La rosca es el dulce tradicional para la celebración del Sermón de las Tortillas
Los turolenses disfrutarán este martes del Sermón de las Tortillas con buen tiempo
La venta de roscas se duplica con respecto al año pasado
El Sermón de las Tortillas se celebra este martes en la ciudad de Teruel con una previsión de tiempo primaveral que animará a los turolenses a salir al campo. La ganas de reunirse se han dejado sentir en los comercios y las panaderías han duplicado la venta de las tradicionales roscas respecto al año pasado y han vuelto a las cifras previas a la pandemia de coronavirus.
La Fuente Cerrada es uno de los parajes más frecuentados para disfrutar de esta jornada campestre. El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Teruel, José Luis Torán, destacó que los grupos de jóvenes eligen esta zona de recreo por la cercanía a la ciudad y se espera que “esté a tope” de gente por las buenas previsiones del tiempo.
Por ello, Torán explicó que hay prevista una operación especial de limpieza para que el merendero quede en perfectas condiciones tras la celebración.
Por otro lado, el concejal de Parques y Jardines explicó que hay prevista una actuación en la Fuente Cerrada para mejorar la accesibilidad, pero que se ha decidido esperar a llevarla a cabo después de este Martes de Pascua. Se trata de unas rampas de acceso a la zona infantil por detrás de los fogones para facilitar su paso a personas que vayan en silla de ruedas o que tengan movilidad reducida.
El buen tiempo parece que este año va a acompañar en esta fiesta local. La Agencia Estatal de Meteorología prevé para toda la jornada cielos despejados. La oscilación térmica será muy grande con una mínima de 3 grados y se podrían alcanzar los 28 grados. Por ello, habrá que llevar chaqueta a primera hora de la mañana y a partir de las 18.00 horas, cuando los termómetros bajarán a los 13 grados.
En ninguna mesa faltará en este día la tradicional rosca. El presidente de la Asociación Provincial de Panaderos de Teruel, Jorge Sanz, indicó que las ventas de este popular dulce (un pan dormido con huevo cocido) se han duplicado con respecto al año pasado y se ha vuelto a cifras previas a la crisis sanitaria por la covid-19. En muchas pastelerías este lunes, al final de la mañana, ya habían agotado existencias.
“La tradición de la rosca no se perdió a pesar de la pandemia, pero en los años anteriores estuvimos a medio gas porque la gente se la comía en casa y pedían formatos más pequeños. Ahora hemos recuperado el formato grande y es una muestra de que la gente tiene muchas ganas de volver a reunirse”, detalló Sanz.
El representante de los panaderos turolenses también hacía un balance positivo de la actividad durante la Semana Santa. “Cuando vemos mucha gente en la calle eso también lleva a que aumenten las ventas”, comentó Jorge Sanz.
Después de una divertida mañana con comida campestre, el entretenimiento continuará por la tarde en la plaza de toros, que se convierte en un punto de encuentro para los aficionados.
El festejo tradicional de suelta de vaquillas enfundadas, que cumple ya 24 ediciones, comenzará a las 18.00 horas y se prolongará hasta las 21.00 horas.
En esta ocasión se contará con reses de las ganaderías turolenses de Los Chatos y El Val, ambas de La Puebla de Valverde.
La entradas costarán 10 euros y se podrán comprar en la taquilla de la plaza de toros a partir de las 17.00 horas. No habrá venta anticipada. Los menores de 6 años podrán entrar gratis y deberán estar acompañados por un adulto.
El gerente de Toroter, empresa que gestiona la plaza de toros de la capital turolense, David Gracia, destacó durante la presentación de esta cita taurina el buen ambiente que se vive en este día, tanto en el ruedo como en las gradas.
La organización del festejo confió en superar las cifras de público del año pasado cuando, a pesar del día lluvioso, se vendieron 1.500 entradas.
A lo largo de la tarde habrá vacas, novillas y becerros todos ellos enfundados para prevenir incidentes. Cada ganadería llevará siete u ocho animales y se sacarán al ruedo en función de cómo se vaya desarrollando el festejo y del juego que den las reses.
La Fuente Cerrada es uno de los parajes más frecuentados para disfrutar de esta jornada campestre. El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Teruel, José Luis Torán, destacó que los grupos de jóvenes eligen esta zona de recreo por la cercanía a la ciudad y se espera que “esté a tope” de gente por las buenas previsiones del tiempo.
Por ello, Torán explicó que hay prevista una operación especial de limpieza para que el merendero quede en perfectas condiciones tras la celebración.
Por otro lado, el concejal de Parques y Jardines explicó que hay prevista una actuación en la Fuente Cerrada para mejorar la accesibilidad, pero que se ha decidido esperar a llevarla a cabo después de este Martes de Pascua. Se trata de unas rampas de acceso a la zona infantil por detrás de los fogones para facilitar su paso a personas que vayan en silla de ruedas o que tengan movilidad reducida.
El buen tiempo parece que este año va a acompañar en esta fiesta local. La Agencia Estatal de Meteorología prevé para toda la jornada cielos despejados. La oscilación térmica será muy grande con una mínima de 3 grados y se podrían alcanzar los 28 grados. Por ello, habrá que llevar chaqueta a primera hora de la mañana y a partir de las 18.00 horas, cuando los termómetros bajarán a los 13 grados.
En ninguna mesa faltará en este día la tradicional rosca. El presidente de la Asociación Provincial de Panaderos de Teruel, Jorge Sanz, indicó que las ventas de este popular dulce (un pan dormido con huevo cocido) se han duplicado con respecto al año pasado y se ha vuelto a cifras previas a la crisis sanitaria por la covid-19. En muchas pastelerías este lunes, al final de la mañana, ya habían agotado existencias.
“La tradición de la rosca no se perdió a pesar de la pandemia, pero en los años anteriores estuvimos a medio gas porque la gente se la comía en casa y pedían formatos más pequeños. Ahora hemos recuperado el formato grande y es una muestra de que la gente tiene muchas ganas de volver a reunirse”, detalló Sanz.
El representante de los panaderos turolenses también hacía un balance positivo de la actividad durante la Semana Santa. “Cuando vemos mucha gente en la calle eso también lleva a que aumenten las ventas”, comentó Jorge Sanz.
Vaquillas en la plaza de toros
Después de una divertida mañana con comida campestre, el entretenimiento continuará por la tarde en la plaza de toros, que se convierte en un punto de encuentro para los aficionados.
El festejo tradicional de suelta de vaquillas enfundadas, que cumple ya 24 ediciones, comenzará a las 18.00 horas y se prolongará hasta las 21.00 horas.
En esta ocasión se contará con reses de las ganaderías turolenses de Los Chatos y El Val, ambas de La Puebla de Valverde.
La entradas costarán 10 euros y se podrán comprar en la taquilla de la plaza de toros a partir de las 17.00 horas. No habrá venta anticipada. Los menores de 6 años podrán entrar gratis y deberán estar acompañados por un adulto.
El gerente de Toroter, empresa que gestiona la plaza de toros de la capital turolense, David Gracia, destacó durante la presentación de esta cita taurina el buen ambiente que se vive en este día, tanto en el ruedo como en las gradas.
La organización del festejo confió en superar las cifras de público del año pasado cuando, a pesar del día lluvioso, se vendieron 1.500 entradas.
A lo largo de la tarde habrá vacas, novillas y becerros todos ellos enfundados para prevenir incidentes. Cada ganadería llevará siete u ocho animales y se sacarán al ruedo en función de cómo se vaya desarrollando el festejo y del juego que den las reses.
