa, que tiene capacidad para almacenar 11 millones de litros, estos problemas desaparecerán. “Aunque el consumo varía según la época del año, esta balsa nos dará autonomía suficiente para garantizar el suministro incluso en los momentos más críticos”, aseguró.

La alcaldesa también enfatizó que la balsa no solo resolverá los problemas actuales, sino que también será un paso clave para garantizar la sostenibilidad del pueblo en el futuro. “Cuando queremos combatir la despoblación y atraer a nuevas familias, el agua es un tema primordial e imprescindible. Esta balsa nos permitirá asegurar que el agua no falte, sea cual sea la situación del río. Es un logro para el pueblo y un descanso para todos los vecinos”, dijo, felicitando al Instituto Aragonés del Agua y a todas las personas que han entendido la emergencia de esta situación y han trabajado para hacerla posible.

El proyecto ha requerido una importante inversión económica, con aportaciones tanto del Instituto Aragonés del Agua como del propio ayuntamiento. Según recordó la alcaldesa, en la legislatura anterior ya se destinaron entre 80.000 y 90.000 euros a la primera fase del proyecto, que consistió en la construcción inicial de la balsa y la obtención de todas las certificaciones necesarias para garantizar la potabilidad del agua. La alcaldesa quiso destacar la importancia de priorizar proyectos como este. “Hay cosas necesarias y otras imprescindibles, y el agua es una de estas últimas”.

Durante las obras, el ayuntamiento ha informado que el tramo de camino desde el puente hasta la balsa permanecerá cortado, y los contenedores del punto de emergencia se trasladarán al recinto del bar municipal.