Cáritas renueva y moderniza el estilo y la imagen de su tienda Koopera Store

Cáritas Diocesana de Teruel y Albarracín presentó ayer las reformas de las instalaciones de su tienda Koopera Store, con el objetivo de alcanzar una mayor integración de las personas en riesgo o en situación de exclusión social y que necesitan una segunda oportunidad. 
“La remodelación de la tienda Koopera Store ha sido para cambiar el estilo y modernizarla, pero el género viene de la ropa de los contenedores, que luego va a una planta de reciclaje en Bilbao o en Ribarroja”, explicó Teresa Villarroya, responsable de la Empresa de Inserción Adarve, perteneciente a Cáritas.
Estas prendas antes de pasar a tienda pasan un procedimiento de higienización, adecuación y etiquetado y en la planta de reciclaje se “clasifica como de segunda mano y vuelve a las tiendas”, añadió Teresa Villarroya. Al ser empresa social, los beneficios obtenidos con la venta de estos productos se vuelven a reinvertir. Como empresa de reinserción, Adarve, tiene dos líneas de negocio: una empresa de Limpiezas y una Lavandería Industrial, en las que trabajan personas con necesidades de reinserción social.
 
Todo este tipo de estructura es posible mantenerlo porque “la gente está cada vez más concienciada en comprar ropa de segunda mano y darle una segunda oportunidad a la ropa de reciclaje”, aclaró Loles Esteban, secretaria General de Cáritas Teruel.
En Teruel y provincia se recogen cada año más de 240 toneladas de ropa para reciclaje, que posteriormente pasa a las tiendas de segunda mano, como es el caso de Koopera Store. “En Teruel se recogieron, con motivo de la dana, 30 toneladas de ropa en cuatro días, por eso apostamos por el medioambiente”, acotó Antonio Hernández, director de Cáritas Diocesana de Teruel y Albarracín. 
“Es ropa de calidad, pues es ropa que ha estado en el mercado anteriormente. Además contamos también con ropa nueva que viene de donaciones. Este puede ser el mejor regalo de Navidad”, indicó Loles Esteban. Solamente el 15% de la ropa que llega de contenedores vuelve otra vez a tienda ya que el riguroso proceso de adecuación, higienización y etiquetado no permite pasar el filtro de calidad a todo el volumen recibido. Cáritas tiene a disposición dos plantas de reciclaje más en Bilbao y Barcelona.