El movimiento ciudadano Teruel Existe celebra su 25 aniversario con la llama de la reivindicación prendida

“Teruel gritó en silencio: ya no hay excusas”. Con ese titular describió la portada de DIARIO DE TERUEL la primera movilización de la coordinadora ciudadana Teruel Existe del día 1 de diciembre de 1999, que fue un paro de cinco minutos silenciosos, y este domingo, 25 años después, un centenar de personas recordaron en la plaza del Torico el momento. Juntos volvieron a escuchar el manifiesto que se leyó entonces y que, como constatan los históricos de la coordinadora ciudadana, “sigue vigente” porque “la mayor parte de las reivindicaciones”, entre las que había cuestiones ferroviarias, de comunicaciones viarias y referentes a la salud, “no se han logrado”. Por eso, el sentir general de los asistentes es que el movimiento ciudadano está de plena vigencia y abierto a nuevas acciones futuras.

Sí destacan ahora, un cuarto de siglo después, que la aparición de Teruel Existe y las protestas respaldadas por miles de turolenses -el cálculo que se hizo ese 1 de diciembre es que el paro lo secundaron en torno a 20.000 personas, según los organizadores- sí han servido de mucho puesto que Teruel comenzó a existir para muchas otras regiones de España y para algunas administraciones públicas a partir de ese momento.

En estos años de andadura todos los turolenses de diferente ideología y de cualquier punto del territorio provincial se han sentido identificados en algún momento con el movimiento ciudadano. Como recuerdan los paneles realizados para conmemorar el 25 aniversario, en este cuarto de siglo ha habido manifestaciones históricas y con respaldo masivo que, sin embargo, no han logrado solucionar algunas de las carencias endémicas de la provincia.

Como apuntaba este domingo Paco Juárez, uno de los históricos de Teruel Existe, el movimiento surgió por la sensación de abandono que había entre los ciudadanos. “Estábamos sufriendo una despoblación galopante, faltaban inversiones y servicios, se iba nuestra gente joven y necesitábamos gritar”, describe, para añadir que la plataforma fue la que canalizó ese “grito de socorro” cuyo eco se ha intentado mantener durante 25 años. Juárez recuerda que Teruel fue la única provincia española que paró por causas ajenas a lo laboral, “por motivos de abandono”, especifica. El problema, a juicio del integrante de la coordinadora es que “hoy podríamos repetir el mismo manifiesto” -de hecho este domingo lo repitieron-. Concreta que todavía colean muchos temas, aunque avances ha habido y durante los primeros diez años fueron “muy significativos” porque la importancia de las movilizaciones sociales se transformó en un esfuerzo inversor del Estado.

Respuesta de gran magnitud

Esa primera acción del movimiento obtuvo una respuesta “de tal magnitud que nos puso la piel de gallina a los que la vivimos”, detalla Amado Goded, otro de los impulsores de la coordinadora, y, continúa, “todo el mundo fue consciente, a partir de ese momento, de que algo se movía en la provincia”. Para Goded, el movimiento ciudadano, más allá de los logros que haya podido alcanzar en estos años, le ha aportado “muchísima autoestima” a los turolenses y también “un ADN reivindicativo” que, en su opinión, debe pervivir.

En cuanto al músculo que ahora tiene, Juárez destaca que el movimiento siempre ha tenido picos, pero a corto plazo la reivindicación será clave en temas como la sanidad: “La modificación del mapa sanitario va a exigir de movilizaciones sociales porque nos tememos que las zonas rurales se van a quedar sin atención sanitaria como la tienen en estos momentos y se van a destinar los recursos a las grandes ciudades”, vaticina.
 

Por eso, los históricos consideran que la plataforma ciudadana aún tiene mucho camino por recorrer y “se harán movilizaciones cuando se consideren necesarias”, avanzaba este domingo Amado Goded.

El salto a la política

En lo que respecta al salto del movimiento a la política hace cinco años y bajo el mismo nombre, Juárez justifica que “había un techo que, como movimiento, no se podía romper”, y por eso decidieron intentar llegar a las Cortes Generales. Lo lograron entre 2019-2023, una legislatura marcada por la pandemia donde “no se logró presionar lo suficiente para que el partido en el poder cumpliera lo que se exigió en ese pacto de investidura”, puntualiza el histórico del movimiento.

En ese mismo sentido también inciden otros de los impulsores iniciales como Domingo Aula o Amado Goded, quien destaca que “en 20 años no nos hicieron caso y por eso decidimos meternos dentro”. Según Goded, tiene sentido mantener tanto el movimiento como el partido “siempre que la herramienta política funcione”.

Para Amado Goded uno de los hitos importantes de Teruel Existe fue la manifestación en Madrid en la que quedó claro que la idea de “abandono institucional” estaba latente en toda la España interior y el impulso reivindicativo se había contagiado, desde Teruel, a otros territorios.

Según uno de los fundadores de la plataforma, Teruel Existe “logró que la despoblación fuera una cuestión de Estado, lo que ocurre es que la atención política depende de que estés, porque si no estás se deja de hablar de ti para abordar otros problemas que tiene España”, dice haciendo referencia a la representación en el Congreso y en el Senado que el partido político Teruel Existe perdió en las últimas elecciones.
 

