Síguenos
Pamesa Teruel lleva diecisiete presencia consecutivas en la Copa del Rey Pamesa Teruel lleva diecisiete presencia consecutivas en la Copa del Rey
El Pamesa tiene que ganar este sábado para seguir su idilio con la Copa

Pamesa Teruel lleva diecisiete presencia consecutivas en la Copa del Rey

El conjunto naranja solo se ha perdido una edición desde su ascenso a Superliga
banner click 236 banner 236

La Copa peligra para el Pamesa Teruel. Después de 17 presencias consecutivas en el torneo del KO los naranjas podrían quedarse fuera de una de sus competiciones fetiche. Los errores cometidos en este inicio liguero pasan factura y todo se decidirá en el choque de este sábado frente a Leleman Conqueridor.

Los naranjas comenzaron la temporada asegurando que Maxi Torcello disponía bajo su dirección de un roster mucho más amplio que el del año pasado. Sin embargo el equipo se presenta en la última jornada de la primera vuelta, la que decide los clasificados para la Copa del Rey, sin los deberes hechos. Los irregular trayectoria mostrada desde el inicio de la competición ha complicado la presencia del equipo en una de sus competiciones fetiche.

Diecisiete presencias consecutivas acumula el club bajo sus distintas denominaciones en este torneo. El CV Teruel logró el ascenso a Superliga en la temporada 2005-2006. Desde entonces su presencia copera ha sido todo un clásico, con la única excepción de la campaña 06-07, la primera de las que milita en Superliga y en la que todo el esfuerzo de la entidad se centro en conseguir la permanencia

Junto a Unicaja Almería forman la dupla de clásicos de esta competición. Un tiempo en el que el club ha sumado seis entorchados coperos a su palmarés. Sea cual sea el formato elegido ambos han estado presentes en el torneo. El resto de rivales ha ido variando en función de los años.

Este sábado todo puede cambiar. Una victoria de los de Maxi Torcello garantiza la presencia en la cita madrileña del mes de febrero. En caso de no lograr el objetivo habría que esperar a ver lo que sucede en otras pistas. Sobre todo en la visita que el San Roque canario desarrollará a la cancha lucense del Arenal Emevé.

 

Males iniciales

Pero suceda lo que suceda en la última jornada los males naranjas vienen desde mucho antes. A principio de temporada se conformó una plantilla más potente y con mayor número de recurso que la del ejercicio precedente. El técnico Maxi Torcello así lo vino asegurando desde que se inició la pretemporada en el mes de agosto.

Sin embargo la regularidad no ha terminado de llegar. Tras un inicio prometedor el equipo entró en una barrena de resultados difíciles de imaginar apenas unas semanas antes. Victorias excesivamente ajustadas ante rivales teóricamente asequibles, como el propio San Roque, en la segunda jornada o el Conectabalear Manacor en la sexta, se han visto acompañadas por derrotas inexplicables como la sufrida ante el Arenal en la séptima.

 

Cuatro derrotas

Curiosamente el 3-1 con el que concluyó la visita a Lugo abrió una brecha de cuatro derrotas consecutivas, en las que no se ha sumado un solo punto en el casillero naranja. Tras ese marcador llegaron sucesivamente el 0-3 ante Guaguas, el 3-0 frente a Melilla y esta semana el 3-0 con el Unicaja. Nueve sets encajados y ninguno logrado por el bloque de Los Planos.

Eso dicen los números, y con la excepción de la visita al Moisés Ruiz, el juego tampoco ha respondido a las expectativas creadas. Bien es cierto que durante este tiempo el equipo ha sufrido contratiempos en forma de ausencias y lesiones. La marcha de Áxel Téllez y Mauro Zelayeta a los Juegos Panamericanos resultó muy difícil de compensar. Ambos eran piezas clave en los planes del técnico e incluso después de su vuelta les costó un buen número de semanas adaptarse a la competición nacional. De hecho tanto el central como el receptor han sufrido problemas que impidieron su presencia sobre la pista tanto como le hubiera gustado a Maxi Torcello.

A ellos se une también la irregularidad del opuesto Miguel Ángel Martínez. La llegada de este colombiano aparecía como una apuesta por un jugador con infinitas posibilidades de mejora en su rendimiento. Sin embargo Maxi en Melilla optó por otras alternativas en el juego. A ello se unió posteriormente la enfermedad del jugador que le impidió estar presente tanto el choque de vuelta de la Challenge Cup ante el Panvita Pomgrad, como este último sábado en Almería.

Muchos contratiempos para un equipo que ahora solo tiene en mente revertir la situación en el compromiso sabatino frente a un Leleman que acaba de estrenar técnico en la figura de Marcos Dreyer.

El redactor recomienda