José Serrano sometiendo a uno de sus rivales
José Serrano, de la casualidad al bronce nacional de lucha Grappling
El peleador turolense logró este fin de semana el tercer puesto en el Campeonato de España
A veces de las mejores casualidades salen los mejores resultados. Por casualidad descubrió Alexander Fleming la penicilina y a partir de una casualidad empezó a competir el turolense José Serrano en el Grappling para años más tarde hacerse con un bronce en el Campeonato de España. El pasado fin de semana José Serrano logró a sus 17 años adjudicarse la tercera posición en el campeonato nacional de Grappling U20 celebrado en Gijón, una modalidad de la lucha olímpica que permite continuar la pelea en el suelo, así como las finalizaciones y la sumisión.
José Serrano era un chico común, que practicaba deportes comunes. Sin embargo, un buen día, mientras cursaba 4º de ESO, llegó a su entonces instituto, La Salle, un profesor de prácticas, que a su vez era un competidor valenciano llamado Ramón Ibáñez, y les dio unas clases de Grappling. Ramón vio a José con buenas aptitudes para este deporte, por lo que le recomendó que se lo tomara más enserio y se apuntara a la escuela Freetime de Teruel. Tras un periodo de negociaciones con sus padres, ya que estos en un primer momento veían algo peligroso que su hijo se introdujera en el mundo de las artes marciales, José Serrano los consiguió convencer y optó por hacer caso a aquellas indicaciones y apuntarse a la escuela turolense. A partir de ahí el resto es historia. Así pues, de una casualidad que comenzó con aquella clase de prueba impartida por Ramón Ibáñez nació el actual medalla de bronce de esta disciplina.
El torneo no arrancó de la mejor manera para el turolense, pues en el primer combate se vio las caras ante Vicenzo Bussoti, el representante andaluz de 19 años que cuenta con un futuro prometedor, ya que también ha sido capaz de derrotar a peleadores de la categoría sénior, y que luego ganó el oro, por lo que José no pudo hacer mucho y salió derrotado. Sin embargo, el hecho de que su rival accediera a la final le concedió una oportunidad al peleador turolense en la repesca. Una oportunidad que no desaprovecharía. Así pues, José derrotó a la federación asturiana y a la navarra primero para después derrotar al representante valenciano Aymane Aouache y colgarse la medalla de bronce.
No obstante, esto es tan solo la punta del iceberg, ya que José Serrano tiene el objetivo claro de conseguir el oro de su categoría (sub-20 y -66 kilogramos) y no piensa parar de pelear física y mentalmente hasta conseguirlo. De esta manera, esta semana el turolense ya ha vuelto a los entrenamientos con esa idea entre ceja y ceja. Algo que destaca su entrenador Carlos Polo es precisamente su “compromiso con el trabajo”, por lo que en la escuela Freetime de Teruel nadie duda de sus capacidades: “La verdad es que los que van a competir son todos muy serios y muy comprometidos, pero José es especial en cuanto a actitud y a aptitudes”, añadía Carlos.
Antes de esta edición José ya compitió en este mismo campeonato en la categoría sub-17 y logró llevarse el quinto lugar, por lo que su progresión es ascendente en un deporte que cada vez gana más adeptos y más nivel, por lo que cada vez es más complicado lograr cosas importantes. Aun así, José lo tiene claro y, como buen peleador, piensa seguir progresando al ritmo que marcan sus técnicas.
José Serrano era un chico común, que practicaba deportes comunes. Sin embargo, un buen día, mientras cursaba 4º de ESO, llegó a su entonces instituto, La Salle, un profesor de prácticas, que a su vez era un competidor valenciano llamado Ramón Ibáñez, y les dio unas clases de Grappling. Ramón vio a José con buenas aptitudes para este deporte, por lo que le recomendó que se lo tomara más enserio y se apuntara a la escuela Freetime de Teruel. Tras un periodo de negociaciones con sus padres, ya que estos en un primer momento veían algo peligroso que su hijo se introdujera en el mundo de las artes marciales, José Serrano los consiguió convencer y optó por hacer caso a aquellas indicaciones y apuntarse a la escuela turolense. A partir de ahí el resto es historia. Así pues, de una casualidad que comenzó con aquella clase de prueba impartida por Ramón Ibáñez nació el actual medalla de bronce de esta disciplina.
El torneo no arrancó de la mejor manera para el turolense, pues en el primer combate se vio las caras ante Vicenzo Bussoti, el representante andaluz de 19 años que cuenta con un futuro prometedor, ya que también ha sido capaz de derrotar a peleadores de la categoría sénior, y que luego ganó el oro, por lo que José no pudo hacer mucho y salió derrotado. Sin embargo, el hecho de que su rival accediera a la final le concedió una oportunidad al peleador turolense en la repesca. Una oportunidad que no desaprovecharía. Así pues, José derrotó a la federación asturiana y a la navarra primero para después derrotar al representante valenciano Aymane Aouache y colgarse la medalla de bronce.
No obstante, esto es tan solo la punta del iceberg, ya que José Serrano tiene el objetivo claro de conseguir el oro de su categoría (sub-20 y -66 kilogramos) y no piensa parar de pelear física y mentalmente hasta conseguirlo. De esta manera, esta semana el turolense ya ha vuelto a los entrenamientos con esa idea entre ceja y ceja. Algo que destaca su entrenador Carlos Polo es precisamente su “compromiso con el trabajo”, por lo que en la escuela Freetime de Teruel nadie duda de sus capacidades: “La verdad es que los que van a competir son todos muy serios y muy comprometidos, pero José es especial en cuanto a actitud y a aptitudes”, añadía Carlos.
Antes de esta edición José ya compitió en este mismo campeonato en la categoría sub-17 y logró llevarse el quinto lugar, por lo que su progresión es ascendente en un deporte que cada vez gana más adeptos y más nivel, por lo que cada vez es más complicado lograr cosas importantes. Aun así, José lo tiene claro y, como buen peleador, piensa seguir progresando al ritmo que marcan sus técnicas.