Carlota Gasión y Andrés Mata dominan en la San Silvestre de Andorra

Como ya viene siendo tradición, la tarde del 31 de diciembre a las 17:30 horas arrancaba en la Avenida de San Jorge de Andorra la vigésimo séptima edición de la San Silvestre de la villa minera, carrera donde se daban cita en esta ocasión 425 corredores de todas las edades, muchos de ellos disfrazados, para recorrer los dos kilómetros del circuito urbano preparado para esta ocasión. La carrera, organizada por el Servicio Municipal de Deportes del Ayuntamiento de Andorra, contaba con la colaboración del Club de atletismo Zancadas, Protección Civil, la Brigada Municipal, Guardia Civil y más de 40 personas voluntarias, algunos de los cuales han colaborado en absolutamente todas las ediciones de esta prueba deportiva.

Todo este elenco de personas conseguía que la carrera se desarrolle en unas condiciones idóneas de seguridad. Y con alto nivel de satisfacción, según el propio club, que recuerda que para la mayor parte de los corredores, voluntarios y personas que animaban durante el recorrido, la San Silvestre es una forma lúdica y divertida de despedir el año en compañía de los convecinos, filosofía similar y repetida en toda la provincia, en todas las carreras organizadas para este día.

Ganadores en un pañuelo

A su vez, un nutrido grupo de corredores daban lo mejor de sí mismos para lograr un buen puesto en la clasificación o una buena marca. Y entre estos, según la clasificación proporcionada por la organización, destacaba el alto nivel de los atletas ganadores, que además presentaron poca diferencia en sus tiempos de carrera. En categoría masculina, la San Silvestre de Andorra coronaba a Andrés Mata, con un tiempo de poco más de seis minutos, y en femenina la victoria fue para Carlota Gasión, la alcorisana, que se fue por debajo de los seis minutos y medio para comandar en féminas.
 

Tras Mata, segunda plaza para David Rico y tercera para Alberto López, ambos menos de diez segundos por detrás del vencedor, mientras que Gasión sí fue capaz de establecer diferencia con sus competidoras; Ana Castro alcanzó la segunda posición femenina con un tiempo de siete minutos y veintes segundos, mientras que Olivia Gasión entró por encima de los ocho minutos para completar el podio.

Los primeros en Alcañiz

En Alcañiz, también amplia participación y alto nivel, centenares de atletas congregados en la tradicional y veterana Carrera del Pavo, con victoria para Laura Clavería en féminas y Javier Rodríguez en chicos. El Club Tragamillas organizaba esta nueva edición de la carrera de fin de año más veterana de Aragón, una nueva fiesta atlética incluida en el calendario autonómico de la Federación Aragonesa y que mezclaba el atletismo popular con el competitivo que repartió también premios para los mejores disfraces de equipos e individuales, premios y primas deportivas y una bolsa corredor para las primeras 400 inscripciones.

La edición número 55 de esta carrera alcañizana daba comienzo a las cinco de la tarde con las categorías de iniciación para ir elevando la edad hasta llegar a la carrera absoluta femenina, comenzada a las seis y veinte de la tarde, y la masculina alrededor de las siete menos cuarto, ambas sobre un recorrido de dos kilómetros y medio de trazado urbano que comenzaba en la Plaza de España.

Un rompepiernas técnico y de alta exigencia, menor para edades más tempranas, con el que la capital bajoaragonesa da la bienvenida a 2025, año en el que el calendario deportivo de la ciudad vuelve a preverse intenso y cargado de citas de máximo interés no solamente en el motor, también en lo que concierne al atletismo, al ciclismo y al resto de modalidades deportivas.

Ambiente de gala en Utrillas

También se ha registrado una amplia participación en la carrera San Silvestre de Utrillas, en la que se registró la victoria de Hamza El Amraoui en categoría masculina y de Raquel Buj en femenina, dominando un podio en el que se ha visto un nivel competitivo muy por encima de lo esperado. Ayudó a ello la condicion meteorológica y ambiental, una mañana soleada que acompañó a la carrera del pavo más madrugadora de la provincia.

Pero, sobre todo, la gran cantidad de participantes, cerca de 120 en la prueba utrillense, motivaron a los atletas para bajar tiempos y dejar una buena sensación deportiva y de convivencia en la villa minera. Atletas entre los tres años, muy jovencitos, y los 65, bien jóvenes también, completaron el recorrido de la prueba.