Teruel es el lugar del centro de España que atesora una mayor riqueza de minerales

Teruel es una potencia nacional en cuanto a minerales se refiere y no sólo por sus grandes reservas de carbón –que realmente no es un mineral, aclara el catedrático Miguel Calvo- que durante años apuntalaron la economía de las Cuencas Mineras de Teruel, sino porque a lo largo de la historia ha aprovechado diferentes y singulares minerales, como el alumbre, el azabache o la cristobalita. De todo ello habló Miguel Calvo durante el I Simposio de Paleontología y Mineralogía que concluyó ayer lunes en Utrillas y por el que, a lo largo de cinco días, han pasado más de 450 personas.

Miguel Calvo es catedrático de Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Zaragoza, químico de formación y coleccionista de minerales desde niño, y fue el encargado de hablar de los “minerales muy interesantes” que hay en la provincia de Teruel, como la pirita, que es “una molestia importante en el carbón que da lugar a diferentes sulfatos que históricamente también se explotaron”. El de mayor relevancia es el alumbre, que tuvo una gran importancia en el siglo XVIII puesto que se usaba como fijador de colorantes a la hora de teñir los tejidos. “Durante muchos siglos el Papa fue el único suministrador”, especificó, para añadir que después hubo varios yacimientos en España, entre ellos el de Teruel, que era “un poco artesanal” pero de gran importancia porque servía de apoyo a la economía agrícola. Esto también ocurría con otros minerales, que se explotaban de forma artesanal como el azabache o el sulfato de hierro, que se empleaba para fabricar tinta.
 

Estos no eran los únicos minerales vinculados al lignito, ya que también propiciaba la formación de cristales de yeso, de los que hay varios ejemplos en diferentes museos.

Calvo habló de otros recursos más raros, como la cristobalita, que es arcilla cocida por capas de lignito, un proceso que pudo producirse hace cientos de años. Además, en Teruel hay plomo, antimonio o manganeso, así como hierro en Ojos Negros, “cuyas minas son de gran relevancia desde el punto de vista económico y científico”.

El especialista también mostró imágenes de unas geodas de amatista parecidas a las que se importan desde Brasil pero que, en este caso, habían sido localizadas en la zona de Azaila.

“Teruel da mucho de sí”, prosiguió, para indicar que junto con la amatista aparece otro mineral denominado celestina, un nombre que recibe de su color azul pero que en Teruel no tiene este tono sino otros anaranjados, dijo.

El I Simposio de Paleontología y Mineralogía de Utrillas fue todo un éxito a juicio de Antonio Fontenla, que es concejal en el Ayuntamiento y uno de los organizadores del mismo. Señaló que pese a la intensa actividad que hubo durante todo el fin de semana en la zona, todas las charlas contaron con una importante afluencia de público y la exposición recibió copiosas visitas.
 

Objetivo cumplido

Fontenla destacó tanto la charla de Calvo como las que ofreció Juan Carlos Escudero sobre Paleontología y fósiles, algunas de ellas se repitieron para poder llegar a más público. El edil destacó la gran capacidad de Escudero para adaptarse al perfil de personas que había en ellas.

En cuanto al objetivo del Simposio, que era divulgar la riqueza de minerales y restos paleontológicos en la zona, “se ha cumplido perfectamente” puesto que las diferentes propuestas generaron un gran interés tanto entre los propios vecinos como entre los turistas.

La organización suspendió, a causa de las elevadas temperaturas, las salidas al campo para visitar los elementos geológicos sobre el terreno.