Teruel recupera al cien por cien La Partida de Diego: la declaración y el llamamiento a la Cruzada, primeros actos de la representación

Todo está listo para que la noche de este viernes comience una nueva edición de La Partida de Diego, la recreación histórica que cuenta los hechos que pudieron acontecer en 1212, en una villa de frontera como es la de Teruel entre los jóvenes que son llamados a acudir a la Cruzada, entre ellos el joven de los Marcilla.

La vida ya está engalanada para la ocasión. La primera de las escenas teatrales se representará esta noche en la plaza del Torico con la declaración de amor entre Isabel y Diego, interpretados en esta edición por Sandra Grijalba y Elías Hernández. Será momentos antes del llamamiento a la Cruzada con la lectura de los edictos del papa Inocencio III y Pedro II, rey de Aragón.

Estas representaciones pondrán los antecedentes de las distintas escenas que se deducirán el fin de semana. En total serán 14 de cerca de 30 actos y finalizarán el domingo al mediodía con La mujer que espera, una escena coral con 35 mujeres que este año traducirá algunos fragmentos a la lengua de signos.

La Fundación Bodas de Isabel ha organizado un programa extenso, como los anteriores a la pandemia, e introduciendo también contenidos culturales como los conciertos, además de la instalación del mercado medieval con una veintena de puestos.

El voluntariado cultural de la Fundación hará posible recrear una villa de frontera, donde las representaciones sobre la leyenda de los Amantes se entrelazan con las relacionadas con la situación histórica del momento: un llamamiento a la Cruzada, la primera fuera de Tierra Santa, que necesita de hombres dispuestos a ir a la guerra.

Por eso, la directora gerente de la Fundación Bodas de Isabel, Raquel Esteban, anima a turolenses y visitantes a participar en la recreación histórica vistiéndose con sus trajes medievales y a acudir a los alistamientos y reconocimientos médicos que se harán mañana y el domingo en la plaza del Seminario, convertida en la plaza Mayor de una villa medieval. “Allí también podrán hacer testamento porque está documentado que así lo hicieron los que marcharon a Las Navas”, comentó. Y es que la documentación histórica respalda los actos que se recrean durante estos días.

Grupos recreacionistas como los templarios de Burriana, Vall d’Uxo o Alcora retoman su presencia en Teruel y será en la plaza de la Monjas donde se instale el campamento almogávar con grupos turolenses e invitados de otros puntos de España.

“El marco histórico que reflejamos está documentado y fue jugoso e interesante en una villa como Teruel que era tierra de frontera”, comentó. Aquí pudo el rey Pedro II reclutar tropas para acudir a Toledo -como el resto de reinos cristianos- para partir juntos hacia Las Navas de Tolosa.  Se sabe que el primero de los hijos varones de los Marcilla estuvo en Las Navas y luego regresó a Teruel, con el segundo -que pudo ser Diego- no se sabe qué pasó y el tercero fue nombrado obispo.

La llegada del rey Pedro II de Aragón a la villa de Teruel, que se representará mañana por la tarde enlazará problemas de hace ocho siglos con los actuales. Si entonces los caminos estaban mal para llegar a la villa -y de ello se quejará el monarca- ahora son la falta de autovías y conexiones ferroviarias lo que produce las quejas ciudadanas.

Pero no hay que olvidar la representación teatral centrada en los amores de Isabel y Diego, pero también de sus amigos. Clara y Alonso de Fuenmayor, muy unidos a la pareja protagonista, se darán el beso que no se dan en vida los Amantes ni en La Partida ni en el desenlace de la leyenda, que se representará en febrero.

Con todos estos mimbres se plantea este fin de semana lo que ocurrirá en cinco meses, en la recreación histórica de Las Bodas de Isabel, cuando se represente lo que pasó cinco años después, un vez finalizado el plazo el que el padre de Isabel dio a Diego para que hiciera fortuna marchándose a las Cruzadas.

La plaza de Las Monjas acoge el campamento ultramontano

Con un llamamiento desde la torre mudéjar de El Salvador comenzarán los grupos recreacionistas almogávares su participación hoy en La Partida de Diego. Durante todo el fin de semana darán ambientación a una villa que se prepara para la batalla.

Exposiciones de mobiliario y armas de la época completarán la instalación de un campamento ultramontano en la plaza de las Monjas.

La compañía almogávar Teruel Frontera colabora así activamente con la Fundación Bodas de Isabel. Participará igualmente en la exhibición de esgrima medieval  en la plaza del Seminario, donde se llevarán a cabo los alistamientos. Se mostrarán cómo se hacían los entrenamientos a las tropas y no faltarán algunas paleas entre los almogávares, como explicó Paco Oliver.

La parte bélica se completará con la musical, como se amenizaban los campamentos en le medievo. Habrá pequeños conciertos para ambientar el tiempo de descanso entre luchas y entrenamientos.

Los almogávares turolenses no estarán solos y habrá compañías recreacionistas procedentes de Calatayud, Zaragoza, Valencia y Albacete, unas 40 personas que vienen hasta Teruel para sumarse a la recreación histórica.

Entre otros actos programados, Oliver destacó La hora bruja, mañana por la noche a las 23 horas, una ceremonia con la participación de las hechiceras de la formación almogávar.

“Hay muchas ganas de participar en La Partida”

La directora de la Fundación  Bodas de Isabel, Raquel Esteban, anima al público participar en esta edición de La Partida de Diego, que es la de la vuelta a la presencialidad total después de dos ediciones en las que no se pudieron hacer todos los actos en la calle. Para ello les invita a vestirse a la usanza medieval y a acudir a la plaza del Seminario donde se llevan a cabo los alistamientos para marchar con las tropas. Se completará así la alta participación de voluntariado que está habiendo como actores, actrices o figurantes, que ya se vio reflejado en los talleres y los casting que hubo en el mes de junio con 14 chicos y chicas que querían ser los protagonistas, una cifra que no se había dado otros años.