La ilusión prende en los turolenses con las hogueras de San Antón tras dos años sin chispa con restricciones

Teruel se iluminó este sábado con la luz de la multitud de hogueras de San Antón, patrón de los animales, que volvieron a encenderse sin restricciones después de que la pandemia impidiera hacerlo en 2021 y redujera a la mitad las que ardieron en 2022. Tan solo la asociación de vecinos de San Julián quemó 12 toneladas de madera en el retorno de sus fiestas al espacio entre viaductos.

El Ayuntamiento de Teruel ha recibido este año 220 solicitudes para el encendido de hogueras el viernes y el sábado, tan solo 15 menos que en 2020 y prácticamente el doble que el año pasado, cuando la festividad coincidió con un repunte de los contagios de coronavirus.

En los lugares autorizados pudieron verse en torno al fuego a grupos, tanto de familiares como de amigos, aunque las hogueras más concurridas fueron los organizados por las asociaciones vecinales y algunas peñas.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, que este sábado visitó las hogueras de San Julián, el Arrabal, San León y la Casa de Andalucía junto a un buen número de miembros de la corporación municipal, se congratuló de la recuperación de la celebración de San Antón como una de las tradiciones más arraigadas de la ciudad.

“Es un fiesta muy tradicional y muy querida por los turolenses que, por mucho que cambien los tiempos y evolucione la sociedad, se disfruta en los barrios urbanos y rurales, pero también con la familia o con los amigos, y en la que participan personas de todas las edades.

Ante el elevado número de hogueras autorizadas, Buj recordó que desde hace unos años se publica un bando en el que se establece las medidas de seguridad que deben tomar quienes hacen hogueras “porque entendemos que hay que celebrar la fiesta pero de forma ordenada”. Encenderlas en zonas no pavimentas, apagarlas antes de las tres de la madrugada y dejar limpio el espacio son algunas de los requisitos que deben de cumplir.

La asociación de vecinos de San Julián retomó la celebración completa de la festividad de San Antón, patrón del barrio, después de que el año pasado se limitara a encender una hoguera en la que simbólicamente quemó al covid.

Así, volvieron a salir al espacio ubicado entre los viaductos, justo detrás del conservatorio y el centro sociocultural de San Julián, sus cuatro cabezudos -la tía Antona, el tío Julián, Gorrinín y Pepón- acompañados de la música de Esfuria Tronadas como antesala del encendido de la hoguera en la que se quemaron 12 toneladas de leña, que tardó en arder sin quienes la rodeaban se pusieran de acuerdo sobre el motivo.

Tradición

El grupo Hermanos Sánchez Andrés (HSA) donó, como viene haciendo desde hace casi 50 años, 120 kilos de embutidos y panceta, con los que se repartieron 900 raciones entre todos los asistentes. “Mi abuelo tenía la carnicería enfrente de la ermita y además era mayordomo de San Antón, y la familia ha seguido la tradición”, explicó Daniel Sánchez.

“Esta tarde encendemos la leña pero también la ilusión por todas las actividades que vamos a celebrar este año”, señalaron desde la asociación vecinal. Este domingo al mediodía continuarán las celebraciones con la bendición de animales en la ermita de San Antón y el posterior nombramiento del socio de honor.

Sonia, que ahora vive en el Arrabal pero antes lo hizo durante 20 años en San Julián, fue una de los muchos turolenses que se congregaron en torno a la monumental hoguera. “Siempre bajo porque está muy chulo y me recuerda a cuando hacía la hoguera con mis amigos”, cuenta rodeada de un grupo de amigos “Además, ahora me gusta enseñársela a mis hijos”, añade.

Entre tanto, un numeroso grupo de voluntarios se dio cita en el barrio del Arrabal a primera hora de la mañana para recoger la leña con la que después prendieron la hoguera. Para asar los 80 kilos de chorizo, longaniza, morcilla, panceta y salchichas utilizaron leña de carrasca comprada específicamente “para que todo esté más gustosico”, explicó la presidenta de la asociación de vecinos del Arrabal, Estibaliz Tolosa. En la cena tomaron parte 133 personas.

Tolosa aprovechó la ocasión para recordar que el próximo sábado 11 de febrero se celebrará otro de los actos más populares del barrio, el tradicional matacerdo. Esa jornada también se celebrará la asamblea general de la asociación de vecinos. De los 12 miembros de la junta directiva tan solo participan 5, por lo que si no se suman nuevas personas, se disolverá y solo continuará en el cargo la presidenta por el compromiso adquirido como vicepresidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos San Fernando de Teruel.

Un grupo de jóvenes encendió por primera vez su hoguera frente al aparcamiento de Renfe y, ante las dificultades para hacerse con leña y parrillas y el desconocimiento de cómo hacer las brasas, se llevaron también de casa tortillas y lomo empanado.

Además de las numerosas hogueras que ardieron por las diferentes explanadas de la ciudad, muchas personas optaron por reunirse con la familia o con los amigos en terrenos particulares.

Este fin de semana, y también el próximo, también se celebrará San Antón en un gran número de pueblos de la provincia, mientras que en otros se honrará a San Fabián y San Sebastián, cuya festividad es el próximo viernes 20 de enero.

En localidades como La Hoz de la Vieja, los vecinos se reunieron este sábado para recoger leña seca y transportarla para hacer posible la hoguera.