Condenan a un vecino de Cella a tres meses de prisión por resistirse a la Guardia Civil

Un vecino de Cella ha sido condenado a 3 meses de prisión por un delito de resistencia a la autoridad tras haber protagonizado un incidente en un bar de la localidad hace un año, que requirió la presencia de varios agentes de la Guardia Civil. El acusado, que reconoció los hechos y mostró su conformidad con los delitos que se imputaban y las penas solicitadas por la Fiscalía, ha sido condenado también por otros delitos de amenazas leves, lesiones y daños.

Los hechos fueron juzgados este mes en el Juzgado de lo Penal de Teruel, aunque el acusado alcanzó una conformidad, por lo que no tuvo que celebrarse la vista oral.

En la sentencia condenatoria se da por probado que el acusado, el 20 de marzo de 2021, espetó al gerente del bar de la Casa de Cultura de Cella, con motivo de disputas anteriores, que “lo iba a matar y que le iba a meter cocaína en el vehículo o en el bar para que lo mandaran a su país”.

A raíz del altercado se personaron cuatro agentes de la Guardia Civil, y al intentar identificar al acusado este se revolvió para impedirlo. Increpó a un agente y se enzarzó con él, causándole una lesión en la muñeca, por lo que fue detenido. Al llegar el vehículo para llevárselo, el acusado golpeó y causó daños en la puerta del mismo. Además, al ser conducido a los calabozos, propinó una patada y rompió el cristal de la puerta de acceso a la Comandancia de la Guardia Civil.

Peticiones iniciales

Inicialmente tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado pedían un año de prisión por el delito de resistencia, en el primer caso, y por un delito de atentado en el segundo, aunque tras alcanzarse la conformidad entre las partes las dos acusaciones redujeron la pena a 3 meses de prisión por el primero de los delitos.

La sentencia condenatoria del Juzgado de lo Penal impone además al acusado varias multas por el resto de los delitos que cometió. Por el delito de amenazas una multa de 240 euros, por el de lesiones otros 240 euros, y la misma cantidad por el delito de daños.

Además, la sentencia le obliga a indemnizar con 83,74 euros a la Dirección General de la Guardia Civil por los daños causados, y con 150 euros al agente al que lesionó. El acusado consignó en la Cuenta de Depósitos y Consignaciones del Juzgado el dinero que se le reclamaba en concepto de responsabilidad civil antes de que se celebrase el juicio.

Además, por las amenazas se le imponen también seis meses de prohibición de acercamiento a la persona a la que amenazó, si bien la juez da por cumplida esta pena por las medidas cautelares que se acordaron tras su detención y puesta a disposición judicial en marzo del año pasado.

La defensa pidió la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad, a lo que no se opusieron ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado.