Adif reconoce las dificultades para desviar mercancías por Tarragona

El propio Adif reconoce en la última edición del Catálogo de Restricciones de Capacidad para los próximos meses, las dificultades que el corte de la línea de Teruel entrañará para el desvío de los trenes de mercancías, ya que la alternativa es el corredor que va a Tarragona, que también tiene limitaciones por obras. En el caso de los viajeros, Renfe prevé ofertar un servicio alternativo por carretera para seguir prestando las conexiones actuales pero en autobús.

El Catálogo de Restricciones advierte en su documento sobre la capacidad disponible para el desvío de trenes por el corte total que va a sufrir el próximo año, que en el caso del tramo entre Sagunto y Caminreal existe una “baja capacidad de desvío” por la línea 600, que es la de Tarragona, debido a que la misma está “limitada por próximas restricciones”. En el caso del tramo Bifurcación de Teruel-Caminreal, el documento también se refiere a la dificultad de desviar tráficos por Tarragona debido a que está “saturada por restricciones por obras de la propia línea”.

En el caso de los viajeros, fuentes de Renfe indicaron que si Adif les comunica el corte de la vía por obras, ofertarán a los viajeros un plan alternativo de transporte por carretera durante el tiempo que dure. La contratación de este servicio no se encuentra todavía ofertada en la plataforma de contratación del sector público.

Fuentes sindicales de CCOO indicaron por otra parte que los trabajadores de la residencia de maquinistas de Teruel están negociando una solución al personal de conducción, y que esperan a principios de diciembre para conocer una respuesta.

Las obras por las que se cortará totalmente la línea de tren durante casi todo el año que viene consisten en la ampliación de los gálibos de los túneles y los pasos superiores. Los mismos son de baja altura y en su estado actual no permiten el paso de la catenaria, por lo que hay que acometer diferentes actuaciones con soluciones individualizadas para cada caso concreto.

En total es preciso adecuar los gálibos de 19 túneles y de 45 pasos superiores en todo el recorrido de la línea entre Zaragoza y Sagunto. De esta forma se espera avanzar en la electrificación de la vía convencional pero sin modificar trazados, ya que estos trabajos no son los del Corredor Cantábrico-Mediterráneo de doble vía para tráfico mixto, sino una adaptación de la infraestructura para poder electrificarla. El plan director de esta intervención se inició en el año 2017 y Adif lleva ya movilizados más de 500 millones de euros.