CodoFrance debuta en La Codoñera uniendo lazos entre Aragón y Francia

Las fiestas patronales de San Cosme y San Damián, celebradas durante el pasado fin de semana en La Codoñera vieron nacer una nueva peña con una historia que trasciende fronteras y generaciones: CodoFrance, un grupo de amigos y familiares formado por descendientes de emigrantes que cruzaron los Pirineos en busca de una vida mejor, durante la década de los años 30, pero que nunca perdieron el vínculo con su tierra natal.

La peña, integrada por la familia Sancho Ferrer, familia Faci y varios amigos es un homenaje al arraigo y la perseverancia de aquellos que, pese a las dificultades de la Guerra Civil y la emigración lograron mantener vivas sus raíces. Jesús Pallarés, fundador de la peña y descendiente de la familia Sancho Ferrer describió con emoción los orígenes de esta asociación. “Los antepasados son emigrantes que se fueron en los años 30 y emigraron a trabajar al campo en la localidad de Perpiñán. Aunque echaron raíces en Francia, nunca se olvidaron de La Codoñera”, explicó.

La conexión entre esta localidad turolense y el sur de Francia ha sido sólida durante décadas. Cada verano, las familias regresaban al pueblo y traían consigo historias de otro país, pero con el corazón siempre puesto en Aragón. Los Sancho Ferrer, como muchos otros emigrantes construyeron su vida en Francia, pero su amor por La Codoñera les llevó a mantener un lugar donde vivir en el pueblo.

Los inicios de CodoFrance

Este año, las familias decidieron dar un paso más en su integración en las festividades del pueblo formando la peña CodoFrance, una idea que ya se venía gestando desde hace un tiempo. “El año pasado pensamos en hacer nuestra propia peña y unirnos a las 15 restantes que hay en la localidad”, dijo Pallarés.

El nombre de la peña es un guiño a su doble identidad. “Codo de Codoñera y France de Francia”, explicó su fundador. En el logo, dos símbolos reflejan esta unión: un gallo, emblema francés y un membrillo, fruto que da nombre a La Codoñera y que figura en su escudo.
 

El estreno de CodoFrance resultó ser todo un éxito. La peña, formada inicialmente por 20 personas incluyó a 15 miembros de la familia Sancho Ferrer que viajaron desde Francia, así como amigos y familiares locales. Además, se unieron a ellos otros descendientes emigrantes de La Codoñera, la familia Faci, quienes, según Pallarés, “también se fueron durante la Guerra Civil y han mantenido sus raíces”. Entre ellos, los amigos franceses quedaron encantados con la experiencia, disfrutando de las fiestas y hospitalidad del pueblo. “Están encantados con todo lo que han vivido, la misa, la procesión, la comida y la fiesta”, aclaró Pallarés.

La incorporación de CodoFrance fue acogida con entusiasmo por el resto de las peñas del pueblo. "Se nos ha recibido bien, porque esta familia siempre ha venido, y al final nos conocemos todos en un pueblo", explicó el fundador. Con la bandera de Francia ondeando junto a la de Aragón en el balcón de la casa familiar, la peña se ha consolidado como la número 16 en un municipio de apenas 300 habitantes. "Hemos hecho una fusión de todo, Francia y Aragón, y así lo vamos manteniendo", señaló Pallarés.

Las actividades durante las fiestas fueron un ejemplo perfecto de tradición y camaradería. Durante el recorrido peñero, CodoFrance ofreció a los vecinos degustaciones de comida en su casa. Además, organizaron cenas y comidas en su sede, donde se celebraron estos días de convivencia, música y arraigo. "Este año 15 miembros de la familia se cogieron vacaciones solo para poder venir y formar parte de la peña", subrayó Pallarés, quien ya anticipa un mayor número de integrantes el próximo año. "Hay una rama de la familia que no pudo venir esta vez, pero el año que viene seguro que vendrán más".

La peña CodoFrance ha llegado para quedarse, con el firme propósito de seguir reuniendo a amigos y familiares en las fiestas de La Codoñera, reforzando año tras año el lazo que una a ambos lados de los Pirineos. “Esto es algo que queremos mantener, para que no se pierdan las tradiciones de La Codoñera y sus fiestas”, dijo Pallarés. Y es que, para CodoFrance las raíces no se olvidan sino que se celebran generación tras generación, uniendo culturas y reviviendo el espíritu de comunidad que nunca desapareció después de tantos años.