Podemos confía en que el Gobierno PP-Vox, marcado por Génova, dure poco

El único diputado de Podemos en la recién estrenada legislatura en Aragón, Andoni Corrales, confía en que "dure poco" el nuevo Gobierno autonómico del popular Jorge Azcón con Vox, que augura que estará marcado por las directrices de Génova y, por tanto, supondrá el "fin" de la autonomía de esta Comunidad.

En una intervención de poco más de diez minutos de los treinta disponibles en la segunda sesión de la investidura de Azcón como presidente de Aragón, gracias al pacto de gobernabilidad firmado con Vox, con el que "no esconden la intención de retroceder en derechos y libertades", como el anuncio para derogar la Ley de la memoria democrática, que supone "negar el derecho a la justicia y a la reparación" y "cerrar el proceso de reconciliación en este país al que todavía le duele el fascismo del régimen franquista" y que atribuye a que no se han leído la ley.

El diputado de la formación morada también le ha reprochado la intención de recortes en la Ley Trans, el "retroceso" en la política lingüística, el avance de la "incultura" o que no "van a permitir que Aragón se prepare para los mayores retos del futuro", porque el "negacionismo climático de Vox se impone, de espaldas a la ciencia".

En este sentido, le ha acusado de no haber entendido el mensaje de las urnas del "no a la ultraderecha en las instituciones" y, en cambio, "ceder" ante Vox para "ocultar que sigue sin un proyecto de país ni de futuro" y "sin propuestas" para mejorar esta región.

"Después de una legislatura de avance, su pacto de investidura anuncia una legislatura de retroceso. Un Aragón al servicio del PP de Madrid" en el que, ha insistido Corrales, quieren "eliminar derechos conseguidos sobre la igualdad de oportunidades, destrozando leyes y aplicando censuras ideológicas", decidir a quién se debe amar, "qué queremos ser como individuos" o "esconder a quienes se salen de la norma de lo que ellos consideran correcto".

Corrales también ha criticado el acuerdo del PAR para votar a favor de la investidura "por rascar unos puestecicos" y dirigiéndose al portavoz de Aragón Existe, Tomás Guitarte, por sus reuniones con el PP, ha citado el dicho alemán de "si en una mesa hay un nazi y 10 personas que le respetan, en esa mesa hay 11 nazis".

Un final que lo le ha gustado a Azcón por "haber llamado nazi a Guitarte". "En esta cámara no hay nazis", le ha espetado el candidato a Gobernar Aragón, para quien estos calificativos explican "el porqué" de los resultados electorales de Podemos, que ha pasado de cinco diputados a uno.

"Entraron en el gobierno para sobrevivir políticamente, la realidad es que han tenido un rechazo sin precedentes y el que no ha entendido el mensaje de las urnas ha sido usted, que va a estar muy solo en esta cámara durante mucho tiempo", ha aseverado.

Azcón también considera que los argumentos de Podemos de que dejan un Aragón "idílico" sobre el que se ciernen "grandes peligros", "no son creíbles", porque "si fuera tan bonito como lo que plantean, el resultado de las elecciones "hubiera sido otro".

El candidato a presidir Aragón ha acusado a Podemos, que en la última legislatura gestionó la Consejería de Universidad y Ciencia, de haber "faltado" al compromiso en la financiación de la institución académica, que es "de las más caras" de España; de haber recortado las becas de máster un 4 %, de haber "maltratado" a la Universidad San Jorge, "permanentemente excluida de cualquier política de la Comunidad autónoma", de retrasos en la ayuda a la investigación y del "fracaso" en mejorar la conectividad. "Una cosa es lo que decían y otra lo que hacían", ha sentenciado.

Y frente a las acusaciones de sectarismo por parte de Corrales, Azcón le ha avanzado que una de las directoras generales nombradas por Podemos, "tiene muchas posibilidades" de incorporase a su equipo y quizá "no será la única".

Un debate en el que ha vuelto a salir la polémica ley del "solo sí es sí" y frente a la defensa "incondicional" de Corrales a la ministra de Igualdad, Irene Montero, "la mejor que ha tenido este país", ha dicho, Azcón, además de acusarle de "populismo", le ha recordado que esta ley ha supuesto "el mayor ataque en la historia de la democracia" y que "no va a haber ni un solo país civilizado" que la copie.

IU

Por su parte, el diputado de IU, Álvaro Sanz, ha tildado de "esperpento" el pacto "ultra, retrógrado y neoliberal" al que el PP ha llegado con Vox para la gobernabilidad de Aragón bajo la presidencia del popular Jorge Azcón, a quien ha pedido concreción en su anuncio de rebajas fiscales, que ha augurado que se traducirá en recortes, y con las que ha acusado de utilizar a la clase trabajadora para "bajar los impuestos a los ricos".

Sanz, quien nunca dudó de que el PP llegaría a acuerdos con la extrema derecha para gobernar, ha criticado las formas para llegar a un pacto "retrógrado en derechos y libertades" y "profundamente liberal en lo económico" por haber tardado dos meses, del que Azcón "se ha escondido" y en el que ha habido "injerencias intolerables" de las direcciones nacionales de ambos partidos.

 

"No ha explicado el acuerdo", ha espetado Sanz a Azcón, a quien le ha dicho que sus socios "se están negando entre ellos", en alusión a los desacuerdos de Vox, con el que ha llegado al acuerdo de gobernabilidad y que rechaza las autonomías, y el PAR, con quien acordó la investidura y es firme defensor del Estatuto de Autonomía.

Un pacto que ha querido confrontar en su intervención en la sesión de investidura de las Cortes, en la que ha resaltado los "retos" de IU, entre los que ha citado el refuerzo de la sanidad pública "sin conciertos ni externalizaciones", la emergencia climática, la corresponsabilidad de los cuidados, el empleo y los derechos de las personas trabajadoras, donde ha recordado el fallecimiento en lo que va de año de 19 trabajadores en accidentes laborales, o la lucha contra las violencias machistas "en todas sus dimensiones".

Y frente a ello ha lamentado que Azcón haya defendido en su discurso las bajadas de impuestos a quienes más tienen, la privatización de la sanidad, la concertación y privatización de la enseñanza, el pin parental, el maltrato institucional, que quiera acabar con las leyes que la extrema derecha considere "ineficaces" o intervenir ideológicamente los contenidos de la televisión pública, el borrado de las políticas lingüísticas o que el franquismo sociológico siga latente con la intención de derogar la ley de Memoria Democrática.

Sanz ha lamentado así el "tradicionalismo, conservadurismo y nacionalcatolicismo que hay detrás del pacto", que también "pone en riesgo" medidas de carácter económico como el modelo social agrario, las políticas de empleo o cómo garantizar la solvencia financiera.

En su réplica, Azcón ha lamentado que Sanz no esté de acuerdo con la colaboración pública privada en sanidad cuando "votaba los presupuestos del PSOE" en la anterior legislatura, en la que el último año se han incrementado de 80 y 101 millones de euros el presupuesto para la inversión privada, y cuando está "dispuesto a votar lo que haga falta" a los socialistas.