La lectura del manifiesto por el 8M tuvo lugar en los jardines de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de Teruel
Unas 60 personas se concentran en el Campus en favor de la igualdad
La Universidad debe contribuir a crear ese escenario de transformación y cambio
En torno a 60 personas se concentraron este viernes a las 12:00 horas en los jardines de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de Teruel para la lectura del manifiesto que llevó a cabo María Ángeles Camacho, directora de la Escuela Universitaria de Enfermería. En él se incidió en el lema de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para 2024, que plantea financiar los derechos de las mujeres para acelerar la igualdad.
“Nos anima a invertir en políticas para avanzar en la igualdad de género como un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y una piedra angular para crear sociedades más inclusivas, que benefician a todo el mundo”, leyó Camacho.
El lema destaca la certeza de que las mujeres tienen mucho que ofrecer al desarrollo de la sociedad y que “esa apuesta mantiene, también, una dimensión económica, porque excluir o reducir su participación supone, al final, un empobrecimiento social y cultural, sí, pero también económico”, reza el comunicado.
En el documento se plantea que incrementar la participación de la mujer en toda clase de dinámicas sociales “no sólo es un imperativo ético, sino también un recurso económico: mucho pierde la sociedad que olvida el talento y el esfuerzo de la mitad de su población”.
La directora de la Escuela de Enfermería indicó que es importante la participación en las manifestaciones realizadas en torno al 8M porque “hay mucho por hacer” y aunque reconoció que “es verdad que se ha avanzado”, la “labor del día a día” y el ir aportando “granito a granito” es fundamental para llegar a los objetivos, aseguró. Camacho indicó que aunque su sector profesional es principalmente femenino también hay que seguir potenciando la igualdad.
“El 8 de marzo vuelve a ser una oportunidad señalada en el calendario para despertar las conciencias: la igualdad es un objetivo prioritario de cara a alcanzar una sociedad libre, una sociedad en la que ninguna persona disfrute de injustos privilegios ni se vea perjudicada por no menos injustas discriminaciones. La educación es fundamental desde las primeras etapas y son las familias, junto a los centros educativos, los que tienen que aunar esfuerzos en esa tarea”, declamó María Ángeles Camacho.
En esas coordenadas, “la responsabilidad de la universidad, como máxima instancia de educación superior, es fundamental. La universidad debe coronar los esfuerzos de todo el sistema educativo, a través de una visión multidisciplinar en la que realicen sus aportaciones todas las áreas de conocimiento, todas las especialidades. Con ese objetivo, la universidad buscará posibilidades y facilitará el compromiso de los poderes públicos de financiar adecuadamente ese nuevo escenario de transformación y cambio”, aseguran desde el ámbito universitario.
“Nos anima a invertir en políticas para avanzar en la igualdad de género como un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y una piedra angular para crear sociedades más inclusivas, que benefician a todo el mundo”, leyó Camacho.
El lema destaca la certeza de que las mujeres tienen mucho que ofrecer al desarrollo de la sociedad y que “esa apuesta mantiene, también, una dimensión económica, porque excluir o reducir su participación supone, al final, un empobrecimiento social y cultural, sí, pero también económico”, reza el comunicado.
En el documento se plantea que incrementar la participación de la mujer en toda clase de dinámicas sociales “no sólo es un imperativo ético, sino también un recurso económico: mucho pierde la sociedad que olvida el talento y el esfuerzo de la mitad de su población”.
Mucho por hacer
La directora de la Escuela de Enfermería indicó que es importante la participación en las manifestaciones realizadas en torno al 8M porque “hay mucho por hacer” y aunque reconoció que “es verdad que se ha avanzado”, la “labor del día a día” y el ir aportando “granito a granito” es fundamental para llegar a los objetivos, aseguró. Camacho indicó que aunque su sector profesional es principalmente femenino también hay que seguir potenciando la igualdad.
“El 8 de marzo vuelve a ser una oportunidad señalada en el calendario para despertar las conciencias: la igualdad es un objetivo prioritario de cara a alcanzar una sociedad libre, una sociedad en la que ninguna persona disfrute de injustos privilegios ni se vea perjudicada por no menos injustas discriminaciones. La educación es fundamental desde las primeras etapas y son las familias, junto a los centros educativos, los que tienen que aunar esfuerzos en esa tarea”, declamó María Ángeles Camacho.
En esas coordenadas, “la responsabilidad de la universidad, como máxima instancia de educación superior, es fundamental. La universidad debe coronar los esfuerzos de todo el sistema educativo, a través de una visión multidisciplinar en la que realicen sus aportaciones todas las áreas de conocimiento, todas las especialidades. Con ese objetivo, la universidad buscará posibilidades y facilitará el compromiso de los poderes públicos de financiar adecuadamente ese nuevo escenario de transformación y cambio”, aseguran desde el ámbito universitario.
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