Teruel vibra con las leyendas del fútbol sala en una tarde festiva en Los Planos

El Pabellón de Los Planos cambió de deporte y de distribución habitual para acoger la primera fiesta del fútbol sala del año, con la disputa del I Torneo Gobierno de Aragón entre un combinado de representantes turolenses y los veteranos de la selección española. El resultado, 1-4 a favor del equipo nacional, fue lo de menos en una jornada de exhibición en la que público de todas las edades volvió a disfrutar del futsal en la ciudad de Los Amantes.

La fría tarde acompañaba para acudir a disfrutar del espectáculo del fútbol de salón. Unas doscientas personas hicieron acto de presencia para presenciar un evento entretenido y competido a partes iguales. Pese a que el duelo se presentaba como un choque amistoso y festivo, la intensidad no faltó en ningún momento del choque. Ambos equipos daban muestras de la calidad que, todavía y pese a la forma física, atesoran sus jugadores.
 

Tras cinco primeros minutos de igualdad y batalla por parte de ambos conjuntos, el combinado nacional empezó a dar muestras de superioridad. De hecho, el primer tanto del encuentro llegó en el minuto seis por medio de Wiwi, que finiquitó una jugada de pizarra a la salida de un córner. No obstante, la reacción turolense no se hizo esperar y llegó en forma de contragolpe, con ovación de la afición incluida. El disparo de Fede, número ocho de los de casa, se topó con el larguero y la ventaja de los exinternacionales se mantuvo en el electrónico.

Pese a ello, los azules se adueñaron del esférico y anularon parcialmente las ofensivas de los de la selección. No obstante, el balón parado volvió a pasar factura a los de casa. De nuevo Wiwi encontró fortuna en un saque de esquina para hacer el segundo de la tarde en un pabellón de Los Planos en el que pequeños y mayores se lo pasaron en grande.
Los del Yus Teruel estuvieron a punto de reducir las diferencias poco después. Pascual Torrijo primero, con un balón al palo, y Luis Peiró después, con una buena intervención del guardameta español, tuvieron en sus botas el primero de los turolenses, que no bajaban los brazos, cuando el primer tiempo ya estaba llegando a su fin.
 

Pero Wiwi llegó en modo intratable a Teruel. El número cuatro del combinado nacional se hizo con el balón en campo contrario y volvió a demostrar que el tiempo no ha pasado por sus piernas. Dribló a dos defensas e hizo el tercero para la selección española de veteranos antes del paso por los vestuarios.
En la reanudación, los turolenses se plantaron sobre el parqué de Los Planos con la intención de empequeñecer la renta. Las primeras ocasiones cayeron de su lado para disfrute de los aficionados, que ansiaban el tanto de los locales. 

Y terminó por llegar en el minuto diez de la segunda mitad. De nuevo a la salida de un córner, llegó el gol. Un disparo rebotado terminó colándose en la meta de los españoles y poniendo algo de picante a un encuentro cada vez más dominado por los de casa. Pero el combinado de veteranos internacional demostró que todavía guarda mucha pólvora y volvió a tomar el mando del amistoso. Carlos Muñoz hizo el cuarto para la selección tras varios rechaces y calmó la reacción de los turolenses.
 

En la recta final, ambos conjuntos quisieron finiquitar a lo grande tratando de ampliar sus cifras anotadoras. Fueron los minutos más bonitos de la tarde, ya que las idas y venidas de ambas escuadras eran alentadas por los gritos del sector más joven de aficionados, que sin tener muy claro con cuál de los dos equipos iban, animaban a ambos por partes iguales. 

Los porteros también quisieron tener parte de protagonismo en la exhibición y evitaron que el marcador se moviese durante los últimos minutos de encuentro. Tras cuarenta minutos de fiesta y disfrute, el choque concluyó con un 1-4 favorable a la selección española de veteranos y el aplauso de un pabellón de Los Planos, con unos doscientos aficionados en sus gradas.

La foto de familia, con presencia de multitud de niño que bajaron a la pista a conocer a las leyendas del fútbol sala español, y la entrega de trofeos puso el broche final a la jornada festiva, que sirvió para volver a sacar a la palestra el fútbol sala en Teruel. Además, la cita también sirvió como primer aperitivo del gran duelo amistoso que disputarán las dos mejores selecciones absolutas del mundo, la española y la brasileña, en el mismo escenario en el que ayer lo hicieron los veteranos.