El 28,6% de los delitos denunciados en Teruel son estafas informáticas

El 28,6% de los delitos denunciados en la provincia de Teruel durante el primer semestre del año fueron estafas informáticas, mientras que los ciberdelitos en su conjunto crecieron un 11,7% en relación al mismo periodo de 2023. Esta clase de criminalidad, de la que son víctimas los turolenses pero sus autores se pueden encontrar en cualquier parte del mundo, es la que más incidencia está teniendo porque constituye una tercera parte de las infracciones penales que se cometen si a las estafas se suman otros ciberdelitos.

Así lo recoge el Portal estadístico de criminalidad del Ministerio del Interior, cuyos últimos datos publicados corresponden al primer semestre del año. De las 1.929 infracciones penales registradas entre enero y junio en la provincia, 638 fueron cometidas a través de la red, lo que supone un 33,07%, una tercera parte del total.

En su mayor parte se trató de estafas informáticas. De los 638 ciberdelitos denunciados entre enero y junio, 551 fueron estafas, que crecieron el 6,8% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Las 87 infracciones restantes fueron otro tipo de ciberdelitos, que aumentaron un 58,2% con respecto al primer semestre de 2023.

Mientras la criminalidad en su conjunto creció un 7,3% en la provincia durante el primer semestre, los ciberdelitos lo hicieron un 11,7%. El incremento de la criminalidad convencional aumentó un 5,2%, lo que indica que los ciberdelitos crecieron 2,1 puntos porcentuales más.

El crecimiento de este tipo de criminalidad que se comete a través de medios informáticos fue mayor en la provincia, en términos porcentuales, que en el conjunto del país y que en Aragón.

En España crecieron un 9,2%, mientras que en la comunidad autónoma lo hicieron un 8,1%. En el país supusieron un 19,4% del total de la criminalidad y en Aragón el 23,6%. Que en la provincia este tipo de infracciones penales suponga un porcentaje mayor al constituir una tercera parte de la delincuencia total es consecuencia de que Teruel sea uno de los territorios más seguros, con lo cual las infracciones convencionales son menores. En el caso de la cibercriminalidad, las víctimas se encuentran en la provincia pero los delincuentes pueden estar en cualquier otra parte.

Son continuas las advertencias que se hacen para prevenir este tipo de delitos tanto por parte de la Fiscalía como de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, ya que la mejor forma de combatirlos es con la prevención. Al ocultarse los delincuentes en el ciberespacio es muy difícil dar con ellos, y los que están cayendo son las mulas, los intermediarios que ceden sus cuentas bancarias para que se hagan en ellas los ingresos del dinero estafado y evitar así llegar a los auténticos estafadores. En la Audiencia Provincial se han celebrado ya varios juicios contra estas mulas, a las que se juzga por un delito de blanqueo de capitales al ser quienes lavan el dinero estafado.

Criminalidad convencional

Dentro de la criminalidad convencional registrada en el primer semestre del año en la provincia, el mayor crecimiento entra las tipologías principales de infracciones se produjo en los delitos de tráfico de drogas, que creció un 81,8% al pasar de 11 a 20. Le siguió la sustracción de vehículos, que pasó de 6 a 10, un 66,7% más.

También crecieron los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, que pasaron de 91 a 94, un 3,3% más. Dentro de esta clase de delitos, los robos con fuerza cometidos en domicilios se mantuvieron estables en 64, los mismos que en el primer semestre de 2023.

Los delitos de lesiones y riña tumultuaria se mantuvieron también estables (29), mientras que descendieron un 26,3% los delitos contra la libertad sexual al pasar de 19 a 14. De ellos, las agresiones sexuales con penetración disminuyeron un 60%. Los robos con violencia e intimidación descendieron un 25%. Disminuyeron también los hurtos un 1,8%.