En cuanto al seguimiento del acto de este domingo -al que acudieron un centenar de personas entre impulsores del movimiento, representantes políticos bajo las siglas de Teruel Existe y particulares- para Goded la respuesta de los ciudadanos “era imprevisible”, aunque aclara que había convocados otros actos a la misma hora. Además, detalla que no se podía esperar la afluencia de hace 25 años, porque “entonces el contexto social era distinto”, dice.

En la presentación del acto, Paco Juárez indicó que con ese minuto de silencio se pretendía dar voz a todos aquellos que no se sienten escuchados y nombró a los damnificados en Valencia por la dana antes de dar paso a la lectura del manifiesto del año 1999. El acto se cerró con un aplauso.

La misma demanda que ya hizo Gascón hace más de un siglo

A lo largo de la mañana, junto al Torico desfilaron algunos de los personajes ilustres de Teruel y, a través de ellos, los asistentes se acercaron hasta la historia de la provincia y también a algunas de las reivindicaciones históricas, como la del tren, que ya reclamaba Domingo Gascón en su Miscelánea Turolense en el año 1891, cuando la provincia era la única de España a la que no había llegado en ese momento el ferrocarril, según recordó Domingo Aula, uno de los históricos de Teruel Existe y que fue el encargado de interpretar el personaje. “Tras 120 años”, dijo Gascón-Aula, “esta provincia por la que tanto hemos luchado se encuentra en un abandono total por parte de sus representantes e instituciones públicas”, detalló.

Padre de la pediatría

Otro de los ilustres fue Jerónimo Soriano, padre de la pediatría por sus investigaciones en torno a las enfermedades de los niños e impulsor el primer hospital infantil. Durante su intervención en el acto, se recordó que es precisamente el nombre de Jerónimo Soriano el que desde Teruel Existe se ha solicitado que se ponga al nuevo hospital de Teruel, algo que contribuiría a que este turolense, olvidado durante años, sea recordado para siempre, como planteó el propio personaje durante su intervención.

Soriano, como quedó patente este domingo, no fue el único turolense ilustre que pasó desapercibido durante décadas, otro de los ejemplos fue Francisco Loscos, nacido en Samper de Calanda y que jamás fue valorado en España, aunque sí en otros lugares de Europa.

“La implicación de hace 25 años nos hizo pensar que iban a cambiar las cosas”

Fina Soriano era funcionaria en el año 1999 y recuerda como si fuera hoy aquellas primeras movilizaciones, surgidas en el marco de “asambleas masivas a las que acudía mucha gente”, explicaba este domingo. Los cinco minutos de silencio en 1999 y el paro del año siguiente, en el 2000, fueron hitos “sobrecogedores, un impasse que nos hizo pensar que iban a cambiar las cosas”, asegura. Y ante la pregunta de si han cambiado en este cuarto de siglo se muestra rotunda: “Teruel Existe nos ha puesto en el mapa y el orgullo de ser de Teruel se ha reforzado, además la gente siente más ganas de luchar porque tenemos una gran tierra”, comenta.

Sin embargo, ella ha estado desde el principio apoyando al movimiento Teruel Existe y, precisa que, “aunque han cambiado algunas cosas por las que luchar, otras son las mismas”, dice, para detallar que “el transporte se ha resuelto, pero el hospital nos está costando sudor y lágrimas y ahora está el tema de las renovables, vamos a generar energía para toda España a costa de nuestro paisaje. Somos pocos y somos siempre los sacrificados”, dijo.
 

Otro de los turolenses que hace 25 años levantó la voz por la provincia fue Florencio Muñoz, que también estaba este domingo en el minuto de silencio para conmemorar el aniversario del movimiento ciudadano. Él era el presidente de la Cámara de Comercio en 1999 y, aunque reconoce que la posición de los empresarios era un poco crítica, sobre todo de cara al paro general del año 2000, entendieron que “había que hacerlo por la provincia”, expone, para añadir que dar el paso era necesario “para que se oyera a Teruel en toda España”.

El caldo de cultivo de ese final del siglo pasado era bueno y Muñoz define el momento como “una época interesante, reivindicativa y combativa”. Sin embargo, ahora, 25 años después, indica que “hay temas que siguen como estaban entonces, queda mucho trabajo por hacer por las promesas incumplidas”. Por eso, a su juicio, el movimiento “sí es necesario porque hace falta un elemento que dinamice y reivindique las carencias que tenemos”.

Otra de las asistentes a la concentración de este domingo fue Encarna Ferrer, concejala de Visiedo por Teruel Existe y que destaca el trabajo realizado para “poner en la agenda política el tema de la despoblación y la España vaciada”. La edil comenta que “ahora todos los partidos se llenan la boca hablando de despoblación”, pero la realidad, a su juicio, “es que la España de interior estaba y está abandonada”.

Por otro lado, el movimiento ciudadano ha cambiado el sentido del término rural, según Encarna Ferrer, y “ahora todos nos sentimos orgullosos de ser de Teruel, de ser de pueblo y de ser de esa España de interior”. En lo que se refiere al futuro de la plataforma ciudadana, la mujer les vaticina otros 25 años, al menos, de vida porque “son necesarios, hay muchas cosas que están igual”, indica.