Campo Pinilla se acostumbra a lucir sus mejores galas en esta temporada

Desde que el CD Teruel ha acostumbrado a sus seguidores y a la ciudad a competir con y traer equipos de fútbol de repercusión nacional, el efecto inmediato sobre Campo Pinilla está siendo el de batir récords de aficionados, registrar grandes llenos y entradas de alta asistencia para partidos algunos de los cuales han sido pioneros, nunca celebrados en la ciudad. Militar en Primera RFEF está trayendo esta consecuencia, pujar por la categoría con equipos históricos, de carácter profesional; el 70% de los conjuntos con los que compite el Teruel este año han militado en categorías superiores, en la Liga de Fútbol Profesional, alguna vez en los últimos diez años.

El último de ellos, un campeón de Liga y Copa, el Deportivo de La Coruña, cuya visita este sábado, saldada con derrota local, llenó Campo Pinilla con un total de 2.927 espectadores contabilizados. Hay que bucear en el tiempo para encontrar alguna entrada siquiera comparable. Ayudó el hecho de que más de medio millar de seguidores gallegos acompañaron al equipo coruñés. Pero no es menos cierto que el coliseo turolense dio aspecto de gran mayoría de afición local, con más de 2.000 seguidores rojillos en las gradas. 

La Copa ante Las Palmas

El primer gran referente reciente de grandes entradas en Campo Pinilla se remonta a la pasada temporada, en Copa del Rey, con la visita de la UD Las Palmas. Aquella derrota copera significó sin embargo que la afición turolense comenzaba a considerar que los tiempos deportivos en el equipo caminaban hacia escenarios superiores al ámbito regional en el que históricamente se ha movido el CD Teruel. En aquella eliminatoria era aún equipo de Segunda RFEF. Pero la expectación del duelo mostró una excelente salud de la masa social rojilla. Los partidos culminantes camino del ascenso en casa confirmaron esa sensación. 

Eso sí, nada comparable con los registros de esta temporada. Cierto es que la visita del Dépor batió marcas, pero también es verdad que Campo Pinilla ha estado en la barrera de los 2.000 espectadores, incluso superándolos, en otros partidos más dentro de esta misma temporada en Primera RFEF. Se vio, por ejemplo, el día de la visita del Barcelona Atlètic, con mucha menor presencia de aficionados rivales. Y se pudo ver en partidos en casa como el del Real Unión o el del Nàstic de Tarragona. 

Empuje para lo que queda

De hecho, estos taquillajes estuvieron bastante por encima del enfrentamiento que teóricamente se marcaba como una de las grandes citas del Teruel en esta campaña, la visita de la SD Tarazona. Fue buena tarde de fútbol también, con cerca de 1.500 aficionados en las gradas de Pinilla. Pero las cifras que maneja el club hablan de otros varios enfrentamientos con asistencia similar en el coliseo mudéjar. Cabe recordar que la cifra de abonados del equipo está por encima de los 1.300 para esta temporada.

Así que toca aprovechar este empuje y convertirlo en una ayuda deportiva insustituible en la batalla que le queda al equipo para salvar la categoría. Dos enfrentamientos directos en Pinilla, ante Sestao y Osasuna B, habrán de marcar el devenir del equipo. Si Campo Pinilla se acerca a las mejores galas que ya ha lucido, el primer gol lo habrá marcado la afición, y podría ser clave.