Pacma denuncia la "extrema crueldad" hacia las vaquillas ensogadas en las fiestas de Teruel

Con un vídeo "desgarrador" subido a sus redes sociales, el Partido Animalista Con el Medio Ambiente (Pacma) expresa su firme condena hacia el festejo taurino de La Vaquilla del Ángel, celebrado el pasado 8 de julio en Teruel como parte de las Fiestas del Ángel. Las imágenes difundidas muestran lo que el partido califica como "un acto de crueldad imperdonable hacia vaquillas de muy corta edad", en el que participan mayoritariamente niños para tentarlas y tirarles de los cuernos tras ser ensogadas.

Según explica Pacma en una nota de prensa, "en las imágenes se aprecia cómo los animales salen desorientados, asustados, muy estresados y caen constantemente al suelo enredándose con la cuerda y resbalándose con el pavimento, entre la muchedumbre y los gritos. En un momento, se ve claramente cómo una de las vaquillas incluso embiste a un niño de unos cinco años en manos de un adulto".

En este  festejo, las vaquillas son ensogadas, "con las consecuencias de dolor que eso tiene para sus cornamentas aún en formación, mareadas y sometidas en un ambiente ruidoso y frenético", apuntan desde Pacma. "Lo más alarmante es la participación de niños en estas actividades", lo cual, exponen, "no solo perpetúa la crueldad, sino que también fomenta una cultura de insensibilidad y maltrato hacia los animales desde una edad temprana". 

Por ello, Pacma exige al Ayuntamiento de Teruel que ponga fin a este "sadismo" y prohíba de manera inmediata este festejo. "No es admisible que, en pleno siglo XXI, se sigan permitiendo espectáculos que causan un sufrimiento innecesario y atroz a los animales. La sociedad debe avanzar hacia el respeto, y es responsabilidad de las autoridades locales asegurar que las tradiciones se adapten a los valores éticos que la mayoría de la ciudadanía defiende hoy en día", indica Javier Luna, presidente nacional del partido.

"Es evidente que la mayoría de la población no apoya este tipo de festejos y desea un cambio hacia celebraciones libres de sufrimiento animal", añade.

Pacma también hace un llamamiento a los padres y educadores para que no permitan que los niños participen en estas actividades, ya que "contribuyen a normalizar la violencia hacia los animales": "Es fundamental educar a las nuevas generaciones en el respeto y la protección de todos los seres vivos", concluye Luna.