Ritamarindo, artista y artesana: "Históricamente la mujer ha estado siempre escondida también en el ámbito del arte"

Ritamarindo es el pseudónimo de Maryán Núñez, pintora y artesana de joyas de Calamocha, que pasa el año a caballo entre la localidad del Jiloca, donde tiene el estudio y México, de donde proceden buena parte de sus influencias plásticas. El universo femenino está en el centro de su imaginario creativo, y forma parte del calendario Pioneras 2024 editado por la Diputación Provincial.

-Desde su punto de vista, ¿el mundo del arte es otro de los nichos en los que la mujer parte en desventaja con respecto al hombre?
-Históricamente la mujer artista siempre ha estado escondida, hay muchos casos de autoras que han tenido que firmar sus obras con nombres masculinos. Aunque eso ha cambiado, creo que hay que seguir luchando para que la mujer tenga más visibilidad. En mi experiencia personal yo no me he encontrado con barreras, en parte porque yo habitualmente paso la mitad del año en México. Allí se da un fenómeno que se denomina malinchismo, que consiste en dar más importancia a lo extranjero que a lo mexicano, así que eso, que es otra injusticia, me ha beneficiado a mí porque pesa más ser europea que ser mujer. Por otro lado también es cierto que lo femenino siempre ha estado en mi imaginario creativo, lo que me ha dado muchas oportunidades creativas en ámbitos en los que la mujer me ha buscado.

-Esa visión artística hacia lo femenino que, efectivamente, forma parte integral de su trabajo, ¿tiene un sentido reivindicativo o puramente estético?
-Tiene de los dos. Siempre me han apasionado las profundidades de la mujer más allá incluso del arte, y he indagado mucho en ese tema, en parte por lo terapéutico que tiene ese autoconocimiento. Este interés que siempre he sentido por lo que sucede en las profundidades de la cabeza y el corazón femenino tiene algo de sororidad, sin duda.

Lo femenino

-¿Qué diría que caracteriza lo femenino a diferencia de lo masculino?
-El poder tan especial que tiene. Ahora mismo, justo cuando estoy esperando un bebé, siento más que nunca que la mujer es la creadora absoluta de la vida. Asociar siempre a la mujer como la madre, la creadora, un ente con enorme poder, es algo que siempre está en mi pintura.

-¿Diría que el arte que concibe y materializa una mujer es diferente al que hace un hombre?
-Tengo la sensación de que sí, pero no puedo expresar con palabras. La mente y el corazón de hombres y mujeres se mueven de diferente manera, y supongo que eso se manifiesta en los temas que aborda el artista de un sexo u otro, o cómo los aborda. Es algo difícil de verbalizar aunque interesante, me gustaría comprobarlo y experimentar sobre eso.

-Usted que conoce bien ambas sociedades, ¿la situación de la mujer con respecto al hombre es similar en España y México?
-Por desgracia en México el arraigo del machismo es mucho más brutal. Las estadísticas oficiales dicen que en México mueren 10 mujeres al día por feminicidio, y yo creo que se quedan cortas. La perspectiva es que allí tienen que cambiarse todavía muchas más cosas, y desde luego la lucha que en este sentido tiene lugar en México es mucho más dura, más desgarradora, y se desarrolla en un ámbito mucho menos pacífico.

-Además de mujer usted es artista y artesana. Y entre estas dos actividades, el arte y la artesanía, también existe conflicto. ¿Es más valioso o valuable el uno que el otro?
-Este debate tampoco es sencillo, y lleva abierto mucho tiempo. ¿Vale más uno que otro? Es cierto que la pintura u otras formas de arte llegan a tener precios que a veces no entiendo, pero más allá de esos casos, personalmente creo que el arte es más exclusivo, más intuitivo y más profundo que la artesanía, que quizá es más mecánica. Pero también está trabajada con el corazón al mismo tiempo que con las manos, y para mí eso tiene un valor excepcional.

-¿Qué consejo daría a las niñas que vayan a ser las pioneras del futuro?
-Que confíen en su intuición. A mí me surgió desde pequeña creer en lo que hacía. En el ámbito del arte, sobre todo, no van a faltar voces que digan, y más ahora en este momento tan rápido y capitalista, que se dediquen a cosas más productivas. Yo me cansé de oir que Bellas Artes era Bellas Hambres, pero siempre me entró por un oído y me salió por el otro. Suena un poco utópico pero la vida es una sola, y creo que si te dejas llevar por tu intuición es más probable que la vivas mejor, y que trabajar se convierta en tragozar, que te guste lo que haces todos los días. Yo lo he conseguido y no ha sido fácil, pero tampoco ha sido difícil porque creí en mi instinto.